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Diferencia entre revisiones de «Operación Tungsteno»

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A pesar de las preocupaciones Aliadas, el ''Tirpitz'' planteó sólo un peligro limitado a la Marina Aliada. Desde finales de 1943 el acorazado fue incapaz de salir al mar por la tripulación debido a la amenaza de ataques Aliados y escasez de combustible. Estas escaseces también significaron que los alemanes fueron incapaces de mover el acorazado haciéndolo más difícil de localizar y atacar.<ref name="Bennett_14">Bennett (2012), p. 14</ref>
A pesar de las preocupaciones Aliadas, el ''Tirpitz'' planteó sólo un peligro limitado a la Marina Aliada. Desde finales de 1943 el acorazado fue incapaz de salir al mar por la tripulación debido a la amenaza de ataques Aliados y escasez de combustible. Estas escaseces también significaron que los alemanes fueron incapaces de mover el acorazado haciéndolo más difícil de localizar y atacar.<ref name="Bennett_14">Bennett (2012), p. 14</ref>

== Referencias ==
== Preparaciones ==
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[[Categoría:Noruega en 1944]]
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Revisión del 14:43 3 feb 2016

Operación Tungsteno fue una redada aérea en la Segunda Guerra mundial de la  Royal Navy dirigida hacia el acorazado alemán Tirpitz. La operación buscó averiar o destruir el Tirpitz en su base de Kaafjord en el norte lejano de Noruega antes de que puediera llegar a ser plenamente operacional otra vez tras un periodo de reparaciones.

La decisión británica para dirigirse a Kaafjord estuvo motivado por temores de que el acorazado, tras incorporarse al servicio, atacara importantes convoyes estratégicos  que llevaban suministros a la Unión soviética. Eliminando la amenaza planteada por el Tirpitz también dejaría los Aliados poder redistribuir los barcos capitales que tenían que ser mantenidos en el Mar del Norte para contrarrestarle. Después de cuatro meses de entrenamiento y preparaciones, la Flota de Casa Británica navegó el 30 de marzo de 1944 y las aeronaves partiendo de cinco portaaviones atacaron el Kaafjord el 3 de abril. El ataque fue muy sorpresa, y la aviación británica encontró poca oposición. Quince bombas impactaron en el acorazado, y el ametrallamiento conseguido por la aviación atacante causó importantes daños en sus tripulaciones de artillería. Cuatro aeronaves británicas y nueve aviadores se perdieron durante la operación.

El daño causado durante el ataque no fue suficiente para hundir o inutilizar el Tirpitz, aunque 122 miembros de su tripulación murieron y 316 fueron heridos. La Kriegsmarine alemana decidió reparar el acorazado, y los trabajos estuvieron completados a mediados de julio. Los británicos condujeron posteriores redadas contra el Tirpitz entre abril y agosto de 1944 con el fin de de prolongar el periodo fuera de servicio, pero ninguna tuvo éxito. El Tirpitz  finalmente inutilizado y mas tarde hundido por bombarderos pesados de la Fuerza de Aire Real (RAF) a final de 1944.

Historia

La amenaza planteada por el Tirpitz tuvo una influencia importante en la estrategia naval británica durante la Segunda Guerra mundial. Se creó una comisión para ello en febrero 1941 y se completó personal entrenando mas tarde ese año. Al mismo tiempo el alto mando Alemán decidió estacionar la guerra naval en Noruega; este despliegue tenía la pretensión para disuadir una invasión Aliada en Noruega y amenazar los convoyes qué regularmente navegaban a través del Mar Ártico hacia la Unión Soviética.[1]Estos convoyes llevaban grandes cantidades de material de guerra desde puertos en el Reino Unido e Islandia, y eran frecuentemente atacado por la aviación alemana y unidades navales estacionaban en Noruega.[2]​ El Tirpitz llegó a Noruega en enero de 1942 y operó en anclajes localizados en los fiordos.[3]​ Mientras fue operacional los Aliados tuvieron que mantener una fuerza potente de barcos de guerra con la Flota Británica en guardia contra la posibilidad de una incursión en los convoyes Árticos, y los barcos capitales acompañaban a la mayoría de parte de los convoyes de camino a la Unión Soviética.[4][5]

Los británicos atacaron el Tirpitz varias veces durante 1942 y 1943. Cuándo el acorazado salió para interceptar el Convoy PQ 12 el 6 de marzo de 1942 el HMS Victorious HMS Victorious, el cual formaba parte de la escolta del convoy, intentó atacarle usando bombardeo con torpedos. Estas aeronaves lanzaron veinte torpedos contra el acorazado pero todo fracasaron.[6][7]​ En varias ocasiones durante 1942 y 1943 bombarderos de la Fuerza Aérea Real (RAF) y Fuerzas Aéreas Soviéticas intentaron destruir el Tirpitz en sus anclajes sin éxito.[6]​ El 23 de septiembre de 1943 dos submarinos miniaturas británicos X-clase  tuvieron éxito al penetrar en las defensas alrededor del acorazado en su anclaje principal en Kaafjord en el norte de Noruega durante la Operación Source, y colocaron cargas explosivas bajo el agua. Este ataque causó un importante daño al Tirpitz, dejándolo fuera de servicio durante seis meses.[8]

Reparaciones en el Tirpitz fueron llevadas a cabo utilizando instalaciones improvisadas en Kaafjord ya que fue considerado demasiado arriesgado mover el barco de guerra averiado a Alemania. En cambio, las tripulaciones de trabajo y equipamiento fueron embarcadas al fiordo desde puertos alemanes.[9]​ En la noche de 10/11 febrero 1944, 15 aeronaves soviéticas atacaron el acorazado, pero no causaron ningún daño.[10]​ El 17 de marzo, las reparaciones para el armamento del Tirpitz, su maquinaria y el casco del barco estuvieron completadas, aunque varias tareas de reparación menores quedaban pendientes.[11]​ Durante el periodo en que el barco estuvo en reparación, Scharnhorst, el único acorazado alemán operacional restante, fue hundido el 26 de diciembre durante la Batalla del Cabo Del norte.[12]​ Siguiendo este compromiso la Marina Real evitó desplegar acorazados para cubrir los convoyes que viajaban a y desde la Unión Soviética.[13]​ En esta etapa de la guerra los Aliados también tuvieron muchos barcos de escolta anti-submarinos y escolta antiaérea disponibles, y pudieron de asignar fuerzas importantes para proteger todos los convoyes Árticos. Los submarinos alemanes operando en el Mar noruego fueron raramente capaces de eludir las escoltas de los convoyes, y pocos barcos mercantes daño sufrieron los ataques enemigos.[14]

El Gobierno británico y Marina Real estuvieron preocupados sobre la amenaza que el Tirpitz planteó una vez que volvió a entrar en servicio. La inteligencia Aliada siguió el progreso de los trabajos en el acorazado usando las señales radiofónicas alemanas, vuelos de reconocimiento con  foto e informes de testigo presencial de agentes en Noruega.[15]​ Se temió que el acorazado pudiera salir y atacar convoyes en el Mar noruego o el océano Atlántico, después que las reparaciones estuvieran completadas. La necesidad de guardarse contra esta posibilidad también ocuparía a la marina de guerra durante la invasión prevista de Francia.[16]​ Como resultado de ello, se decidió a finales de 1943 hacer intentos posteriores para hundir el acorazado.[17]

A pesar de las preocupaciones Aliadas, el Tirpitz planteó sólo un peligro limitado a la Marina Aliada. Desde finales de 1943 el acorazado fue incapaz de salir al mar por la tripulación debido a la amenaza de ataques Aliados y escasez de combustible. Estas escaseces también significaron que los alemanes fueron incapaces de mover el acorazado haciéndolo más difícil de localizar y atacar.[18]

Preparaciones

  1. Bennett (2012), p. 10
  2. Dear and Foot (2005), p. 35
  3. Bennett (2012), pp. 10–11
  4. Bennett (2012), p. 9
  5. Faulkner and Wilkinson (2012), p. 109
  6. a b Bennett (2012), p. 11
  7. Bishop (2012), pp. 78–83
  8. Woodman (2004), p. 340
  9. Zetterling and Tamelander (2009), p. 251
  10. Bishop (2012), p. 295
  11. Zetterling and Tamelander (2009), p. 265
  12. Zetterling and Tamelander (2009), p. 264
  13. Hinsley et al. (1984), p. 269
  14. Dear and Foot (2005), p. 38
  15. Bishop (2012), pp. 291–293
  16. Bishop (2012), p. 294
  17. Zetterling and Tamelander (2009), pp. 266–267
  18. Bennett (2012), p. 14