Diferencia entre revisiones de «Francisco Arderíus»
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Revisión del 07:36 23 jul 2014
Francisco Arderius Bardán (Evora, 17 de septiembre de 1835 — Madrid, 21 de mayo de 1886) fue un músico, actor y empresario nacido en Portugal que, tras unos años en el París de Offenbach, se estableció en Madrid, donde puso en marcha los populares «Bufos madrileños» siguiendo el modelo francés. Teniendo como fondo histórico la revolución septembrina de 1868, la nueva fórmula, con un estilo de teatro musical breve, divertido, picante y superficial, resultó un éxito popular en el marco de la escena española.[1][2]
Biografía
El propio Arderíus dejó un relato, bufo por demás, sobre el origen de su nacimiento, ocurrido en el año 1835, bautizado el 17 de septiembre y registrado en la parroquia de San Antao de Évora al día siguiente. A Arderíus, sin embargo le falló la memoria cuando escribió: "...Hoy que me he decidido a publicar mis memorias, con mi fe de bautismo en la mano, veo que nací en la año 1836 […] mi padre era andaluz; mi madre francesa y mi abuelo materno oriundo de Génova. También tengo un hermano; mi querido y buen Federico, actor muy cachazudo, que va engordando desmesuradamente, el cual nació en Inglaterra.[nota 1]
Sobre sus comienzos en la farándula escribió: "...me contraté de pianista en el café Minerva con cinco reales diarios y cena compuesta de bistek con patatas o café con media tostada a elección [...] Teniendo cierta vocación para la escena, por consejo de un amigo mío fui a ver a Joaquín Gaztambide, empresario del Teatro de Jovellanos, el cual después de muchas dificultades que tuve que vencer me contrató de corista con medio duro diario..." Quizá ocurriera así. Lo cierto es que, por mediación de su tía y madrina, la famosa cantante característica María Bardán, Arderíus fue aceptado en la compañía del teatro Jovellanos, de allí pasó a la del Teatro del Circo y de este al de la Teatro de la Zarzuela.[3]
Arderíus, como quedó constancia en las esquelas de la prensa madrileña, murió el 20 de mayo de 1886 tras padecer una larga enfermedad pulmonar.
Los bufos madrileños
Al parecer, la aceptación que tuvo la zarzuela Los dioses del Olimpo sugirió a Arderíus la idea de montar en Madrid el género bufo de moda en París. Para ello se instaló en el Variedades, teatro popular que re-bautizó con el nombre de Teatro de la Compañía de los Bufos Madrileños. Abrió la temporada en septiembre de aquel año de 1866 con El joven Telémaco, una obra de Eusebio Blasco y el maestro Rogel, que resultó un éxito.[nota 2] Con Arderíus estaban otros libretistas y músicos como Ruiz, Escríu, Orejón y Cubero, Sampelayo y Gómez, Bardan, Rey, Celsa Fontfrede y Hueto. Y con ellos Manuel del Palacio, Eusebio Blasco y Eduardo Saco, que para celebrar el aniversario del nacimiento de Arderíus crearon Tanto corre como vuela.[nota 3]
Como ocurre con todos los proyectos de éxito, la crítica fue mucha y muy variada; quede un ejemplo que firma Antonio Guerra y Alarcón:[4]
"El buen gusto le podrá pedir cuentas de muchos desmanes contra el buen sentido en que incurrieron los cultivadores de un género bastardo, creado por una moda extravagante y pasajera y que envejeció en la juventud; pero es indudable que si Arderíus no hubiera sido el patrocinador de aquellas locuras nacidas en los teatros de París, y que nunca se acomodaron con su genuino y primitivo sabor a nuestra escena, otros empresarios lo hubieran realizado; eran delirios de aquel tiempo, llenos de gracia algunos y chispeantes de ingenio y de malicia, pero torpes y mal intencionados con frecuencia."
Y con igual éxito se trasladaron luego sus bufos al Teatro del Circo.[5]
La Correspondencia de los Bufos
Este fue el nombre del semanario editado durante 1871 por Arderius, y subtitulado como periódico semanal: eco parcial de la empresa de Los Bufos Arderius. De talante apolítico, y concebido para defender el buen nombre y los intereses de la Compañía Los Bufos Arderius, incluyó también información de otros teatros y espectáculos, incluidos bailes, ferias y actividades de los salones aristocráticos de Madrid. Su tono burlesco se adornó con charadas, poemas, epigrámas y un espacio dedicado al folletín. A partir del número seis, sus portadas incluyeron grabados y caricaturas de Cubas. Dirigido por Alfredo Guerra Arderius, entre sus numerosos colaboradores estuvieron Antonio de San Martín, Santiago Infante de Palacios, Mariano Leorroux y Francisco Asenjo Barbieri. Compuesto de cuatro páginas, llegaron a editarse 26 números. Aunque en el del 12 de agosto de 1871 se despidió hasta octubre, ya no volvería a aparecer.
Notas
- ↑ San Martín, Antonio (1870), Confidencias de Arderius. Historia de un bufo, referida por D. Antonio de San Martín. Madrid: Imp. Española, pág. 44.
- ↑ Se ha convenido entre los cronistas que fue de esta zarzuela de donde surgió el hábito de llamar "suripantas" a las coristas, por un coro de mujeres que imitando la eufonía griega con palabras desatinadas, cantaban este estribillo sin sentido: «Suripanta la suripanta, macatrunqui de somatén, sunfáriben sunfaridon, melitónimen sonpén».
- ↑ Aparecía en escena, sobre un pedestal, el busto de Arderíus, con tal propiedad y una inmovilidad tan absoluta, que el público no pudo reconocer al actor en la aparente escultura, hasta que le vio salir del pedestal y bajar al proscenio para saludar a los espectadores.
Referencias
- ↑ Barrera, 1983, p. 71-72.
- ↑ Barreiro Sánchez, 2009, pp. 96-97.
- ↑ Barreiro Sánchez, 2009, p. 98.
- ↑ Guerra y Alarcón, Antonio (1886), La América Madrid, 28 de mayo, pág. 13-14.
- ↑ De Répide, 1981, p. 583.
Bibliografía
- Arderius (16/02/1871 al 12/08/1871). La Correspondencia de los Bufos (Madrid) http://hemerotecadigital.bne.es/details.vm?lang=es&q=id:0003708561
|url=
sin título (ayuda). Parámetro desconocido|ISNN=
ignorado (ayuda) - Arderius, Francisco (1870). Confidencias de Arderius: historia de un bufo. Madrid: Imprenta Española.
- Barreiro Sánchez, Sergio (2009). «La escena madrileña en la segunda mitad del siglo XIX: Francisco Arderíus y Los Bufos Madrileños». Stichomythia 8 (Alcalá de Henares): 96-107. Parámetro desconocido
|ISNN=
ignorado (ayuda) - Barrera, Antonio (1983). Crónicas del género chico y de un Madrid divertido. Madrid: El Avapies. p. 71-77. ISBN 84-86280-02-8.
- Cambronero, Carlos (1913). «Crónicas del tiempo de Isabel II: Teatro de Variedades». (en dominio público). La España Moderna (Madrid).
- De Répide, Pedro (1981). Las calles de Madrid. Madrid: Afrodisio Aguado. p. 583. ISBN 84-202-0001-8.
- Suárez Perales, Ana (2003). El Teatro en Madrid. Madrid: La Librería. p. 136. ISBN 8495889587.
- Manuel Víllora, Pedro (2007). El Teatro frívolo. Madrid: Fundamentos. ISBN 9788424511067.