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'''Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro''', ensayista español, de origen gallego y afincado en [[Principado de Asturias|Asturias]]. Nació en 1676 en [[Orense]] y murió en 1764 en [[Oviedo]]. |
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Estudió en [[Salamanca]] y ganó por oposición una cátedra de Teología en la [[Universidad de Oviedo]], en donde residió desde [[1709]] hasta el fin de sus días, si bien se había ordenado sacerdote en el monasterio de San Juan de [[Samos (Lugo)|Samos]] ([[Provincia de Lugo|Lugo]]). Desde muy joven perteneció a la orden de San Benito de Nursia o benedictina y había dado clases en [[Galicia]], en [[Provincia de León|León]] y en Salamanca. Feijoo es considerado el primer ensayista de la literatura española y el más famoso representante de los [[novatores]] o preilustrados españoles: sus obras se reimprimieron sin pausa a lo largo de todo el [[siglo XVIII]] y vino a representar para España, salvadas las distancias, lo que la ''Enciclopedia'' representó para Francia. |
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Hasta [[1725]], Feijoo no comenzó a publicar sus obras, casi todas ellas colecciones de opúsculos polémicos que llamó ''discursos'' (de ''discurrir'', esto es, disertar libremente), verdaderos [[ensayo]]s si la libertad de su pensamiento hubiera sido absoluta. Su obra en este género está integrada, por una parte, por los ocho volúmenes (118 discursos) de su ''Teatro crítico universal'', publicados entre [[1724]] y [[1739]] (el título ''teatro'' ha de entenderse con la acepción, hoy olvidada, de "panorama" o visión general de conjunto), y, por otra, por los cinco de las ''Cartas eruditas y curiosas'', (166 ensayos, más cortos), publicadas entre [[1724]] y [[1760]]. A estas obras hay que agregar también un tomo extra de ''Adiciones'' que fue publicado en [[1783]] y su copiosa correspondencia privada, que continúa inédita hasta el día de hoy. |
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Los temas sobre los que versan estas disertaciones son muy diversos, pero todos se hallan presididos por el vigoroso afán patriótico de acabar con toda [[superstición]] y su empeño en divulgar toda suerte de novedades científicas para erradicar lo que él llamaba "errores comunes", lo que hizo con toda dureza y determinación. Se denominaba a sí mismo "ciudadano libre de la república de las letras", si bien sometía todos sus juicios a la [[ortodoxia]] católica, y poseía una incurable curiosidad, a la par que un estilo muy llano y atractivo, libre de los juegos de ingenio y las oscuridades postbarrocas, que abominaba, si bien se le deslizan frecuentemente los [[galicismo]]s. Se mantenía al tanto de todas las novedades europeas en ciencias experimentales y humanas y las divulgaba en sus ensayos, pero rara vez se propuso teorizar reformas concretas en línea con su implícito progresismo. En cuestión de [[estética]] fue singularmente moderno (véase por ejemplo su artículo "El nosequé") y adelanta posturas que defenderá el [[Romanticismo]], pero critica sin piedad las supersticiones que contradicen la razón, la experiencia empírica y la observación rigurosa y documentada. |
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Sus discursos suscitaron una auténtica tempestad de rechazos, protestas e impugnaciones, sobre todo entre los frailes tomistas y [[Escolástica|escolásticos]]. Las más importantes fueron las de [[Ignacio de Armesto Osorio]], autor de un ''Teatro anticrítico'' ([[1735]]) en dos volúmenes, fray [[Francisco de Soto Marne]], que publicó en su contra dos volúmenes de ''Reflexiones crítico-apologéticas'' en [[1748]]; [[Salvador José Mañer]], quien publicó un ''Antiteatro crítico'' ([[1729]]); [[Diego de Torres Villarroel]] y otros muchos. Le defendieron el doctor [[Martín Martínez]] y los padres [[Padre Isla|Isla]] y [[Martín Sarmiento]] y el mismo rey [[Fernando VI]], quien, por un real decreto de 1750, prohibió que se le atacara. |
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El padre Feijoo publicó asimismo otras obras menores: ''Apología del escepticismo médico'' ([[1725]]), ''Satisfacción al Escrupuloso'' ([[1727]]), ''Respuesta al discurso fisiológico-médico'' ([[1727]]), ''Ilustración apologética'' ([[1729]]), ''Suplemento de el Teatro Crítico'' ([[1740]]) y ''Justa repulsa de inicuas acusaciones''. |
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== Enlaces externos: == |
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*[http://www.filosofia.org/feijoo.htm Biblioteca Feijoniana] |
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[[Categoría:Filósofos de España|Feijoo, Benito Jerónimo]] |
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[[Categoría:Escritores de España|Feijoo, Benito Jerónimo]] |
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[[Categoría:Escritores de Galicia|Feijoo, Benito Jerónimo]] |
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[[categoría:Ilustración en España|Feijoo, Benito Jerónimo]] |
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[[Categoría:Escritores en español|Feijoo Benito Jerónimo]] |
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[[de:Benito Jerónimo Feijóo y Montenegro]] |
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[[en:Benito Jerónimo Feijóo y Montenegro]] |
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[[gl:Frei Benito Xerónimo Feijoo e Montenegro]] |
Revisión del 11:24 29 nov 2005
Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro, ensayista español, de origen gallego y afincado en Asturias. Nació en 1676 en Orense y murió en 1764 en Oviedo.
Biografía
Estudió en Salamanca y ganó por oposición una cátedra de Teología en la Universidad de Oviedo, en donde residió desde 1709 hasta el fin de sus días, si bien se había ordenado sacerdote en el monasterio de San Juan de Samos (Lugo). Desde muy joven perteneció a la orden de San Benito de Nursia o benedictina y había dado clases en Galicia, en León y en Salamanca. Feijoo es considerado el primer ensayista de la literatura española y el más famoso representante de los novatores o preilustrados españoles: sus obras se reimprimieron sin pausa a lo largo de todo el siglo XVIII y vino a representar para España, salvadas las distancias, lo que la Enciclopedia representó para Francia.
Hasta 1725, Feijoo no comenzó a publicar sus obras, casi todas ellas colecciones de opúsculos polémicos que llamó discursos (de discurrir, esto es, disertar libremente), verdaderos ensayos si la libertad de su pensamiento hubiera sido absoluta. Su obra en este género está integrada, por una parte, por los ocho volúmenes (118 discursos) de su Teatro crítico universal, publicados entre 1724 y 1739 (el título teatro ha de entenderse con la acepción, hoy olvidada, de "panorama" o visión general de conjunto), y, por otra, por los cinco de las Cartas eruditas y curiosas, (166 ensayos, más cortos), publicadas entre 1724 y 1760. A estas obras hay que agregar también un tomo extra de Adiciones que fue publicado en 1783 y su copiosa correspondencia privada, que continúa inédita hasta el día de hoy.
Los temas sobre los que versan estas disertaciones son muy diversos, pero todos se hallan presididos por el vigoroso afán patriótico de acabar con toda superstición y su empeño en divulgar toda suerte de novedades científicas para erradicar lo que él llamaba "errores comunes", lo que hizo con toda dureza y determinación. Se denominaba a sí mismo "ciudadano libre de la república de las letras", si bien sometía todos sus juicios a la ortodoxia católica, y poseía una incurable curiosidad, a la par que un estilo muy llano y atractivo, libre de los juegos de ingenio y las oscuridades postbarrocas, que abominaba, si bien se le deslizan frecuentemente los galicismos. Se mantenía al tanto de todas las novedades europeas en ciencias experimentales y humanas y las divulgaba en sus ensayos, pero rara vez se propuso teorizar reformas concretas en línea con su implícito progresismo. En cuestión de estética fue singularmente moderno (véase por ejemplo su artículo "El nosequé") y adelanta posturas que defenderá el Romanticismo, pero critica sin piedad las supersticiones que contradicen la razón, la experiencia empírica y la observación rigurosa y documentada.
Sus discursos suscitaron una auténtica tempestad de rechazos, protestas e impugnaciones, sobre todo entre los frailes tomistas y escolásticos. Las más importantes fueron las de Ignacio de Armesto Osorio, autor de un Teatro anticrítico (1735) en dos volúmenes, fray Francisco de Soto Marne, que publicó en su contra dos volúmenes de Reflexiones crítico-apologéticas en 1748; Salvador José Mañer, quien publicó un Antiteatro crítico (1729); Diego de Torres Villarroel y otros muchos. Le defendieron el doctor Martín Martínez y los padres Isla y Martín Sarmiento y el mismo rey Fernando VI, quien, por un real decreto de 1750, prohibió que se le atacara.
El padre Feijoo publicó asimismo otras obras menores: Apología del escepticismo médico (1725), Satisfacción al Escrupuloso (1727), Respuesta al discurso fisiológico-médico (1727), Ilustración apologética (1729), Suplemento de el Teatro Crítico (1740) y Justa repulsa de inicuas acusaciones.