Catolicidad
El término catolicidad (del griego καθολικός, «universal»)[1] ha sido profusamente usado en la eclesiología del cristianismo, con el sentido de que todas las personas, de cualquier raza, cultura y condición tienen cabida dentro de la Iglesia. Según el credo del Concilio de Constantinopoli I del año 381, la Iglesia Universal se define por cuatro improntas: «una, santa, católica y apostólica».[2]
El uso más habitual se refiere a la Iglesia católica, es decir, a las comunidades y diócesis cristianas en comunión plena con el obispo de Roma, el papa, mediante el Rito latino o cualquiera de las 23 Iglesias orientales católicas. Dentro del catolicismo es la única forma utilizada habitualmente. La expresión proviene de una carta enviada por San Ignacio de Antioquía a los cristianos de Esmirna alrededor del año 106,[3] en la que se designa como «Iglesia católica» a la Iglesia universal en comunión con el romano pontífice frente a varios grupos heréticos. El término, que también se utiliza en el Martirio de Policarpo y en el Fragmento Muratoriano, fue estudiado por diversos Padres de la Iglesia, como Cirilo de Jerusalén, Agustín de Hipona y Vicente de Lerins.
Tras la Reforma protestante, diversas denominaciones protestantes utilizan el término «católico» para referirse a todos los creyentes en Jesucristo a lo largo de la historia y la geografía, más allá de su denominación. Tanto las Iglesias Ortodoxas como la Anglicana, Luterana y algunos metodistas afirman que sus comunidades son «católicas» en el sentido de continuar la primitiva Iglesia fundada por los apóstoles.[4]
Véase también
Referencias
- ↑ Cfr. Henry George Liddell, Robert Scott, A Greek-English Lexicon
- ↑ Christliche Religion, Oskar Simmel Rudolf Stählin, 1960, 150
- ↑ J. H. Srawley (1900). /smyrnaeans.html «Ignatius Epistle to the Smyrnaeans». Consultado el 24 de junio de 2007.
- ↑ F.L. Cross, Oxford Dictionary of the Christian Church, 1977:175.