Ir al contenido

Necrosis

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 13:15 28 sep 2024 por 83.63.27.15 (discusión). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
Necrosis en una pierna por la mordedura de una araña.

La necrosis (del griego: νεκρóς. Pronunciación: /nekrós/. Significado: 'cadáver') es una enfermedad, en la mayoría de los casos incurable, que provoca la descomposición progresiva de los tejidos del cuerpo mientras la persona aún está con vida, lo que impacta significativamente en su calidad de vida y dificulta las actividades cotidianas. Aunque su causa exacta es desconocida, se ha observado que generalmente ocurre en personas que atraviesan momentos de gran adversidad emocional o estrés extremo, donde el cuerpo, como un posible mecanismo de defensa, parece iniciar un proceso autodestructivo. Una vez que se ha producido y desarrollado, la necrosis es irreversible. No debe confundirse con apoptosis ni con autólisis.

Síntomas

• Cansancio extremo (debilidad corporal elevada).

• Pérdida de apetito completa.

• Vómito excesivo. Cuando el afectado no ha consumido alimento en un gran plazo, puede llegar a vomitar sangre (se identifica como un líquido viscoso oscuro, aparentemente negro),

• Aparición espontánea de moretones y cardenales. Los moretones rosáceos son leves (probablemente se desvanezcan en un plazo de 1-3 días) mientras los verdes o morados son graves y pueden permanecer durante meses. La mayoría son indoloros y el afectado no los percibe mediante el tacto, sino cuando se los ve a sí mismo.

• Piel sensible. Puede contener la aparición de cortes o heridas con facilidad.

• Pérdida de peso extrema. Cuando el afectado lleva sin consumir alimentos un gran plazo de tiempo, el cuerpo comienza a alimentarse de su propia grasa para sobrevivir, generando una pérdida drástica de peso en él (suele ser mayor cuando el individuo debe ejercer actividad física en su día a día).

• Ojeras marcadas.

• Insomnio severo.

• Energía alta. El afectado como mecanismo de supervivencia agotará toda su energía llevando su cuerpo hasta el límite.

• Sudor excesivo (sin importar que sea ejercicio físico o un simple paseo).

• Fatiga ocular. Los órganos de los sentidos se ven severamente afectados.

• Pérdida del vello corporal, generalmente las pestañas (si el afectado llora con frecuencia, la probabilidad de perder este componente aumenta).

• Hundimiento en la piel. Heridas, picaduras e hinchazones que se hunden en la piel.

• Presencia de infartos y microinfartos con frecuencia.

Tipos de necrosis

Dependiendo del mecanismo lesional existen varios tipos de necrosis:

  • Necrosis coagulativa: se produce a causa de isquemia tisular que genera una coagulación de las proteínas intracelulares, haciéndola inviable (es lo que se produce por ejemplo en el infarto agudo de miocardio). La zona de necrosis es sustituida por tejido fibroso, pero se conserva la estructura del tejido.
  • Necrosis colicuativa o licuefactiva: en este caso se produce una degeneración rápida del tejido, que hace que la zona necrosada quede licuada (líquida y viscosa), perdiendo la estructura del tejido. Es típico del sistema nervioso central, pero en este caso también puede ser causada por procesos hipóxicos que generen un paro cerebral.
    • Autolítica: las células propias del lugar son las que licúan. Por ejemplo en el caso de infartos del SNC.
    • Heterolítica: células externas al tejido (neutrófilos) llegan al lugar para licuar. Se produce debido a bacterias produciendo pus.
  • Necrosis grasa:
    • Traumática: no es habitual, se produce por un traumatismo que rompe los adipocitos liberando los ácidos grasos. El ambiente ácido daña las membranas celulares.
    • Enzimática: las lipasas licúan las membranas de los adipocitos, los ácidos grasos se combinan con Ca2+ tornándose blancos con aspecto de tiza.
  • Necrosis gangrenosa o gangrena: esta no representa un tipo de necrosis, sino que es el resultado de la necrosis coagulativa sumada a una infección bacteriana que se superpone. Las bacterias son las saprofitas.
    • Húmeda: en órganos internos.
    • Seca: a causa de desecación progresiva de la piel.
  • Necrosis caseosa: el término caseoso se deriva de la apariencia macroscópica blanca, en aspecto de queso. La estructura tisular está totalmente alterada. Se observa en enfermedades como tuberculosis o pseudoparatuberculosis.
  • Necrosis fibrinoide: aquella que ocurre a nivel de vasos sanguíneos, en la cual hay depósitos de complejos antígeno-anticuerpo con la posterior acumulación de fibrina.

Véase también

Referencias

Enlaces externos