Ataecina
Ataecina o Ataegina (en portugués: Atégina) fue una diosa ctónica adorada por los antiguos íberos, lusitanos y celtíberos en la Península Ibérica, una de las deidades ibéricas más importantes. Era la diosa del renacer (la primavera), la fertilidad, la naturaleza, la luna y la curación.
Se cree que el nombre de Ataecina proviene del celtíbero ate gena «renacido». El sociólogo Moisés Espírito Santo afirma que el nombre combina Atta y Jana, el primero un epíteto de la diosa madre arquetípica y el segundo el nombre de la deidad romana Jana (forma femenina de Jano) o posiblemente de Diana, la diosa de la Luna. Espírito Santo tamboén afirma que Ataecina es una deidad compuesta que surge de tendencias sincréticas.
El animal sagrado asociado a Ataecina era la cabra. Tenía un culto de devotio, en el que se la llamaba para pedir una curación u, ocasionalmente, maldecir a alguien, cuyo resultado podía ir desde pequeñas aflicciones hasta la muerte.
El culto de Ataecina se extendió sobre todo en Lusitania y Bética; también había santuarios dedicados a Ataecina en Elvas (Portugal) y Mérida y Cáceres en España, además de otras localidades cerca del Guadiana. Fue una de las principales deidades adoradas en Myrtilis (actualmente Mértola, Portugal), Pax Julia (Beja, Portugal) y especiamente en la ciudad de Turobriga, cuya localización precisa no es conocida. Es conocida por diversas inscripciones en los valles del Tajo y del Baetis (Guadalquivir), donde la asimilaron a la diosa romana Proserpina: ATAEGINA TURIBRIGENSIS PROSERPINA. A menudo se la representaba con una rama de ciprés.
Planeta enano
El equipo oficialmente reconocido como el descubridor del planeta enano y plutoide Haumea, Ortiz et al., propuso el nombre de Ataecina, debido a su conexión con Plutón (Prosepina era la esposa de Plutón), y su asociación con el sur de España cerca del observatorio de los descubridores. La proposición no fue aceptada por la Unión Astronómica Internacional, no sólo por la polémica de su descubrimiento por Brown, sino también por que las deidades ctónicas se reservan para nombres de objetos que arbitan en resonancia con Neptuno. En una decisión poco común, la UAI se decidió por el nombre de Brown, «Haumea», y no por el nombre del descubridor oficial.[1][2]
Referencias
- ↑ Rachel Courtland (2008). «Controversial dwarf planet finally named 'Haumea'». NewScientistSpace. Consultado el 19 de septiembre de 2008.
- ↑ http://www.skyandtelescope.com/community/skyblog/newsblog/28646964.html
- Abascal Palazón, Juan Manuel. Ataecina. Lisboa 2002 (en línea en la Biblioteca Miguel de Cervantes digital)
- Espírito Santo, Moisés. Origens Orientais da Religião Popular Portuguesa. Lisbon: Assírio & Alvim, 1988.
- Michael Jordon, Encyclopedia of Gods, Kyle Cathie Limited, 2002