TransMilenio
Antecedentes
El TransMilenio es el sistema de transporte público que utiliza la ciudad de Bogotá, Colombia. Su tramo principal se extiende desde la Zona Norte de la ciudad por Av. Caracas, Calle 80, Autopista Norte, y Av. Jimenez. El sistema se inauguró en noviembre de 2000, y desde entonces se han inaugurado varias rutas nuevas.
Basándose en el modelo exitoso de Curitiba, Brasil, el TransMilenio consiste en un número de paraderos elevados colocados en el centro de una avenida principal, conocida como un troncal. Los usuario pagan antes de entrar en el paradero y esperan la llegada del autobús, cuyas puertas abren en sincronía con las puertas de vidrio del paradero. Hay dos vías dedicadas en los dos lados del paradero para permitir que los carros expresos pasen los regulares.
Desde que la ruta principal va desde el oriente hacia el occidente, los usuarios que desean viajar entre el norte y el sur deberán coger un "alimentador" que no tiene vía dedicada. Si bien los paraderos del TransMilenio son accesibles a los discapacitados por su elevación y rampas que conducen hacia la entrada, los alimentadores son carros normales sin accesibilidad para discapacitados. Sin embargo, una demanda por el usuario discapacitado Daniel Bermúdez en 2000 causó que todos los alimentadores tengan que ser accesibles por los discapacitados para el 2004, pero esto aún tiene por implementarse.
Los autobuses, que se impulsan por diesel, son de empresas como la fabricante brasileña Marco Polo y la alemana Mercedes-Benz. Los carros son ?bi-articulados?, divididos en dos secciones con una parte que gira en medio para permitir que voltee bruscamente, y tienen capacidad para 150 personas.
A partir de marzo de 2004, el pasaje costaba $1100 (pesos colombianos) por un viaje. Las tarjetas utilizan un sistema magnético táctil, y se puede poner hasta diez viajes en cada tarjeta. Debido al porcentaje considerable de errores al pasar las tarjetas, muchos usuarios aún desconfían del sistema y sólo compran uno o dos viajes cada vez. Todavía no se resuelve este problema por medio de descuentos o campañas de educación pública, como han recomendado consultores de planificación urbana.
Críticas
Aunque muchos usuarios estén de acuerdo en que el TransMilenio es una mejora tremenda del sistema de transporte público antiguo, especialmente en comparación con los sistemas caóticos de ciudades como Lima, Perú, hay bastantes críticas acerca del sistema:
- Muchas veces, los paraderos y carros están repleto, más que la capacidad recomendada y segura, aun durante las horas no picos. Esto puede atribuirse al tamaño insuficiente de los carros?los trenes modernos en metros pueden llevar hasta mil pasajeros, mientras los buses en el sistema de Curitiba tienen una capacidad para hasta 270?así como una planificación y respuesta inadecuada.
- El uso de autobuses de diesel en vez de gas natural, que no contamina, o ferrocarriles de tracción ligera, que usa electricidad, se define mejor como una decisión económica que beneficia a TransMilenio, S.A., no los mejores intereses de la ciudad. La contaminación de diesel tiene un impacto muy grande en una ciudad con la altura de Bogotá (2.600 m.s.n.d.m.), sin mencionar el ruido que producen los motores de diesel.
Más allá de los problemas, los planificadores urbanos consideran el TransMilenio como un ejemplo brillante de cómo crear un sistema ordenado de transporte masivo sin mucha inversión ni disrupción