Este es un listado de los volúmenes del mangaSaint Seiya Episodio G, creado por Megumu Okada y Masami Kurumada para la editorial Akita Shoten. El manga se publica en la revista mensual Champion Red de la editorial desde el 19 de diciembre de 2002 y ha sido recopilada en 20 Tankōbon, cada uno con cuatro o cinco capítulos y algunos con capítulos gaiden al principio o al final. Estos volúmenes en una edición normal y una edición de lujo, con portadas diferentes y algunos objetos de regalo.[1][2] Además paralelamente se publicó una historia gaiden llamada Saint Seiya: Episodio G, capitulo de Aioros (聖闘士星矢 エピソードG アイオロス編,'Saint Seiya: Episodio G, capitulo de Aioros'?) y unos artículos sobre los personajes llamada Galaxia Enciclopedia (銀河百科事典,Gyarakushian Ensakuropedia?, Enciclopedia galáctica), ambos fueron publicados en un volumen 0.[3] En español fue publicado por Editorial Ivrea en Argentina, quienes han publicado 40 volúmenes de la mitad del tamaño, por editorial Kamite en México y por Glénat en España, quienes han publicado 19 volúmenes antes de su desaparición, con el tomo 20 siendo publicado en ese país por Ivrea respetando el tamaño y diseño de los tomos anteriores de Glenat.[4][5] El manga también es publicado en otros idiomas por Conrad Editora en Brasil y Editorial Panini en Italia.[6][7]
El Patriarca se encuentra en su trono cuando es envuelto por un cosmos oscuro le indica que mate a la Diosa Atenea que acaba de reencarnar como una bebé, pero la intervención del Santo de Oro, Aioros de Sagitario lo evita. Seis años después en Estados Unidos, un reactor está a punto de estallar debido a un terrorista y amenaza con destruir el mundo. Para detener eso mandan a un negociador junto con un misterioso joven. El terrorista resulta ser un fallido aspirante a Santo, quien mata al negociador pero es derrotado por el joven, que es Aioria de Leo. Al volver al santuario Aioria es enviado a acabar con un gigante que asola las tierras de Grecia, en el lugar antes de la pelea se encuentra con un niño. Este le dice que el gigante es su padre, que luego de morir su alma quedó encerrada en una gigantesca estatua de piedra. El Santo de Leo es capaz de destruir al gigante y adopta al niño como su hermano. Sin que lo sepan los santos de oro, el Patriarca tiene un pacto secreto con una misteriosa figura que aparenta un poder enorme y quiere probar el poder de Aioria. En el Santuario, Líthos Crysallís es la nueva escudera de Aioria junto con Galan. Este último es poseído por un cosmos maligno mientras estaba en la Casa de Leo y Aioria es el encargado de liberarlo usando su puño a la velocidad de la luz. Debido a la preocupación por el cosmos maligno que invadió el Santuario. El Patriarca llama a que los 12 Santos de Oro se reúnan en el recinto sagrado. Los santos notan que falta Aioria cuando aparece la joven Líthos, Death Mask de Cáncer intenta lastimarla pero en ese momento llega el Santo de Leo.
Al Santuario de Grecia llega un Titán dispuesto a arrebatar el Megas Drepanon. Los santos de oro notan el cosmos, pero Aioria y Death Mask están entretenidos luchando entre sí. La pelea es interrumpida por el Patriarca que envía al león a que pelee con el intruso mientras que los demás se encargarán de la guardia de las 12 Casas. El Patriarca les explica a los santos que su enemigo no son otros sino los titanes comandados por Cronos, estos buscan el Megas Drepanon que es el arma del antiguo dios y con esta poder revivirlo y controlar al mundo. Mientras, Aioria llega con el titán y se dispone a pelear con él. Aioria e Hiperión de Oscuridad se enfrentan pero el poder de Hiperión demuestra una clara superioridad sobre el santo de oro, sin embargo Aioria no desiste en proteger el Santuario y resiste al Ebony Vortex. Enseguida se arroja sobre él lanzando el Lightning Plasma en su vientre abriéndole una fisura en su Sóma. Aioria se parte un brazo al igual que la armadura. Cuando el titán le lanza su ataque de nuevo Aioria logra evitar el Ebony Vortex y lo ataca una vez más. En esta ocasión es capaz de dañar el titán pero Hiperión decide retirarse hasta la próxima confrontación. Aioria cae inconsciente luego de la pelea y hubiera muerto a manos de los soldados de Cronos de no ser por Marín de Águila que logra derrotarlos. Mientras, Hiperión se encuentra con Pontos, este le dice que Aioria se dirigirá al este. En efecto, Aioria junto con Aldebarán y Líthos van a Jamir en busca de Mu, el único en el mundo capaz de reparar los cloths. Finalmente llegan después de muchos obstáculos y se encuentran con el misterioso hombre.
Gaiden 1: Hace 200 años tuvo lugar la última Guerra Santa, en ella pelearon y murieron casi todos los Santos de Atenea. A excepción de Shion de Aries y Dohko de Libra, luego de la cruenta batalla, ambos sienten como el cosmos de los caídos prevalecerá.
Mu se niega a reparar el cloth de Aioria por decir que el santo de oro no lo merece. El león comienza a atacarlo con tal de obligarlo a que lo arregle, ambos santos de oro pelean pero esto es solo una distracción para poder acabar con unos soldados de Cronos que se encontraban cerca de ellos. Pero un enemigo con un cosmos gigantesco permanece con vida, Mu viste el cloth de Aries y se dispone a pelear. El atacante es uno de los Titanes y ataca a Mu con una técnica que corta el vacío y deja ver el universo. El ariano es capaz de anular la técnica pero no puede detener otra donde el Titán invoca a un Hecatónquiro. El Titán se presenta como Jápeto de Dimensión y Mu es capaz de destrozar al Hecantoquiros, Jápeto está a punto de lanzar su último ataque cuando aparece la gigantesca figura de Cronos. él le ordena a Jápeto que se marche y señala a Aioria como el encargado de romper su sello y liberarlo. Mientras, en el Santuario, Shura se encuentra hablando con el Patriarca porque sospecha sobre que pasó en realidad con Aioros y el Santo de Géminis. El Patriarca le demuestra que él es Géminis y ataca a Shura el Genrō Maōken. Mientras que en Jamir, Aioria y Líthos se marchan luego de que Mu arreglara su cloth. Entre tanto, Hiperión y Jápeto ven atónitos como Cronos hace despertar a los gigantes para que peleen junto a ellos.
Gaiden 2: Cuando Saga aun es el Santo de Oro de Géminis, es acosado por la oscuridad a cada momento. Unos espíritus malignos intentan corromper al guerrero pero este se encarga de eliminarlos a todos. Aunque persiste con su duda de si está con el bien o con el mal.
Eel Santuario es atacado por los soldados de Cronos, Marin llega para pelear con ellos y los derrota. Pero llega uno de los 9 Gigantes, Rúax de Phoínix. Este Gigante logra derrotar a Marin pero Aioria de Leo llega y la salva. El Gigante no puede hacer nada en contra de Aioria y es totalmente apaleado por el Santo. Mientras, Shaka de Virgo se encuentra con una presencia poderosa que quiere entrar a las Doce Casas y se dispone a detenerla. La presencia es la del Gigante Phlóx de Cianós y ataca a Shaka pero sin hacerle nada. Mientras, Aioria sigue atacando a Rúax y termina matándolo con su cosmos. Phlóx se enfurece con la muerte de su compañero y se dispone a atacar a Shaka, pero la voz de Death Mask lo detiene y le dice a Virgo que le deje este oponente. Pontos e Hiperión se encuentran en las ruinas donde están selladas las armas y las almas de los demás titanes. En la Casa de Cáncer, Phlóx sujeta a Death Mask con su ataque pero el Santo logra liberarse y mata al gigante con un solo golpe. De vuelta en las ruinas, el tercer Titán revive.
Gaiden 3: Pontos e Hiperión ven a través del caldero una pelea del pasado de Aioria. En esta pelea el Santo de Oro fue capaz de derrotar al Dios Anubis. Luego de ver esto, ambos se preguntan que poder tiene Aioria para poder matar a los dioses. Gaiden 4: Una tormenta azota a un barco hasta que logra hundirlo, el único sobreviviente es un niño que fue salvado por un encapuchado. Este hombre le dice que el barco fue hundido no por una tormenta sino por el Gigante Tifón. El gigante ataca al encapuchado pero no logra dañarlo, el hombre se muestra como Aioros de Sagitario que se encarga de matar al monstruo.
El Titán Ceo acaba de revivir y Pontos le explica que mientras más avanza el tiempo más monstruos legendarios aparecerán en el mundo. Luego de su pelea, Aioria viaja la Isla de Creta con Líthos y Galan. Este último les dice que han venido aquí porque apareció el fantasma del rey Minos, secuestrando niños y asesinando a un gran número de personas. El trío entra al laberinto del palacio Cnosos y se encuentran con el espíritu, Aioria viste su cloth y se dispone a pelear. El cosmo oscuro de Cronos llega hasta la estatua de Atenea y comienza a debilitar el sello, pero llega Camus de Acuario y logra fortificarlo. Minos convoca a sus soldados, que son armaduras con los niños secuestrados dentro, Aioria logra destruirlos sin dañar a los jóvenes y derrota a Minos. Antes de desaparecer, el rey invoca al Minotauro, pero Aioria logra vencerlo. En Guangyuan, Sichuan el Santo Noesis de Triángulo y su discípulo Retsu de Lince enfrentan a un monstruo legendario y solo el joven Lince puede escapar con vida. Aioria es enviado a luchar contra el monstruo pero se hace pasar por mensajero para que Retsu pelee por sí mismo y vengue a su maestro. Luego de una difícil pelea el Santo de Bronce es capaz de vencer a Euríale que había matado a su maestro. Shaka se dispone a hacer explotar su cosmo para que cubra a todo el mundo y así purificar y sellar a todos los monstruos para que no sigan despertando. Para ello se dirige a Cassia, Uttar Pradesh en la India para meditar y alcanzar su máximo poder, pero queda indefenso en ese estado, para eso Aioria es enviado para protegerlo. Una vez que Shaka está dentro del templo aparece Ceo y comienza a pelear con Leo, aunque el Santo es muy golpeado no se rinde y arriesga su vida con tal de proteger la vida de Shaka de Virgo.
Gaiden 5: En Egipto, los soldados de Ra se encuentran con Aioros y lo atacan. Aunque su poder es nulo en el Santo y este los elimina usando su cosmo. Aioros se queda pensando en que el cosmo de los humanos es el único que puede traer la paz. Gaiden 6: En el pasado, Galan fue condenado a muerte en el Santuario. Esto fue porque robó Icor para así salvar a su madre que estaba enferma. El último deseo del guerrero fue morir a manos de su amigo Aioros y ambos pelean en un combate a muerte. En la pelea el vencedor es Aioros pero le perdona la vida a su compañero.
La pelea entre Ceo y Aioria comienza de manera definitiva. El titan lleva una ventaja impresionante y el santo de oro es apaleado. Aunque a último momento recuerda una técnica que parece ser invencible, aun con todas sus herida el guerrero convoca a su cosmo y se dispone a matarlo. Aunque Aioria intenta usar su técnica suprema, el caudal de poder es demasiado y no puede controlarla. Es por ello que se deja atacar hasta llegar casi al punto de la muerte con tal de usarla. En ese momento crítico aparece el espíritu de Aioros para apoyar a su hermano y el león ataca con su ataque definitivo, Ceo habría muerto de no ser por la intervención de Hiperión que se lleva a su amigo. En Grecia, Death Mask acaba de descubrir que Saga mató al Patriarca y se está pasando por la eminencia para gobernarlo todo. Aunque al Santo Cáncer no le interesa con tal que el geminiano haga justicia a base de la fuerza. Mientras, Aioria se encuentra inconsciente luego de la pelea y es atacado por dos Gigantes. Pero Shaka de Virgo despierta de su meditación habiendo sellado a la mayoría de los monstruos legendarios. El poderoso santo abre sus ojos y mata a los dos dioses en tan solo un instante. Mientras Aioria se recupera siendo cuidado por Líthos y Galan. Milo de Escorpio se encarga de la guardia frente a cualquier enemigo que aparezca. Para sorpresa del Santo quien intenta asesinarlos ahora es Héctor, el guerrero troyano que ha vuelto de la muerte con tal de cobrar venganza de la historia que lo ha marcado con la derrota.
Gaiden 7: Esta historia es corta y trata sobre los problemas que tiene Aioria para lidiar con Garan y Líthos en un almuerzo en la casa de Leo, un lugar donde Aioria se da cuenta de que puede llamar hogar.
Milo se encarga de eliminar a Héctor con su Scarlet Needle. Mientras que el Laberinto de Cronos vuelve a reconstruirse desde las tinieblas y reviven todos los titanes restantes. Junto a la aparición de los Titanes ha aparecido en el cielo un gigantesco sello, el Teós Séma (θεός σήμα). El Patriarca se encarga de explicarle a Shaka que este sello hará que los humanos se vuelvan locos y provoquen guerras entre sí y derramen mucha sangre. Los titanes hacen esto para repetir la Titanomoachia y esta vez poder ganarle la guerra al Olimpo. Mientras que en Grevená, Shura se encuentra cara a cara con un gigante que lo ataca. Shura mata al gigante pero al instante aparece Crío, el poseedor de una espada divina. El titán usa un ataque que absorbe la sangre, el cosmo y la memoria de los enemigos. Al golpear en Shura puede ver su pasado oscuro y de como la muerte de Aioros fue fingida, pero la mente del santo fr Capricornio es bloqueada por un factor externo. Cuando el titán iba a acabar con Shura es interrumpido por Aioria, pero los ataques del león son devueltos por el poderoso titán. En ese momento Shura recupera la conciencia y le dice a Leo que no se entrometa ya que él se encargará de matar a Crío. Crío se enfurece con Shura y lanza su Aster Cýclos, el cual convierte en un ataque el cosmos absorbido de Shura hasta ahora. El Santo Capricornio logra destruir el ataque con una Excalibur en X y se convierte en un demonio por el efecto del Genrō Maōken que Saga le asestó en el pasado. Aun así el lado bueno del Patriarca interviene y libera del efecto a Shura, quien sigue peleando hasta lograr quebrar la espada del titán. Crío admite que los santos de oro son oponentes de temer y se marcha. Mientras, el maestro Dohko siente como el cosmo de Cronos se acerca y la gigantesca figura Cronos se aparece frente a la estatua de Atenea.
Gaiden 8: Shura llega a Grevená y unos soldados de Cronos lo atacan pero son detenidos con Excalibur y les dice que esta espada sagrada acabará con el mal.
Mientras Aioria se encarga de llevar a un herido Shura, los demás santos de oro están furiosos por la orden que se les dio de no salir de las 12 Casas. Esto les hace imposible pelear en contra de Cronos. Frente a la estatua de Atenea, el gran dios se encuentra con el Patriarca. Aunque el lado bueno de Saga logra aparecer y la eminencia se revela como el santo de Géminis para pelear contra el dios vistiendo su cloth. Luego de una dura pelea, Saga decide hacerse explotar a sí mismo junto a Cronos y usa su Galaxian Explosion. Tanto Cronos como Saga sobreviven al ataque, resguardándose con la estatua de Atenea y el Megas Drepanon respectivamente. Saga es gravemente herido por los ataques de Cronos, mientras que el titán no es afectado por los ataques del geminiano al no tener un cuerpo físico. Pero Saga usa la daga con la que intentó matar a Atenea para lograr lastimarlo, cuando el santo estaba a punto de eliminarlo su lado maligno vuelve a dominarlo y detiene su ataque, para luego volver a sus aposentos. En ese momento llega Aioria de Leo, pero en su desesperación ataca con su Lighting Bolt, el cual al ser un cosmo de trueno logra romper el sello del Megas Drepanon y devolverle su arma y su cuerpo al gran dios Cronos. Aioria empieza a atacar al gran dios, pero sus ataques son en vano, y aún peor, son absorbidos por el Megas Drepanon para que su sello comience a desaparecer por completo. Esto se debe a que si el relámpago del Santo de Leo tiene las intenciones de matar será útil para el mal, en cambio si este cosmo está cargado con la intención de proteger a las personas podrá disipar a las fuerzas del mal. Es en ese momento cuando aparece la figura de la diosa Atenea y ayuda al santo para que lance una poderosa descarga capaz de lastimar a Cronos. El santo de Leo sigue atacando al dios, ahora con éxito, pero al mismo tiempo es herido continuamente con la intención de que éste caiga en la desesperación y vuelva a emplear los relámpagos cargados de energía negativa. El cosmo divino de Atenea ayuda a Aioria, y es en ese instante cuando Cronos se percata de que fue traicionado por Saga ya que la diosa nunca fue asesinada. Finalmente, Aioria ataca con su Photon Burst y parece haber acabado con el gran dios. Pero para sorpresa del guerrero acaban de aparecer las 6 titánides para defender a su señor, mientras que el cuerpo físico de Cronos ha abierto sus ojos.
Gaiden 9: Este Gaiden relata la ya conocida historia de cuando Kanon libera a Poseidón, narrada por el mismo santo de Géminis. Sus últimas palabras hablan acerca de que tomará venganza de toda la humanidad y será el amo absoluto de todo.
Cronos al fin ha renacido en este mundo, pero inexplicablemente ha perdido su memoria, Mnemósine responde que esto debe ser efecto del gigantesco ataque de Aioria. El santo de Leo aprovecha la distracción para intentar matar al dios, pero Temis se interpone en su camino y lo ataca. En ese momento llega Shura para ayudar a su compañero pero queda en el mismo predicamento, Rea pierde la paciencia y potencia el ataque de Temis con uno propio. Las diosas se marchan con el cuerpo de Cronos y los santos ven como ha llegado Aldebarán para salvarlos. Ninguno de los titanes puede ubicar a Pontos, quien parece tener un plan secreto el cual involucra tanto a los dioses como a los humanos. Las serpientes que Gea usaba para ejercer más presión en Aioria y Shura son destruidas por Aldebarán, a la distancia la diosa siente esto y convierte a la serpiente en una gigantesca hidra. Pero de todas maneras, esta bestia mítica es destruida por el Santo de Tauro. Alrededor del mundo cosas extrañas suceden, en Egipto ha aparecido una inmensa selva en el desierto, Retsu y Shaina deben proteger a las personas. Mientras tanto, Cronos acciona un gigantesco mecanismo llamado Adamas Psammos. Aioria se despide de sus compañeros ya que siente que el peligro se acerca y se marcha a Grevená, donde unos soldados encuentran los restos de la espada de Crío, y al titán Océano que vino a recuperarla. Los hombres son salvados por Aioria quien intenta pelear con el dios, éste antes le dice que el plan de los titanes es usar el Adamas Psammos para así retroceder el tiempo a la época en que los humanos eran simples seres irracionales. El titán ataca a Aioria, pero su ataque es congelado por Camus de Acuario, quien acaba de llegar listo para combatir. Los ataques de Océano son congelados hasta que éste usa un poderoso ataque que parece haber derrotado a Camus, aunque a último momento el dios nota que ha quedado atrapado en el Koliso. Océano se libera fácilmente y usa los propios aros de hielo como armas en contra del santo, Camus se ve obligado a congelarlos pero esta distracción es aprovechada por el titan para herirlo gravemente. De todas maneras el santo de Acuario no se rinde y logra inmovilizarlo con su hielo para luego golpearlo.
Gaiden 10: Este capítulo habla acerca de como Aldebarán de Tauro arriesga su propia vida con tal de que Mu de Aries lo tele transporte al Santuario. Una vez allí, el santo de oro se dispone a pelear por la diosa Atenea.
En el Laberinto de Cronos, toda la gente que fue condenada junto con los titanes celebra que la fin ha renacido Cronos, mientras que Hiperión discute que es su deber pelear por estas personas. En tanto, Pontos está hablando con una misteriosa mujer, la cual está detrás de todos los planes que tiene el dios antiguo. En Grevená, Camus queda malherido por Océano, pero logra congelar la entrada al Laberinto y el propio cuerpo del titán. Océano vuelve con la espada de Crío y se reúne con sus compañeros. Los titanes continúan con su plan, el cual consiste en llevar a Aioria al Laberinto para que así pueda entrar en contacto con Cronos y sus cosmos se sincronicen de tal manera que él pueda recuperar su memoria. En tanto, Camus y Aioria son visitados por Líthos, la joven viene a llevarse a Aioria para que descanse pero la escena es interrumpida por la irrupción de Jápeto, quien la secuestra. La frustración del león es tal que decide ir él solo a enfrentar a los titanes, destruye el Freezing Coffin con el que estaba sellada la entrada al Laberinto de Cronos e invade ese lugar con tal de salvar a la niña. Aioria logra atravesar la entrada al Laberinto de Cronos, lo que sorprende a todos los soldados enemigos del otro lado. Estos atacan lo atacan, pero son contratacados e inmovilizados con la electricidad que el santo de oro irradia, quien destruye el camino hacia la puerta. Aioria continúa intimidando a los soldados cuando Hiperión ante ellos, el cual se dispone a acabar con el santo de oro materializando una espada gigante con la que ataca a Aioria. El santo vuelve a levantarse con la firme decisión de salvar a Líthos. Hiperión lo vuelve a atacar a Aioria, pero el titán le permite seguir su camino para ver si es capaz de hacer todo lo que dice y así conocer a su amo, Cronos. Una vez que este se marcha, los soldados enemigos arremeten contra Aioria, pero millones de rosas blancas de Afrodita de Piscis cubren el lugar atrapando a todos los soldados cerca de ellas, es el santo dorado ha llegado en auxilio de Aioria. Afrodita ataca a los soldados tiñendo sus rosas de rojo. Cuando se dispone a acabar con los que quedan es detenido por Aioria, quien no está dispuesto a dejar que los mate cruelmente. En ese momento aparece el gigante Síderos de Ánthracma quien ataca con su gran mazo todo el campo de rosas. El gigante ataca a Afrodita con su mazo y este lo detiene con tan solo una rosa negra, con las que devora su arma. Mientras tanto Leo fue cubierto por las espinas del campo, las cuales no sólo lo protegieron del ataque del gigante sino que también le dieron parte del cosmo del santo de Piscis. Afrodita le dice que Aioria que continúe con su camino mientras él se encarga de todo.
Pontos se aparece ante el patriarca y conversan sobre Aioria, a lo Pontos dice que tarde o temprano el santo dorado se dará cuenta de que no puede vencer a los dioses, y él mismo se encargará de enseñárselo. Mientras tanto Afrodita insiste que Aioria se marche de una vez y deje de ignorarle; una vez que lo hace, el santo de Piscis termina con el gigante con su rosa blanca. Pontos hace su aparición ante Aioria, demostrando una clara superioridad ante el santo dorado, obligándolo a someterse ante él. El dios trata de hacer fluir la fuerza negativa de Aioria, pero este logra controlarse y contratacar con un Lightning Bolt, el cual no surte efecto. Usando su Dunamis, Pontos separa el brazo de Aioria de su cuerpo; atacando de igual forma a su corazón. Para la sorpresa de Pontos, Aioria continua atacando aún habiendo perdido su corazón, manteniéndose vivo gracias a su cosmo y determinación. Pero aun así no puede herir al dios ante el cual no puede hacer frente. Al borde de la derrota y alentado por las palabras de Garan, Aioria hace arder su cosmo y regenerar las partes cortadas a nivel atómico de su cuerpo, logrando así golpear el rostro del dios. Pontos intenta acabar con el santo de un solo ataque, pero para sorpresa de Leo, aparece ante él la armadura dorada de Libra. Gracias al apoyo del cosmos de Dohko Aioria logra golpear a Pontos. En ese momento, Mu de Aries, con ayuda del cosmos de Dohko, transporta a Shura, Milo, Shaka, Camus y Aldebarán junto a Aioria. Pontos se dispone a atacar a todos juntos, pero mentalmente, el patriarca le detiene argumentando que estos santos cumplirán sus deseos al enfrentarse a los titanes. Pontos decide dejarlos seguir, pero antes de marcharse le advierte a Aioria que una vez tenido contacto con el Dunamis, su cosmo caerá en la oscuridad y todos los demás traicionarán a Atena. Aioria advierte que si eso llegase a pasar, algún santo lo despertará con un golpe dado con todo su cosmo, pasando la escena al futuro enfrentamiento entre Seiya y Aioria, en la casa de Leo.
Gaiden 11: El patriarca le da a Afrodita de Piscis una orden especial de sellar la puerta al Laberinto de Cronos. Al salir del salón del patriarca, el santo de Cáncer hace referencia a eso y le pregunta si él también está de su lado, a lo que Afrodita le responde que sólo obedecerá a la hermosa justicia, a la belleza.
Jápeto aparece ante todos y lanza una extraña energía a Aioria, esta energía lo absorbe y transporta al lado oscuro del universo, regido por el Eschatos Dunamis. Una vez ahí lo espera Temis y Jápeto, este último explica que cada titán tiene a su cargo un universo y un planeta, acto seguido hace aparecer el suyo, que gracias al cosmo de las vidas que lo habitan, es usado para atacar al santo dorado. Aioria incapaz de herir al Titán ni defenderse de sus ataques, está a punto de ser asesinado, pero Shaka de Virgo aparece y lo protege. Shaka ataca al titán con su Tenbō Hōrin sin lograr efectos a lo que Jápeto contrataca el campo de protección de Shaka. El titán cuenta la razón de su odio a los humanos, que su hijo, Prometeo, quien les entregó el fuego a los humanos, trayendo su propia desgracia, haya sido olvidado y está dispuesto a acabar con ellos, y con Zeus para liberar a su hijo. Temis destruye el planeta al cargo de ellos y mata a todos sus seres vivos, adquiriendo los titanes su máximo poder. El nuevo Jápeto ataca con su poder a Shaka, destruyendo por completo su defensa. Luego vuelve a hacerlo, recibiendo el santo de virgo un golpe directo. Cuando el titán se dispone a acabar con él, Aioria detiene el ataque con su Lightning Bolt, aferrándose al poder de sus colmillos para proteger a las personas. Impresionado ante el poder de Aioria, Jápeto vuelve a atacar pero el santo dorado repele sus ataques una y otra vez. El santo dorado ataca al Titán afectándolo y provocando que las almas de los seres que habitaban el planeta destruido abandonen a su dios. En ese momento Temis ofrece su vida para que su esposo logre la victoria, Jápeto la absorbe, creando una espada con la forma de su esposa Temis. Enloquecido, Jápeto arremete contra el santo dorado con sus distintos ataques alternándolos con los ataques de su difunta esposa, colocando contra las cuerdas a Aioria. Cuando se dispone a acabar con el santo, Shaka de Virgo vuelve a protegerlo deteniendo los ataques del dios. Con un ataque combinado Shaka usa su Tenbō Hōrin arrebatando primero el tacto del Titán, pero sabiendo que gracias al Dunamis y la sangre divina, Jápeto recuperará el sentido en una fracción de segundo, Aioria intenta atacarlo en ese intermedio. Para su sorpresa la reacción del titán es más veloz y este inicia su contrataque contra el santo de Leo, quien al estar en pleno vuelo no puede esquivarlo y detiene la espada de Jápeto dejando que esta se clave en su propia pierna, y así inmovilizar al dios para poder golpearlo.
Gaiden 12: Cronos, dirigiéndose a su madre, se pregunta por su existencia y sobre el poder que este posee, llegando a la respuesta de que es el poder para destruir a los dioses.
Gracias a la apoyo de Aioros, Aioria logra acertar su Lighting Bolt en Jápeto derrotando al titán de una vez por todas. Jápeto recuerda el dolor, la tristeza y la muerte aunque no acepta que Aioria lo haya salvado. El titán lo cura con su sangre divina y les dice que se marchen ya que todo el lugar se desmoronará. El resto de los titanes sienten como Jápeto y Temis han muerto; pero no sólo ellos, su hijo Prometeo también, quien piensa que si la Madre Tierra así lo quiso él lo aceptará, pero jura que la muerte de sus padres no será en vano. Pontos se encuentra junto a la Madre Tierra, su verdadera finalidad de Pontos es liberarla sacrificando lo que sea necesario, incluso a los titanes. Mientras, en el laberinto de Cronos, Crío se despide de su amada Euribia y se dirige a la batalla. Mientras tanto, Aioria y Shaka retornan junto a los demás santos dorados, donde se dan cuenta de que en el universo anterior el tiempo pasaba más lentamente. Otro vórtice vuelve a abrirse y esta vez Shura de Capricornio acepta el reto dirigiéndose a luchar con el titán. Una vez comenzada la batalla, Crío hace surgir cientos de rocas de Orichalcum las cuales el santo de oro no puede cortar incluso con su técnica Excalibur. Crío demuestra su poder al romper el Orichalcum con su espada y aunque Shura le ataque, este parece repeler sus golpes, el titán muestra su escudo con formado por el planeta a su cargo, el Astel Shield. Al haber desaparecido Jápeto y Temis, el mundo pierde estabilidad y comienza a resquebrajarse. Frente al peligro que presenta esto para las personas que fueron encerradas junto a los titanes, Rea convoca a un lagarto de fuego, para destruir el hielo que bloquea el paso hacia el otro mundo. Camus se interpone atacando al lagarto. Crío sigue demostrando superioridad frente al santo de Capricornio, frente a esto, Shura eleva su cosmos y logra cortar el Orichalcum. Crío pretende pelear en serio contra el santo y envaina su espada, tomando una postura iai. Shura arremete contra el titán pero este lo esquiva contratacándole, el santo dorado queda paralizado por el daño del golpe. Crío entierra su espada en su propio pecho, la sangre expulsada es absorbida por el arma del titán convirtiéndose en el filo de esta, con la cual le da a Shura un poderoso golpe. Mientras tanto, Camus continua su batalla con el lagarto de fuego, y también repara las grietas evitando la destrucción de su mundo. Volviendo con Crío, este se dispone a darle el golpe de gracia al santo, pero Shura logra detener la espada del titán con sus propias manos. Shura hace arder su cosmo y se lanza contra Crío.
Gaiden 13: Aioria, pensando en lo que su hermano era capaz, le pide a su cosmo la fuerza necesaria para calmar la triste voz y las lágrimas de sangre de Jápeto.
El escudo de Crío se mueve por sí sólo, atacando continuamente a Shura quién no puede moverse, mientras que el Titán pretende tomarlo por sorpresa atacándolo desde arriba con un golpe que reúne toda su sangre y cosmos. Pero luego del impacto de su golpe, el dios se sorprende al ver que Shura sigue vivo, el santo dorado atravesó el escudo con su brazo y lo usó para protegerse del ataque de Crío. El santo de Capricornio logra elevar su cosmos y es capaz de moverse a la velocidad de la luz, atravesando el cuerpo de Crío con su Excalibur. El titán, sorprendido, pretende contratacar al santo dorado con su espada, pero Shura realiza una Double Excalibur que parte en dos al dios. Con sus últimos momentos de vida, Crio encomienda y lega su espada divina al santo dorado, mientras que en otro lugar, Euribia siente la muerte de su amado. Cada vez que un titán cae, la Madre Tierra está más cerca de su liberación. Shura cae inconsciente y su cosmos se desvanece mientras lejos de ahí los demás santos dorados continúan su camino. Frente a ellos aparece Ceo del Trueno Negro, quién previamente pidió prestado el planeta de su esposa Febe, impidiendo que ella luche para que no arriesgue su vida. Aioria lo ataca pero Ceo esquiva todos sus golpes a una velocidad más rápida que el relámpago del santo dorado, el titán lo ataca con su Ebony Rapier, un relámpago negro que lo atraviesa y paraliza al mismo tiempo. La historia regresa a Shura, quién se encuentra inconsciente. Crío no ha muerto, los titanes sólo pueden morir por relámpagos, normalmente su cosmo y armadura divina los regeneran luego del daño, pero Crío no puede hacerlo ya que otra fuerza está absorbiendo dicha energía, la Madre Tierra. Crío no permitirá que su energía beneficie al desconocido, por lo que se sacrifica y brinda su sangre divina a Shura para que este se pueda volver a poner de pie. En otro lugar, Ceo reta a Aioria para que use su técnica más poderosa, el Photon Burst. El santo de Leo lanza su técnica pero la estrella de titán, girando a la velocidad de la luz, absorbe los fotones del ataque de Aioria, anulando su técnica. El santo dorado lanza su Lighting Plasma pero increíblemente es repelido a golpes por Ceo, cada rayo de luz se oscurece y es devuelto a su dueño como un Ebony Plasma. Aioria no resiste más y es rematado por el Ebony Rapier del titán. Recuerdos pasan por la mente de Aioria, aunque él perdió a su hermano, tuvo a alguien siempre a su lado que lo sustituyó, Garan. El santo dorado recupera sus fuerzas y hace arder su cosmos, contracando con un Lighting Bolt que hace retroceder al titán. Acto seguido pretende lanzar nuevamente su Photon Burst, elevando su cosmos.
Gaiden 14: Shura pretende firmemente romper el escudo de Crío, apoyándose en lo que cree y elevando al máximo su cosmos.
Garan visita la tumba de Aioros y luego de una conversación, hace hincapié en que debe soltar a Aioria para que este logre valerse por sí mismo. El santo dorado de Leo arremete su Photon Burst al máximo contra Ceo, pero por más que eleve su cosmos, los fotones de su ataque son absorbidos por la estrella del titán, quién contrataca con su Ebony Rapier. Aioria pierde sus 5 sentidos, y cuando se daba por vencido utiliza su séptimo sentido para detiene el ataque de Ceo y hace explotar su estrella con los fotones absorbidos dentro de ella, volviendo a tomar el control de estos. Con su armadura nuevamente al completo, resiste el ataque de Ceo, y reúne todos los fotones en su mano para lanzarlos en forma de un Lighting Bolt que atraviesa al titán. En sus últimos momentos, Ceo revela una gran verdad, él había sido quién creo el poder para vencer a los titanes, pero al darse cuenta de tal peligrosidad, selló tal poder. Sin embargo, ese poder había sido arrebatado de su mente y entregado a Zeus, y la responsable fue una de los 12 titanes, Mnemósine. Quién mantuvo engañado a Ceo impidiéndole recordar lo ocurrido, recuerdos que volverían con la muerte. La Madre Tierra comienza a absorber a Ceo, y Aioria trata de salvarlo. El titán le brinda su relámpago antes de desaparecer por completo. Mientras, lejos de ahí Camus vence al lagarto de fuego con su Aurora Execution. En otro lugar, Hiperión siente la muerte de Ceo y el engaño de Mnemóside, quién borró los recuerdos de todos los demás titantes. Hiperión la amenaza para recuperar sus recuerdos y al hacerlo descubre una sorprendente verdad, antiguamente él era el dios del sol, pero ese puesto le fue arrebatado y fue sellado dentro de otro dios maligno de las profundidades, Apofis. En un combate, es derrotado por el santo dorado Aioros de Sagitario, y hubiese muerto sino hubiese sido por Pontos, que lo alimentó con su cosmos y sangre divina, tardó 10 años en recuperarse. Pontos le pide que se una a él y abandone a los titanes, ya que ahora practimente es su padre, compartiendo la misma sangre. Hiperión responde cortando a Pontos por la mitad de un solo golpe. Acto seguido Hiperión y su planeta hacen aparición frente al grupo de santos dorados. Mientras tanto, Líthos despierta de su sueño y se encuentra con Cronos. La niña se propone escapar del tártaro y lleva al titán sin memoria con ella. Volviendo a la pelea, Hiperión ataca varias veces a Aioria y es defendido por los otros santos de oro. El titán se pregunta quien va a enfrentarlo y Aioria se levanta, prentendiendo saldar todas las cuentas pendientes entre ellos.
Gaiden 15: Aioria carga su Photon Burst, argumentando que no es un poder capaz de derrotar a un dios, sino un poder para proteger a todos.
Hiperión destruye su planeta, dejando fragmentos pequeños sobre él. Aioria lo ataca pero el titán corta el relámpago con su espada. El santo dorado aprovecha para acestar un golpe en su cuerpo pero su puño lo atraviesa sin tocarlo, fue una ilusión creada por los destellos de los fragmentos de su planeta. Aioria continua atacando pero no distingue si su oponente es real u otra ilusión. Así que intenta nuevamente combinar su Photon Burst con su Lighting Bolt. Mientras Líthos y el joven Cronos tratan de salir del laberinto. Aioria lanza su técnica, así que Hiperión la enfrenta con su técnica más poderosa. Lejos de ahí en la tumba de Aioros, el brazo mecánico de Garan explota por completo, entonces presiente que algo malo le pasó a su amo. El brazo derecho de Aioria quedó totalmente carbonizado, Aioria sorprendido ataca con su puño izquierdo, cuando Hiperión se disponía a hacerlo lo mismo que su brazo derecho, el santo de Leo lo esquiva. A punto de golpearlo desde un ángulo muerto para el titán, este lo detiene con una veloz patada que deja inconsciente al santo. Sin embargo, Aioria continua luchando en ese estado. Hiperión lo despierta con otro golpe. Líthos y Crono salen al exterior, Aioria siente su presencia lo que refuerza su decisión de rescatarla, levanta su brazo carbonizado y gracias al cosmos de Garan y de Ceo, lanza un gran golpe que es repelido con otro golpe de la misma magnitud por parte del titán. En otro lugar, Pontos se sorprende porque estos santos hayan quitado el poder a los titanes vencidos, pero su acompañarte le dice que no los arrebataron sino que ellos se los concibieron. Continúan su combate, tras muchos ataques comienza a notarse la superioridad del dios, Aioria vuelve a intentar su Photon Burst, Hiperión está dispuesto a devolvérselo. Mientras tanto, Líthos y Cronos buscan una manera de bajar pero no hay escaleras, entonces aparece una misteriosa persona que les les crea una escalera a base de piedras flotantes y luego esa persona desaparece. Hiperión crea una ola de lava, pero Aioria la repele de un golpe gracias al poder que le otorgó Ceo, y avanza creando un escudo con su Dunamis en su brazo derecho, almacenando todos los fotones en su brazo izquierdo con el cual acesta un gran golpe al titán, pero este se niega a perder y contrataca. Lo intenta por segunda vez y le vuelve a golpear pero Hiperión contrataca con más firmeza. Los dos brazos del santo dorado están muertos, entonces Hiperión lanza un golpe final pero es detenido por el puño izquierdo de Aioria, quien se dispone a golpearlo con su otro puño recuperado por el Dunamis que atraviesa a Hiperión de un golpe. Entonces, con el mismo puño dentro de Hiperión, eleva su cosmo y lanza su Lighting Bolt. Al final, Aioria sostiene y abraza a Hiperión evitando que este caiga al suelo.
Gaiden 16: Hiperión reclama su oponente, no le importa que vayan todos a la vez. Aioria le hace frente, pretendiendo terminar la pelea que comenzaron hace un tiempo.
Aioria sostiene a Hyperion a quien derrotó, de pronto aparece agua oscura rodeándolo, esa agua negra hace una figura de cosmos de Pontos quien reclama el cuerpo y la sangre de Hyperion pues según sus palabras le pertenecían por haberlo revivido. Aioria debate las implicaciones de poseer a otros y apela al destino de cada uno, pero Pontos se burla del destino y dice que eso es sólo un plan divino, para demostrarlo el dios primordial hace que el cuerpo de Hyperion se levante. La figura de cosmos de Pontos ataca a Leo y éste responde con un Relámpago de Voltaje, pero Pontos está cubierto con un Ars Magna, el manto más antiguo otorgado por Gea. Pontos vistiendo su Ars Manga lanza su poderoso Dunamis contra Aioria lo que seguramente lo hubiera destruido si Hyperion no se hubiera levantado a proteger al Santo de Leo con su Espada de Prominencia. Hyperion dice que no será controlado tan fácilmente y que acabará con Pontos, así que el Titán antes de caer al Tártaro encomienda a Aioria el cuidado de su pueblo para que disfruten la luz del sol. Leo quiere enfrentar a Pontos, Milo quiere irrumpir pero Aioria le niega la participación en la lucha, pero Hyperion es el que continúa la lucha y con su Espada corta el agua negra de la que estaba hecha la figura de Pontos. Peleando, pero sin violencia Aioria e Hyperion terminan su batalla, el Titán encomienda al Santo de Leo el cuidado de su pueblo, de su rey Cronos y de su propio poder. Pontos se cuestiona por qué Hyperion rechazó su control, Prometeo le dice que el Titán tenía algo más importante, tenía sentimientos. Aioria hace la promesa a Hyperion de cuidar a su pueblo y su rey cuando de pronto la tierra se rompe y aparece Líthos cayendo desde arriba, Aioria salta para protegerla y al tenerla en sus brazos le hace la promesa de no volver a separarse de ella. Mnemosine y la figura misteriosa que ayudó a Cronos y a Líthos a salir del laberinto tienen una conversación sobre el plan de Pontos y la memoria del Cronos, sobre la historia de la vida del rey de los Titanes y la desconfianza que genera en todos los demás. Mientras tanto Aioria termina de salvar a Líthos pero aparece flotando Cronos, Leo se arroja inmediatamente a atacarlo pero Líthos le dice que no lo haga pues huyeron juntos del laberinto, ni Aioria ni los demás santos detectan algún cosmos agresivo en él. Cronos todavía sin memoria va a donde está el cuerpo de Hyperion y siente el amor y respeto que el Titán sentía por él, de pronto Cronos recuerda el nombre de Hyperion y para sorpresa de todos el Tártaro absorbe al Titán. Cronos se pregunta quién es él, de repente unos brazos negros intentan absorber al rey de los titanes pero Aioria lo rescata del destino del Tártaro cumpliendo su promesa. Para cumplir su promesa con Hyperion, Aioria salva a Cronos de caer al Tártaro, el Santo de Leo no puede soportar y él también podría caer pero son salvados por Aldebarán de Tauro quien los levanta del abismo y Shaka los transporta a suelo seguro. Aioria intenta generar confianza en Cronos e incluso tiene un enfrentamiento verbal con Milo que quiere interrogarlo, pero él y los demás santos de oro están de acuerdo en que deber compartir confianza con él para que ponga fin a la guerra y salve a su pueblo. Las palabras de todos y la vivencia con Líthos hacen que Cronos llore y esté a punto de terminar con la guerra, sin embargo de último momento Pontos ordena a Mnemosine que libere la memoria de Cronos, de esta forma obtiene su verdadera personalidad y su Soma, preparándose para arrebatar el mundo a la humanidad.
Gaiden 17: Aioria atraviesa a Hyperión de un golpe. Entonces, con el mismo puño dentro de Hiperión, eleva su cosmo y lanza su Lighting Bolt. Al final, Aioria sostiene y abraza a Hiperión evitando que este caiga al suelo. Hyperión reflexiona sobre el porqué luchar y entiende que lucha por los demás, admite que ha sido un tonto.
En algún lugar de Egipto, Aioros vence a un grupo de soldados de Ra. Mientras tanto en la región de Nubia, al sur de Asuán, Miko Hasegawa, una arqueóloga, espera a su guía, quien llega tras cuatro horas de retraso y se presenta como Rius. Rius deja a la arqueóloga cerca de la presa de Asúan junto con un niño llamado Leo, ella ya ha encontrado la entrada a las ruinas que busca pero necesita la ayuda de Rius para conseguir los permisos del gobierno Egipcio. Mientras tanto Rius se encuentra con Garan, quien le dice que tienen permiso solo por esta noche. Una criatura sale de la apertura que encontró Miko, pero es fácilmente destruido por el ataque de Leo. Miko y Leo entran a las ruinas que están llenas de agua, pero no son desgastadas por esta. Varias otras criaturas se levantan pero Leo las destruye usando un Lightning Plasma. La arqueóloga encuentra un ataúd negro y se da cuenta de que el líquido es Icor, el sello del ataúd fue quebrado cuando se construyó la presa y varias criaturas han absorbido el Icor convirtiéndose en monstruos. Cuando Leo está a punto de ser abrumado es salvado por Aioros, quien le explica la situación. Del Icor se despierta Apofis, pero es vencido por la flecha dorada de Aioros. Luego de que los santos y Miko salen de las Ruinas, Pontos se levanta del ataúd.