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La primera capilla que tuvo el hospital fue demolida en 1690 por su mal estado de conservación. Para la nueva iglesia Pedro Roldán y su hijo, del mismo nombre, realizaron veinticuatro columnas.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=470}} El nuevo templo fue inaugurado el 8 de septiembre de 1730, festividad de la Virgen del Buen Suceso, celebrándose actos festivos solemnes durante ocho días.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=471}}
La primera capilla que tuvo el hospital fue demolida en 1690 por su mal estado de conservación. Para la nueva iglesia Pedro Roldán y su hijo, del mismo nombre, realizaron veinticuatro columnas.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=470}} El nuevo templo fue inaugurado el 8 de septiembre de 1730, festividad de la Virgen del Buen Suceso, celebrándose actos festivos solemnes durante ocho días.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=471}}


El hospital fue desamortizado en 1835. Hubo un proyecto para su derribo, pero este no se llevó a cabo por mediación de la Junta de Beneficencia de Sevilla. Fue alquilado a Francisco de Abaurrea, que lo convirtió en casa de vecinos y mantuvo la iglesia. Posteriormente, el hospital fue vendido a José Capdevila, que lo derribó. Parte de la parcela donde se encontraba se utilizó para reformas urbanísticas del siglo XIX: se ampliaron la calle Ortiz de Zúñiga y la plaza de Argüelles (actual plaza Cristo de Burgos).{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=469}} La iglesia se mantuvo y Francisco de Abaurrea y su familia habitaron en la sacristía hasta que fueron expulsados por el régimen surgido de la Revolución de 1868, que destinó el templo a local de reuniones del batallón de voluntarios del distrito de San Pedro y a almacén de objetos incautados. En 1883 las monjas mercedarias expulsadas del convento de la Asunción se instalaron en este lugar hasta 1895.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=469}}
La capilla primitiva fue demolida en 1690 con la finalidad de construir la iglesia actual que fue inaugurada el 8 de septiembre de 1730. El edificio del hospital fue demolido en el siglo XIX, posteriormente el templo fue cedido primero a la comunidad de religiosas de la Asunción y más tarde a la orden [[carmelitas calzados|Carmelita calzada]], según escrito firmado por el Cardenal [[Marcelo Spinola]] el 16 de julio de 1896, la comunidad carmelita reside en una casa contigua a la iglesia.{{sfn|Cardoso Bueno|2006}}

El 16 de julio de 1896 el cardenal arzobispo [[Marcelo Spinola]] entregó el templo a los carmelitas calzados, que residen en una casa contigua a la iglesia.{{sfn|Cardoso Bueno|2006}} En 1931 el templo fue saqueado por grupos anticlericales.{{sfn|Fernández Rojas|2009|p=469}}


== Descripción de la iglesia ==
== Descripción de la iglesia ==

Revisión del 14:12 26 dic 2017

Iglesia del Buen Suceso
Localización
País España
División Sevilla
Dirección Sevilla
Andalucía Andalucía
EspañaBandera de España España
Coordenadas 37°23′30″N 5°59′25″O / 37.391727777778, -5.9902916666667
Información religiosa
Culto Iglesia católica
Diócesis Sevilla
Historia del edificio
Construcción 1730
Datos arquitectónicos
Estilo Barroco

La iglesia del Buen Suceso es un templo católico de Sevilla (Andalucía, España). Es obra del siglo XVIII realizada según proyecto de los maestros de obras Leonardo de Figueroa y Matías de Figueroa.[1]

Hospital del Buen Suceso

La Mínima Congregación de los Hermanos Enfermeros Pobres fue fundada por Bernardino de Obregón en 1568 para atender a los convalecientes en los hospitales.[2]​ En 1587 les fue entregada la gestión del hospital general de Madrid.[2]

La advocación del Buen Suceso está relacionada con esta congregación. En 1606 dos hermanos del hospital de Madrid, Juan de Fontanet y Guillermo Martínez Rigola, realizaron un viaje a Roma para que el papa autorizara el hábito con el distintivo de la orden.[3]​ En la sierra de Traiguera, provincia de Castellón, hubo una tormenta y se escondieron entre unas peñas, donde encontraron una imagen de la Virgen. Cuando se la mostraron al papa Paulo V este dijo: "Hermanos, buen suceso habéis tenido en vuestro viaje. Téngalo también vuestra pretensión", se quitó una cruz de oro que llevaba y se la puso a la Virgen.[4]​ En 1607 colocaron la imagen en la iglesia del hospital general de Madrid y se creó una hermandad que la tuvo de titular.[3]

En 1634 el superior de la congregación y hermano mayor del hospital general de Madrid envió al hermano lego Carlos de Urreón a Sevilla para fundar un hospital para convalecientes. Urreón le solicitó autorización al cabildo de la ciudad en 1635. Fue autorizado en 1637.[5]

En esas fechas se fundó la Cofradía de Nuestra Señora del Buen Suceso de Sevilla.[5]​ La Virgen del Buen Suceso se encontraba en un tabernáculo en la fachada de una casa de la calle Ejecutor Vega (actual calle Ortiz de Zúñiga), en la collación del Salvador. El cardenal arzobispo Gaspar de Borja y Velasco autorizó la fundación del convento de la congregación y que esta se uniese a la cofradía.[5]

Los obregones compraron unas casas en la plazuela del Mesón de la Castaña, en la collación de San Pedro. Construyeron su hospital en este lugar.[5]

La primera capilla que tuvo el hospital fue demolida en 1690 por su mal estado de conservación. Para la nueva iglesia Pedro Roldán y su hijo, del mismo nombre, realizaron veinticuatro columnas.[6]​ El nuevo templo fue inaugurado el 8 de septiembre de 1730, festividad de la Virgen del Buen Suceso, celebrándose actos festivos solemnes durante ocho días.[7]

El hospital fue desamortizado en 1835. Hubo un proyecto para su derribo, pero este no se llevó a cabo por mediación de la Junta de Beneficencia de Sevilla. Fue alquilado a Francisco de Abaurrea, que lo convirtió en casa de vecinos y mantuvo la iglesia. Posteriormente, el hospital fue vendido a José Capdevila, que lo derribó. Parte de la parcela donde se encontraba se utilizó para reformas urbanísticas del siglo XIX: se ampliaron la calle Ortiz de Zúñiga y la plaza de Argüelles (actual plaza Cristo de Burgos).[3]​ La iglesia se mantuvo y Francisco de Abaurrea y su familia habitaron en la sacristía hasta que fueron expulsados por el régimen surgido de la Revolución de 1868, que destinó el templo a local de reuniones del batallón de voluntarios del distrito de San Pedro y a almacén de objetos incautados. En 1883 las monjas mercedarias expulsadas del convento de la Asunción se instalaron en este lugar hasta 1895.[3]

El 16 de julio de 1896 el cardenal arzobispo Marcelo Spinola entregó el templo a los carmelitas calzados, que residen en una casa contigua a la iglesia.[8]​ En 1931 el templo fue saqueado por grupos anticlericales.[3]

Descripción de la iglesia

Exterior

La fachada cuenta con 3 cuerpos, está realizada con ladrillo avitolado y decorada con óculos. Dispone de varias hornacinas en las que se sitúan esculturas, en el centro la Virgen del Carmen flanqueada por San José con el Niño y el profeta Elías, todas ellas de barro cocido realizadas en el año 2006 por el escultor sevillano Darío Fernández. La puerta es un arco de mediopunto.[1][8]

Interior

Santa Ana con la Virgen Niña de Martínez Montañés

Destacan en el aspecto arquitectónico las 24 columnas de mármol rojo procedentes de Morón de la Frontera. Entre las esculturas notables que decoran el templo se encuentran un San Alberto y una talla de Santa Teresa obras de Alonso Cano fechadas en la primera mital del siglo XVII. También una Santa Ana con la Virgen Niña realizada por Martínez Montañes. El retablo principal está formado por diferentes pinturas realizadas por Domingo Martínez en las que se representan los 40 patriarcas que corresponden a la genealogía de Jesús, en el centro del retablo se encuentra una talla de la Virgen del Carmen realizada por Rafael Barbero en el siglo XX que sustituyó a una escultura anterior de Duque Cornejo que resultó destruida en mayo de 1931.[1][8]

Referencias

  1. a b c Artesacro: Iglesia del Buen Suceso. Consultado el 20 de mayo de 2016
  2. a b Fernández Rojas, 2009, p. 467.
  3. a b c d e Fernández Rojas, 2009, p. 469.
  4. José Trinidad Pineda Reséndiz (2005). «Nuestra Señora del Buen Suceso de Castaños». Crónicas del Camino Real. Revista del Colegio de Investigaciones Históricas del Centro de Coahuila (14-16): 23. 
  5. a b c d Fernández Rojas, 2009, p. 468.
  6. Fernández Rojas, 2009, p. 470.
  7. Fernández Rojas, 2009, p. 471.
  8. a b c Cardoso Bueno, 2006.

Bibliografía

  • Matilde Fernández Rojas (2009). Patrimonio artístico de los conventos masculinos desamortizados en Sevilla durante el siglo XIX. Trinitarios, franciscanos, mercedarios, cartujos, jerónimos, mínimos, clérigos menores, obregones y filipenses. Secretariado de Publicaciones de la Diputación de Sevilla. ISBN 978-84-7798-273-9. 
  • Diego A. Cardoso Bueno (2006). Sevilla. El casco antiguo. Historia, arte y urbanismo. Ediciones Guadalquivir. ISBN 848093154X. 

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