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Arte medieval

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El arte medieval es una etapa de la historia del arte que cubre un prolongado período para una enorme extensión espacial.Error en la cita: Error en la cita: existe un código de apertura <ref> sin su código de cierre </ref>

  • Ser una ofrenda a Dios, a los santos y a los difuntos, con el fin de obtener su gracia, su indulgencia, etc. Es por ello que, incluso aquellos que como San Francisco de Asís promovían la pobreza, no dudaban de la legitimidad de la riqueza de los adornos de las iglesias, monasterios u otros lugares de culto, puesto que esta riqueza era vista como una ofrenda necesaria a Dios, para la que eran necesarios los mejores materiales y las mejores técnicas.
  • Ser intermediaria entre el mundo sobrenatural y el humano, haciendo visible en este las realidades divinas, según la máxima paulina per visibilia ad invisibilia (a través de lo visible hacia lo invisible). Se suele atribuir a las imágenes medievales una función pedagógica: explicar los dogmas de la fe cristiana y la historia sagrada a los iletrados (el catecismo de piedra), si bien no todos los expertos están de acuerdo sobre este punto.[1]
  • Ser una afirmación de poder: por un lado, del poder de Dios y de la Iglesia (el poder religioso -teocracia, plenitudo potestatis-); por otro, del poder político (emperadores, reyes, y las mismas instituciones eclesiásticas). A finales de la Edad Media van surgiendo en otros agentes sociales los medios suficientes para encargar obras de arte (la burguesía).

Movimientos artísticos y periodos principales

Alta Edad Media[2]

  • El arte paleocristiano es en realidad un arte de la Edad Antigua, puesto que cubre el período desde el siglo III (antes de este no han sobrevivido muestras de arte cristiano), hasta la caída del Imperio de Occidente (siglo V). Durante este período las obras de arte cristianas adoptaron las distintas técnicas artísticas romanas de arquitectura, pintura, mosaico, talla y trabajo de los metales.
  • El arte bizantino, desarrollado en el Imperio romano de Oriente (con centro en Constantinopla), aunque muy influyente en Occidente. La época de mayor esplendor correspondió al reinado de Justiniano I (527-565), cuando se construyó Santa Sofía. Durante el período de iconoclasia (730-843) la mayor parte del arte figurativo fue destruido; tan sólo han sobrevivido algunos ejemplos, destacadamente los mosaicos de Rávena y los iconos del monasterio de Santa Catalina del Monte Sinaí. Después de la reanudación de producción de iconos la tradición bizantina continuó con relativamente pocos cambios, a pesar de (o precisamente debido a) la lenta disminución del Imperio hasta 1453. Las sucesivas destrucciones debidas a los cruzados y a los turcos ha limitado la conservación de uno de los artes más refinados de la Edad Media en términos de calidad de material y habilidad. El estilo bizantino se prolongó en el arte ruso.
  • El arte islámico durante la Edad Media, además de la producción arquitectónica (las demás artes plásticas tienen un desarrollo menor al no permitirse la representación de figuras —aniconismo—) cubre una amplia variedad de artesanías incluyendo manuscritos ilustrados, textil, cerámica, trabajo en metales y cristal. Son la muestra de la cultura material islámica en el Próximo Oriente, España (arte de Al-Andalus), y África del Norte. Puede deslindarse una temprana etapa formativa (600-900) y el desarrollo de estilos regionales del siglo X en adelante.
  • El arte prerrománico cubre el periodo del siglo V al siglo X en Europa Occidental. Las influencias clásicas y las germánicas son activamente absorbidas y se desarrollan las formas y motivos que más tarde constituyen el arte románico. Se divide en distintos estilos locales:

Baja Edad Media

Abadía de Cluny.
Catedral de Milán.
Fuente de los leones de la Alhambra, arte nazarí.

Dos estilos internacionales marcan la época, dividiéndola en dos mitades: el arte románico los siglos XI y XII y el arte gótico, que comienza en Francia a mediados del XII y se va imponiendo en el resto de Europa Occidental en el siglo XIII y el XIV. El siglo XV significará el final de la Edad Media y la irrupción del nuevo arte de la Edad Moderna. El nombre románico es utilizado a partir de los historiadores de arte del siglo XIX, para compararlo con la arquitectura romana antigua; mientras que el término gótico es un despectivo utilizado por los artistas y tratadistas de arte del Renacimiento para designar a todo el arte medieval (incluido lo que hoy llamamos prerrománico y románico), que consideraban una degeneración del arte clásico de Grecia y Roma contaminado por los godos (por tanto, gótico).

Diversidad espacial

Durante todo el periodo, el arte italiano es una excepción dentro de Europa Occidental, caracterizada por la influencia bizantina (muy visible en la Basílica de San Marcos (Venecia) y la herencia clásica (Púlpito del baptisterio de Pisa de Nicola Pisano), que, aunque produzca ejemplos paradigmáticos de un estilo internacional (el románico de la Catedral de Pisa o el gótico de la Catedral de Milán) siempre lo hace desde la adaptación a una visión propia, más horizontal y armónica (véase Arquitectura románica en Italia). La arquitectura en Alemania, en cambio, se caracterizó por una mayor búsqueda de la altura. En la península ibérica, los reinos cristianos alternaron entre una mayor influencia de Italia (Corona de Aragón) o Francia y Flandes (Corona de Castilla), y la constante influencia del arte islámico (arte mudéjar), mientras que los reinos musulmanes desarrollaban el arte almohade o el arte nazarí. En Francia también se produjo una gran diversidad estilística (entre Île de France, Provenza, Auvernia, Aquitania, Bretaña o Borgoña) y en algún caso, como el de Normandía, se exportó (Arquitectura normanda, de influencia notable en el sur de Italia —arte árabe-normando— y en las Islas Británicas, sobre todo en el románico inglés y con desarrollo posterior en ciertas características diferenciales del gótico inglés y el estilo Tudor).

Las dos grandes épocas

  • En la arquitectura románica los edificios se caracterizan por sus macizos muros y contrafuertes para sostener una robusta bóveda de cañón, basada en el arco de medio punto. Las estructuras, por comparación con el gótico, son de escasa altura y con pocos vanos, lo que implica una menor entrada de luz, que se intenta compensar con el abocinamiento de las arquivoltas de pórticos y ventanales. Subordinada al soporte arquitectónico, la profusa decoración escultórica (capiteles, tímpanos) y pictórica (frescos en los ábsides y paredes interiores), de líneas muy marcadas y colores planos, formas geometrizantes y hieráticas, convertía a los templos en verdaderos evangelios de los iletrados.
  • La arquitectura gótica nace a mediados del siglo XII en la región francesa de Ile de France, con la renovación de la iglesia de la abadía de Saint-Denis: la introducción del arco apuntado, la bóveda de crucería y los arbotantes que desplazaban el peso de las bóvedas a contrafuertes exteriores, dejando la posibilidad de aligerar los muros para conseguir construcciones de una altura extraordinaria y llenas de luz. La escultura gótica también se puede asociar al gótico arquitectónico francés que se extendió a todas partes de Europa. El siglo XIII permite hablar de un estilo internacional sustituyendo el arte románico. El gótico internacional caracteriza al periodo de aproximadamente 1360 a 1430, después del cual el gótico en distintas partes de Europa va combinándose con aportaciones del Renacimiento que está surgiendo en Italia; aunque en muchos lugares siguen haciéndose edificios góticos hasta el siglo XVI, denominados con distintos nombres de estilo (en el norte de Europa gótico flamígero, gótico tardío o flamboyant y estilo Tudor, y en la península ibérica gótico isabelino plateresco y manuelino). Los cambios pictóricos no comenzaron a ser suficientes para hablar de un estilo diferente al románico hasta comienzos del siglo XIII, caracterizado por una mayor expresión de sentimientos y un mayor realismo o naturalismo en la representación de la realidad. La utilización del soporte tabla y la técnica del temple se hace muy extensiva, produciendo retablos, dípticos, trípticos y polítpticos, que permiten un tamaño mayor o menor, la posibilidad de un arte mueble y su comercialización, respondiendo al aumento de los clientes del mercado del arte, que ya no se reducen a las instituciones eclesiásticas, sino que incluyen a las monarquías, las casas nobles y a la pujante burguesía. Al final del período se introduce la innovación tecnológica del grabado, que permitió el nacimiento de un nuevo medio de comunicación a través de las múltiples copias. En el siglo XV aparecerá la pintura al óleo, que permite un extraordinario detallismo.

[6]

Véase también

Notas

  1. Jerôme Baschet, L'iconographie médiévale, París, Folio, 2008.
  2. Caecilia Davis-Weyer, Early Medieval Art, 300-1150: Sources and Documents, 1971.
  3. Emma C.Bunker, Animal Style Art from East to West, Asia Society. Fuente citada en Animal style
  4. Pietroasele treasure, fuente citada en Polychrome style
  5. Marco Bussagli, Comprender la arquitectura Madrid: Susaeta, ISBN 84-305-4483-6, pg.117
  6. ArtehistoriaArteguías
  7. Ficha en CREHA

Enlaces externos