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Alhambra

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Alhambra, Generalife y Albaicín de Granada

Patrimonio de la Humanidad de la Unesco


Vista de la Alhambra. Error de Lua en Módulo:Mapa_de_localización en la línea 361: No se ha dado valor a la latitud.
Localización
País EspañaBandera de España España
Coordenadas 37°10′35″N 3°35′18″O / 37.17634, -3.58821
Datos generales
Tipo Cultural
Bien de interés cultural RI-51-0010966 desde el 23 de marzo de 2004[1]
Criterios i, iii, iv
Identificación 314
Región Europa
Inscripción 1984 (VIII sesión)
Extensión 1994
Sitio web oficial

La Alhambra es una ciudad palatina andalusí located on Granada, España. Consiste en un conjunto de palacios, jardines y fortaleza (alcázar o al-qasr القصر) que albergaba una verdadera ciudadela dentro de la propera cytye Granada, que servía como alojamiento al monarca y a la corte del Reino nazarí de Granada. Su verdadero atractivo, como en otras obras musulmanas de la época, no sólo radica en los interiores, cuya decoración está entre las cumbres del arte andalusí, sino también en su localización y adaptación, generando un paisaje nuevo pero totalmente integrado con la naturaleza preexistente. En 2011 se convirtió en el monumento más visitado de España, recibiendo la cifra histórica de 2 310 764 visitantes.[2]

Etimología

Etimológicamente, «Alhambra» en árabe es «al-Ħamrā» (اَلْحَمْرَاء, 'la Roja'), procedente del nombre completo «al-Qal'a al-hamra» ('fortaleza roja'). En su evolución, el castellano intercala entre la m y la r una b, como en «alfombra», que en el árabe clásico tenía el significado de 'rojez', escrito como «al-humra». Existen más teorías para explicar el origen del nombre de la Alhambra, pues hay otros autores que arguyen que en la época andalusí la Alhambra estaba encalada y su color era blanco. El nombre de «roja» le vendría porque cuando se construyó se trabajaba de noche, y vista por la noche, desde lejos, debido a la luz de las antorchas, se veía roja. Otros autores defienden que «Alhambra» es simplemente el nombre en femenino de su fundador, Abu al-Ahmar (Muhammad I, reinado 1238-1273), que en árabe significa 'el Rojo', por ser pelirrojo.

Historia, emplazamiento y accesos a la Alhambra

Vista de los palacios nazaries, con las cumbres nevadas de Sierra Nevada al fondo.
Puerta de la Justicia.

La Alhambra se levanta sobre la colina de la Sabika, uno de los puntos más elevados de la ciudad de Granada. Este emplazamiento buscaba una situación estratégica defensiva y a la vez transmitir un claro símbolo, donde la cima del poder es muy perceptible para el resto de la ciudad, una ubicación escogida para ser contemplado.[3]​ La ocupación de esta colina se remonta a tiempos romanos. Del año 899 datan las primeras referencias escritas de un emplazamiento militar en la zona. A mediados del siglo XI, al convertirse Granada en capital del reino de Taifa, bajo la dinastía ziríes, se ampliaron las construcciones.

La Alhambra pasó a ser residencia real, a partir de 1238, con la llegada al poder de Muhammad ibn Nasr, primer monarca del Reino nazarí de Granada, para lo que creó un abastecimiento de agua propio. Las construcciones más lujosas de los palacios que hoy se conservan, el palacio de Comares y de los Leones, proceden del siglo XIV. El conjunto tiene una forma alargada e irregular adaptada a la forma de la colina sobre la que se levanta. Su longitud es de 740 m. y su anchura varía entre los 180 y los 40 metros.[4]

Puertas

Las diferentes vías de acceso al recinto son:[3]

  • Accesos nazaríes
    • Puerta de las Armas. Es la más antigua de las entradas de la Alhambra, a la que se llega desde la orilla del Darro, bordeando la torre de la Vela y terminando debajo de la torre de las Armas, en la parte norte del recinto.
    • Un segundo acceso que también existía desde época nazarí es a través de la Cuesta de los Chinos, al final del paseo de los Tristes, que conducía a la Puerta del Arrabal bajo la torre del mismo nombre, también al norte.
    • Puerta de la Explanada o de la Justicia que llegaba hasta la puerta del Vino, entrada por la medina baja, situada al sur. Es de época de Yusuf I, 1348. En el centro puede verse el relieve de una mano y sobre el 2º arco, el relieve de una llave.
    • Puerta de las Albercas (siete suelos) que daba acceso a la parte alta de la medina.
  • Época cristiana
    • En tiempos de Carlos V se levanta la Puerta de las Granadas, que da acceso a la cuesta de Gomérez y de ahí a la Puerta de la Explanada. subiendo desde plaza Nueva. Se desemboca en una explanada llamada Plaza de los Aljibes, por estar encima de una serie de aljibes. A la derecha está la Puerta del Vino, es uno de los edificios más antiguos, siendo atribuida su edificación a la época del Sultán Muhammand III (1302-1309), la decoración de la fachada o portada de poniente corresponde a la época finales del siglo XIII o principios del siglo XIV, y la de levante es posterior a 1367, y que comunica la Alcazaba con la zona de palacios.
  • Puerta de los Carros.

Acceso actual

El actual acceso al recinto de la Alhambra se realiza desde 1988 a través de la red viaria exterior, próxima al actual cementerio, para eliminar el tráfico perjudicial por los accesos tradicionales.

Descripción de los edificios

Plano de la Alhambra.
Vista exterior de la Alcazaba de la Alhambra desde el norte. A la derecha se levanta la torre de la Vela, a su izquierda más bajas se distingue la torre de Armas y a la izquierda destaca por sus dimensiones la torre del Homenaje y delante de ella la torre del Cubo.

Alcazaba

Vista en primer plano de la barbacana y muralla de la Alcazaba, por detrás la torre de armas y al fondo torre de la Vela.

La alcazaba es el recinto situado en la parte más occidental del cerro de Sabika, constituía la zona militar, centro de la defensa y vigilancia del recinto y con ello fue la parte de construcción más antigua de la Alhambra. Las primeras edificaciones árabes realizadas se corresponden con la época califal, en el siglo XI, ampliándose las mismas al convertirse Granada en capital de uno de los reinos de Taifas. Con Muhammad I, primer rey nazarí de Granada, se reconstruyó y amplió esta fortaleza, se reforzaron sus muros y se levantaron las principales torres. Su sucesor Muhammad II terminó las obras de reconstrucción de la alcazaba. Con anterioridad a la edificación de los palacios nazaries, esta área compartía también una función de alojamiento real. La alcazaba tiene una forma trapezoidal, sus elementos principales son:

  • Norte: avanzando de derecha a izquierda
    • Terraza de la Torre del Cubo. Torre semicircular, construida alrededor de 1586, sobre una puerta islámica, fue vaciada en el siglo XX. Hoy en día constituye una terraza de privilegio para la contemplación del valle del Darro y el Albaicín.
    • Adarve de la muralla norte.
    • Plaza de Armas y terraza o torre de la plaza de Armas. A finales del siglo XIV Ismail I levantó una puerta bajo esta torre, para las subidas desde Granada, lo que supuso una reestructuración de la zona norte, demoliendo parte de las caballerizas para su construcción.[5]
    • Torre de los Hidalgos, ubicada a los pies de la torre de la Vela, tiene carácter defensivo.
  • Oeste
    • Torre de la Vela, (1238-1273) constituía la torre de defensa más grande del conjunto militar, por su altura domina toda la vega granadina. Su nombre procede de la campana que los cristianos colocaron en la torre tras la conquista de la ciudad. Sonaba al alba para avisar a los agricultures del riego de las huertas en la Vega de Granada, por tanto, los mantenía en vela, y de ahí su nombre.
    • Bastión de artillería, revellín, construido en el periodo cristiano.
  • Sur
    • Torre de la pólvora.
    • Jardín de los Adarves, fue creado en el siglo XVII, cuando la fortaleza perdió su carácter defensivo. Existen buenas panorámicas desde este jardín.
  • Este, es el lado más amplio del trapezoide que forma la alcazaba, con unos 75 metros. Al otro lado de esta muralla se encuentra la gran explanada de la plaza de los Aljibes.
    • Torre del Homenaje, es la mayor de las torres de este frente, tiene entre 22 y 26 metros de alto y se levanta en la parte más elevada de la fortaleza. En el siglo XIV, constituía junto con la Torre de la Vela, los principales bastiones defensivos de la Alhambra, ofreciendo protección al recinto. En su interior se distinguen seis pisos. Se cree que fue en esta torre donde instaló su residencia Al-Ahmar, el fundador de la Alhambra, cuando decidió construir su palacio. Se encuentra verticalmente, dividida en dos zonas bien diferenciadas. Una zona inferior que comprende los dos primeros niveles, en los que su acceso se hace bajo la muralla norte. La zona superior que comprende el resto de niveles tiene accesos desde la muralla norte y el adarve del muro este. El nivel más alto pudo servir a los alcaides del recinto de centro de operaciones de defensa, y el más bajo, una mazmorra, para almacenar grano, sal y especias.[5]
    • Torre Quebrada.
    • Torre Adarguero.

En el centro de la alcazaba se encuentra el barrio castrense, donde se hayan los restos de los muros de las casas que ocupaban este lugar.

Palacios nazaríes

Plano de los Palacios nazaries y de las Habitaciones del Emperador.
Mexuar -amarillo-
Palacio de Comares -rojo-
Palacio de los leones -verde-
Habitaciones del Emperador -azul-
Paño de azulejos del Mexuar, en el que se combina la técnica y estilo nazarí con la simbología cristiana, que representa el águila bicéfala de la monarquía castellana.

Los palacios nazaríes son el conjunto formado por el Palacio de Comares, construido en primer lugar, y el Palacio de los Leones. Cronológicamente fueron levantados después de la alcazaba, el generalife y el Partal, siendo su construcción del primer tercio del siglo XIV. Constituía la sede de las funciones administrativas, de la corte, protocolo y retiro y disfrute privado. Al bajar las escaleras de acceso, se van encontrando las siguientes dependencias:

Mexuar

Su nombre proviene del término árabe Maswar, lugar donde se reunía la Sura (Consejo de Ministros). La estancia ha sufrido numerosas transformaciones. Debió pertenecer a una estructura anterior al Palacio de Comares y al de Los Leones, y probablemente al construido por Isma’il I (1314-1325).[6]

Es la sala más antigua. En época árabe servía de sala de audiencia y justicia para casos importantes. Tenía una cámara elevada cerrada por celosías donde se sentaba el sultán a escuchar sin ser visto. No existían las ventanas laterales. Tenía el techo abierto en su parte central. Al fondo se encuentra una pequeña habitación, que servía de oratorio, desde donde se divisa el Albaicín, se encuentra orientado de forma diferente a la muralla, para cumplir su función religiosa. En tiempos cristianos se utilizó como capilla.

La decoración es el resultado de multitud de intervenciones entre el siglo XVI y el siglo XX, en la que destacan las columnas y capiteles característicos de la arquitectura nazarí. En los paños de azulejos que decoran sus paredes se combinan piezas de origen nazarí con intervenciones y piezas cristianas. A continuación del Mexuar se accede a un patio con fuente en el centro y una cámara a la izquierda, denominado patio del Mexuar.

Patio del Mexuar y Cuarto Dorado

No se conoce con certeza el destino dado a esta zona en época árabe. Si se conoce que se adaptó como habitación para Isabel de Portugal, para su estancia en la Alhambra, aunque nunca llegó a ocuparla. En la fachada del cuarto destacan los capiteles de su arco de entrada. Dentro del cuarto sobresale la techumbre, en madera de cedro, y decoración de piñas y conchas, con armadura de cuatro faldones. Bajo él, ventanas cerradas con celosías. Dos portadas rectangulares bordeadas de cenefa de cerámica. La estancia está decorada con pinturas góticas y escudos y emblemas de los Reyes Católicos. Al cruzar el patio del Cuarto Dorado se accede a la fachada del palacio de Comares.

Palacio de Comares

La fachada del palacio fue erigida por mandato del Mohamed V, siendo inaugurada en 1370, es una fachada interior que anticipa la majestuosidad del interior del palacio.

Patio de la Alberca o de los Arrayanes

Es el recinto central de Palacio de Comares. A ambos lados de la alberca, que ocupa gran parte del patio, se encuentran plantados los arrayanes que dan nombre a este patio. En el mismo se puede encontrar uno de los temas ambientales de la Alhambra: la presencia del agua. Y no sólo actuando como tal, es decir, agua, sino también como espejo. Precisamente en esta alberca se refleja la imponente Torre de Comares. En un extremo hay una galería a lo ancho del patio y en sus extremos, alcobas de tertulia. Desde la galería se entra en la antecámara llamada:

Sala de la Barca
Vista del denominado patio de los arrayanes, de la alberca o de Comares, en el fondo se contempla el torreón de Comares.

Desde la galería norte del Patio de los Arrayanes y a través de un arco apuntado de mocárabes, accedemos a la sala de la Barca, llamada así ya que presenta ricas yeserías con el escudo nazarí y dentro de él, la palabra «Bendición», que en árabe se dice "Baraca", y que los castellanos escucharon como "Barca"; otra explicación podría ser que el nombre proviene por tener un artesonado magníficamente ensamblado en forma de casco de barco invertido. Esta sala, de forma rectangular de 24 metros por 4,35, parece ser que era más pequeña en un principio, y su ampliación fue realizada por Mohamed V. En esta sala existió una bóveda semicilíndrica que fue destruida por el fuego del incendio de 1890, sustituida por una reproducción de aquella que fue totalmente terminada en 1964. Los muros presentan las yeserías con el escudo nazarí y la palabra «Bendición» y el lema de la dinastía «no hay vencedor más que dios».

La sala se encuentra rodeada por un zócalo en cuyos extremos encontramos alcobas con zócalos de azulejos, que revisten las columnas que sujetan arcos peraltados y festoneados de mocárabes y pechinas. Desde aquí se accede al Torreón de Comares, presidido por el Salón de los Embajadores.

La Torre de Comares al anochecer vista desde el paseo del Padre Manjón
Torre de Comares, Salón de Comares o Salón de los Embajadores

Desde el patio de los Arrayanes destaca en uno de sus extremos, el imponente torreón de Comares, se accede a él por la sala de la barca. El salón de Comares es la estancia más amplia y elevada de todo el palacio, ocupa el interior de la Torre de Comares, dominando con su vista el valle del Darro. Su construcción data del segundo tercio del siglo XIV, siendo sultán nazarí de Granada, Yusuf I, aunque probablemente no viera terminada la obra que ordeno construir y adornar ricamente, ya que diversas inscripciones atribuyen su autoría a su hijo Mohamed V, su función principal era celebrar las audiencias privadas del sultán.

Presenta planta cuadrada de 11 metros de lado y 18 de altura, originalmente el suelo era de mármol y en la actualidad cerámico. En el centro de la sala se puede observar un cuadrado con el nombre de Alá escrito sobre azulejos.

Es un lugar con un contenido poético muy rico, podemos encontrar distintas composiciones, alabanzas a Dios y al emir y también algunos fragmentos del Corán. Cada centímetro de la pared está cubierto por algún elemento decorativo.

Vista del salón de Comares o de Embajadores, en el que se observan los vanos o alcobas abiertos en cada uno de los lados del salón.

En los laterales del salón hay 9 alcobas, tres por cada uno de los lados del salón, correspondiendo la alcoba central del lado norte al sultán, también se abren una serie de ventanas cerradas antiguamente por celosías de madera y vidrieras de colores llamadas cumarias, (de ahí el nombre de comares). Todas las paredes están cubiertas de yeserías con motivos de conchas, flores, estrellas, escrituras. Sala policromada: oro en el relieve, colores claros en lo profundo. Zócalo decorado con azulejos. El suelo original era de cerámica vidriada en blanco y azul con escudos de armas como motivos ornamentales.

Las paredes están, además, decoradas con versículos coránicos y poemas realizados en yesería, lo que le debían conceder a esta sala en sus orígenes, con la decoración que no nos ha llegado, con sus juegos de luz y su ambiente cortesano, una de las salas palaciegas más impresionantes del mundo islámico. La calefacción era de braseros y la iluminación con lámparas de aceite.

Uno de los aspectos más atrayentes del Salón de los Embajadores es su techo, de forma cúbica. En él se representan los siete cielos de la cultura musulmana, situados uno encima de otro. El Corán dice que sobre ellos está el trono de Dios; todo el techo está lleno de estrellas, en total son ciento cinco.

Patio de los Arrayanes.

El techo es una representación del Universo, quizás una de las mejores representaciones de la Edad Media. Realizado en madera de cedro con incrustaciones de maderas de diferentes colores, va formando estrellas superpuestas que forman diferentes niveles. En el centro y lo más elevado está el Escabel (عرش) sobre el que se establece Dios-Alláh según los relatos coránicos. Desde éste se van repitiendo las figuras geométricas que dividen el techo en siete espacios, que representan los siete cielos que descienden consecutivamente hasta este mundo: el 7 es uno de los números simbólicos por excelencia. Entre todos ellos configuran el Trono (كرس), que es el símbolo de la creación entera. Este uso simbólico de cosmología coránica –con tantas alusiones al Escabel, el Trono, al Rey que se asienta sobre él– tiene una clara intención de legitimar al soberano como representante (jalifa de donde viene califa) de Dios en la tierra. El hecho de que el salón fuese el salón del trono, que estaba situado en su centro, justo debajo del escabel divino, es una clara referencia a esto. Pero la simbología de la sala no acaba ahí: las 4 diagonales del Techo de Comares representan los cuatro ríos del Paraíso y el Árbol del Mundo (o Axis Mundi), que teniendo sus raíces desde el Escabel se expande por todo el Universo. Pero no acaba ahí su simbología: las alcobas, nueve presentes (tres en cada muro), más tres omitidas para dejar el paso a la sala de la baraka, son una referencia a las doce casas zodiacales, en correspondencia con el papel de séptimo cielo que ocupa esa altura.

Palacio de los leones

En un extremo del lado izquierdo del patio de los arrayanes, un pequeño arco sirve de ingreso a un pasadizo por el que se llega a la zona privada del monarca, el Harén (Haram significa lugar privado), el denominado palacio de los Leones.

El palacio de los Leones fue mandado construir por Muhammad V como residencia del sultán, supone un ejemplo de integración de arquitectura y agua, en la que esta se reparte desde la fuente de los leones situado en el patio hacia todo el palacio. El palacio se estructura a partir del patio, alrededor del cual se distribuyen las distintas estancias. Alrededor, las alcobas, salas privadas del sultán y esposas con piso alto abierto, sin ventanas que miren al exterior, pero con jardín interior como corresponde a la idea musulmana del paraíso. De cada una de las cuatro salas fluye un arroyo que va al centro: Los cuatro ríos del Paraíso descritos en el Corán.

Sala de los mocárabes

Se llama así por la bóveda de mocárabes que la cubría. La de hoy es del siglo XVII. Muros con labor de yesería, inscripciones religiosas y escudo de la dinastía Nazarí.

Patio de los Leones
El Patio de los Leones.

Se comenzó su construcción en 1377,[7]​ por deseo de Mohamed V, hijo de Yusuf I, siendo su alarife mayor Abén Cecid, concluyéndose trece años después. Los árabes de Granada, antes de llamar al Patio de los Leones Sahan al-Osud, lo hicieron con la denominación de Al-Haram. De planta ligeramente trapezoidal, el lado oriental es mayor que el de poniente (el de la sala de Mocárabes), el largo del conjunto 219 pies, incluyendo las salas de Mocárabes y Reyes es igual al triple del ancho del Patio en su lado menor o de poniente (73 pies).[8]

Se encuentra rodeado por una esbelta galería con 124 columnas de mármol blanco de Macael (Almería), que se presentan aisladas y agrupadas en conjunto de dos, tres, y hasta cuatro en las esquinas, sustentando, o bien sólo apuntalando, las arcadas de filigrana, siendo simétricos los lados mayores y asimétricos los menores, de los que avanzan sendo pabellones hacia el patio, en cuya intersección de ejes transversales y longitudinal se ubica la fuente con los doce leones que le da nombre.

Las columnas se unen con paños calados que dejan pasar la luz. Fustes cilíndricos muy delgados, anillos en la parte superior, capiteles cúbicos sobre los que corren inscripciones. Las planchas grises de plomo convierten los empujes horizontales en verticales. Los dos templetes que avanzan a los dos lados opuestos del patio son como un recuerdo de la tienda de campaña de los beduinos. Son de planta cuadrada, decorados con cúpulas de madera que se apoyan en pechinas de mocárabes. El alero es obra del siglo XIX. Toda la galería está techada con artesonado de lacería.

Fuente de los Leones

Posee una de las escasas esculturas de animales del arte islámico pues, basándose en las suras 15, 29 y 38, 72 del Corán, se reprueba representar cualquier ser animado.[9]

Los últimos datos conseguidos gracias a la restauración de los leones y la taza de la fuente han podido indicar que, tanto los leones como la taza, datan del siglo XIV y de la misma procedencia y material (mármol de Macael, Almería) siendo fabricada la fuente en su conjunto, tanto leones como taza, al mismo tiempo. Este descubrimiento viene a rectificar las informaciones que indicaban la procedencia de los leones de un palacio, anterior a la Alhambra, perteneciente al primer visir de la dinastía zirí Samuel Ibn Nagrella. A su vez, se ha podido descubrir tres tipologías de leones sobre la base de sus elementos formales diferenciadores. Cada una la conforma un grupo de cuatro leones con similitud dos a dos en sus rasgos: nariz, pelaje de la melena, fauces y posición y relieve de la cola.

Fuente de los Leones.
(...)A tan diáfano tazón,
tallada perla,
por orlas el aljófar remansado,
y va entre margaritas el argento,
fluido y también hecho blanco y puro.
Tan afín es lo duro y lo fluyente
que es difícil saber cuál de ellos fluye(...)

La fuente de los leones tiene diversas significaciones o simbologías, ninguna de ellas corroboradas. Por una parte los doce leones tienen una simbolización astrológica, cada león alude a un signo zodiacal. Por otra, tiene una significación política o mayestática que está relacionada con el templo del rey Salomón (puesto que hay una inscripción en la fuente referida a este) y el mar de bronce del mismo templo. Por última y la más importante, alude a un símbolo paradisíaco refiriéndose así a la fuente, originaria de la vida y los 4 ríos del Paraíso coránico. Pero lo que sí se puede decir, es que la fuente como tal es una alegoría del poder que reside en el sultán.

Sala de los Abencerrajes

Esta sala fue alcoba del sultán. Al ser cuarto privado no hay ventanas al exterior. Los muros están ricamente decorados. El estuco y los colores son originales. El zócalo de azulejos es del siglo XVI, de la fábrica de azulejos sevillana. La cúpula está decorada con mocárabes; en el suelo, en el centro, una fuentecilla servía para reflejar la cúpula de mocárabes, que al estar ricamente decorada, conseguía una luz encantadora y mágica, pues al entrar por la parte superior iba cambiando según las distintas horas del día.

Bóveda de mocábares en la Sala de los Reyes.
Sala de los Reyes

Ocupa todo el lado oriental del patio. Llamado así por la pintura que ocupa la bóveda del cuarto central. Es la sala más larga del Harén, dividida en tres cuartos iguales y dos pequeños que pudieran ser armarios, por su emplazamiento y falta de iluminación. Probablemente destinada a fiestas familiares. En la bóveda del centro, las pinturas representan a los diez primeros reyes de Granada desde la fundación del reino, uno de ellos con barba roja que puede ser Mohamed ben Nazar llamado Al-Hamar el Rojo, fundador de la dinastía Nazarí. En las bóvedas laterales hay pinturas que representan caballeros y damas, realizadas a fines del siglo XIV. Hubo un intercambio artístico en tiempos de Pedro I de Castilla quien solicitó ayuda al rey de Granada para restaurar los Reales Alcázares de Sevilla. Las pinturas llevan una técnica muy laboriosa:

  1. Planchas de madera de peralejo bien cepillada y formando una elipse.
  2. Sobre la superficie cóncava se extiende el cuero mojado, pegándolo con un baño de cola y claveteado con pequeños clavos de cabeza cuadrada cubiertos de estaño para evitar la oxidación.
  3. Sobre el cuero, una capa de yeso, caña y cola de 2 cm de espesor ya tostada y pintada en rojo. Sobre esta capa y con un punzón se dibujan los temas.

La división interna de la sala está realizada mediante arcos de atajo, cortando la estancia de forma perpendicular. Estos arcos muestran su intradós repletos de mocárabes y sus paramentos están cubiertos por yeserías, en los que aparecen símbolos nazaríes y también cristianos. La apariencia conjunta de la sala con sus arcos decorados puede recordar algún modelo de mezquita almohade.

Bóveda de mocárabes de la Sala de las dos Hermanas.
Sala de las Dos Hermanas

Se sale del Patio de los Leones por el lado opuesto a la Sala de los Abencerrajes. Se pasa una puerta original de taracea, una de las más bellas del palacio, actualmente conservadas en el Museo de la Alhambra. El nombre de Dos Hermanas procede de las dos losas de mármol blanco que hay en el suelo a ambos lados de la fuente central, exactamente iguales en tamaño, color y peso. Tiene un mirador sobre la ciudad y comunicación directa con los baños.

Esta sala, al igual que toda la Alhambra, tiene poemas escritos en las paredes. En esta sala se puede leer uno que dice:

Sin par,
radiante cúpula hay en ella
con encantos patentes y escondidos

(...) Nunca vimos jardín tan verdeante,
de más dulce cosecha y más aroma.

En cada cuarto del harén hay dos puertecillas: una da al harén alto, otra es una letrina. No hay cocinas. Empleaban el anafe o cocinaban fuera.

Sala de los ajimeces y mirador de Daraxa o Lindaraja
Mirador de Lin-dar-Aixa.

Al fondo de la sala anterior está el Balcón de Lin-dar-Aixa. Daba al valle del río Darro y se veía a lo lejos la ciudad. La construcción del Pabellón de Carlos V interrumpe ahora la vista, por eso se construyó el Jardín de Lindaraja, italiano, con fuente renacentista y taza de mármol árabe. En el mirador de Lindaraja, se puede leer el siguiente poema: "Yo soy de este jardín el ojo fresco" (...) "En mi, a Granada ve, desde su trono"

Habitaciones del Emperador

Con el nombre de habitaciones del Emperador, se conocen los seis aposentos, que fueron construidos durante el reinado de Carlos I, entre 1528 y 1537 y que configuran el patio de Lindaraja, hacia un lado y el Patio de la Reja, hacia el otro.[3]

Cuarto del emperador

Construido para que el rey Carlos habitase aquí mientras estaba en Granada, en su viaje de bodas. En el cuarto siguiente a éste hay una placa de mármol en memoria del escritor Washington Irving que residió en esta parte del recinto, mientras escribía sus Cuentos de la Alhambra, en 1829.

El peinador de la reina

Torre árabe llamada de Abul-Hachach, usada por el sultán para recreo y meditación. Tras la conquista cristiana fue reformado. La planta superior pudo servir como tocador real y podría haber sido utilizado por la reina Isabel de Farnesio. Su estructura tiene influencias romanas por la presencia del mirador con la galería porticada y su decoración pictórica.[3]

Patio de la reja o de los cipreses

Se accede a este patio desde la última de la habitaciones de Carlos V, su construcción data de tiempos de Carlos V, al construirse las habitaciones del emperador.

El partal

El Partal.
El Partal.

Debe su nombre a la voz árabe que significa pórtico, y se refiere a los restos de la residencia del Sultán Yusuf III, el más septentrional de los Palacios Nazaríes.

Corresponde a la zona de las viviendas de los criados de Palacio.

  • Pórtico del Palacio
  • Jardines y paseos
  • Rauda
  • Palacio de Yusuf III
  • Paseo de las Torres
    • de los Picos
    • de las Infantas: Construida en 1395. Es la mejor conservada. Buen ejemplo de lo que era una vivienda andalusí con todas sus comodidades. Es un palacete con bancos a la entrada para los eunucos, patio interior con alcobas, entrada en recodo, fuente en el centro, ventanas a los huertos de flor (en este caso, el Generalife), piso superior para las damas. Arriba, terraza. El techo era de mocárabes y desapareció en un terremoto. Curiosa bóveda de entrada. Residencia de las hermanas Zaida, Zoraida y Zorahaida, cuya historia narra Washington Irving en Cuentos de la Alhambra.
    • de la Cautiva: Suntuosa construcción de Yusuf I. Debe su nombre a Isabel de Solís, que como dice el nombre de dicha torre estaba allí cautiva. Entre sus poemas se puede leer:
En sus zócalos, de obra de azulejos,
y en su suelo, hay prodigios cual tejidos.

Baños

La joya de la casa árabe. El baño para el musulmán es una obligación religiosa. La construcción es copia de las termas romanas. Tienen tres salas:

  1. Cambio de ropa y descanso. Sala de las camas y reposo. Aquí se desnudaban, pasaban luego al baño y volvían a descansar. A veces les traían aquí la comida. En la galería alta había músicos y cantores.
  2. Masaje. Sala de refresco o masaje. Son dos galerías con arcos.
  3. Vapor. Sala de vapor. Más pequeña. Las bóvedas están abiertas con tragaluces en forma de estrella que en su día estaban cubiertos con cristales de colores, pero no herméticos, de manera que pudiese salir el vapor y entrar el aire fresco.

Palacio de Carlos V

Fachada sur del Palacio de Carlos V, diseñado por Pedro Machuca.

Llamado así por ser construido en su inicio como residencia del emperador Carlos, aunque no conste que llegase a habitar en él en momento alguno. Está situado junto al Palacio nazarí de Comares, lo que supone un gran contraste con la arquitectura islámica del entorno. Presenta planta cuadrada con patio interior circular y fue diseñado por Pedro Machuca. Sorprende por el año de construcción (1527), época muy temprana para sus características, que lo encuadran dentro del manierismo: columnas dóricas en el primer piso, jónicas en el segundo, y friso con cabezas de toro (bucráneos) de tradición grecorromana. En algunos aspectos, repite o anticipa ciertas soluciones arquitectónicas del manierismo en Italia, lo que se explica por la estancia de Machuca en dicho país y por su habilidad para desarrollar con inventiva propia ciertos rasgos del incipiente estilo manierista. La construcción se vio interrumpida en el siglo XVII, hasta su finalización en el siglo XX.

Su fachada es totalmente renacentista. El primer cuerpo es de estilo toscano con almohadillado. El segundo posee elementos decorativos propios del barroco. Sobre la puerta principal, se encuentran dos estatuas aladas de mujer reclinadas en el frontón. Arriba, 3 medallones enmarcados en mármol verde resaltan contra la piedra. En los laterales, se representan escenas de Hércules. Los anillos de hierro de la parte baja son puramente decorativos, siguiendo la moda vigente en Florencia y Siena en el momento de la construcción.

Vista panorámica del interior del Palacio de Carlos V.

Convento de San Francisco

Es el actual Parador de Turismo. Fue casa noble andalusí. Después de la conquista se donó a los franciscanos siendo así el primer convento de Granada. Patio andalusí bien conservado, con mocárabes, balcón cerrado con celosías y aljibe.

Secano o Alhambra alta

Se está estudiando actualmente con excavaciones. Barrio del pueblo andalusí y de nobles. Ruinas del Palacio de los Abencerrajes. Torre del Agua, por donde entra en el recinto la Acequia Real.

Torre de los Siete Suelos

Sólo se han encontrado cuatro, (bajo sus pies). Famosa por aparecer en algunas de las aventuras de los Cuentos de la Alhambra, de Washington Irving, ambientadas en ella. La leyenda dice que Boabdil abandonó el palacio desde este local.

Generalife

El Generalife, el Yannat al-arif en tiempos nazaríes, es la villa con jardines utilizada por los reyes musulmanes de Granada como lugar de retiro y descanso. La parte más importante está constituida por sus jardines, fue concebida como villa rural, donde jardines ornamentales, huertos y arquitectura se integraban, en las proximidades de la Alhambra. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Se inició su construcción durante los siglos XII y XIV y fue transformado por Abu I-Walid Isma'il. Es de estilo árabe nazarí y está situado en el lado septentrional de la Alhambra. Cerca del Generalife, y relacionados con él, se encuentran diversas construcciones de época nazarí, como Los Albercones, los restos del palacio de Dar al-Arusa, la Alberca Rota y la Silla del Moro.

Inscripciones

El árbol de la vida.

Existen unas 10 000 inscripciones en la Alhambra, la mayoría de ellas poemas, sentencias, textos del Corán y jaculatorias. Todas son en árabe clásico y muchas corresponden a los poetas de la Corte de Yusuf I en el siglo XIV. Los aposentos del rey nazarí en el palacio de Comares son los que poseen un número mayor de textos, 3116, el 35 % del total, recogido en el Corpus Epigráfico de la Alhambra, impreso por el CSIC; estos podían ser originalmente compuestos para la ocasión o escritos con anterioridad. Ibn al-Zayab, Ibn al-Jatib e Ibn Zamrak son los autores de la mayor parte de ellos. Los tres escritores formaban el grueso de los poetas de la corte de Yusuf I.

Alhambra, Adolf Seel, 1886.

Música

  • El primer movimiento de la obra impresionista Noches en los jardines de España (1909-1915) de Manuel de Falla está ambientada en el Generalife.[10]
  • Recuerdos de la Alhambra de Francisco Tárrega es una composición para guitarra también inspirada en esta fortaleza.[11]
  • Eduardo Paniagua y El Arabí Serghini grabaron el disco Poemas de la Alhambra (2001) con los poemas de Ibn Zamrak que decoran las paredes y las fuentes de la Alhambra[12]
  • En el año 2006 la cantante Loreena McKennitt dio un recital donde cantó canciones de todos sus discos. El recital fue recopilado en un DVD llamado Nights from the Alhambra. El concierto tuvo lugar en la sala de Carlos V.[13]
  • En 1974, el grupo español Los Puntos grabó una canción dedicada a La Alhambra y a su recinto llamada "Llorando por Granada", incluida en su disco "Los Puntos", en la que hace referencia a la "Leyenda del Suspiro del Moro".

Literatura

Estatua de Washington Irving en los jardines de la Alhambra.

Ha inspirado a autores como:

Otros personajes vinculados a la Alhambra

Vista panorámica de La Alhambra al atardecer, en la que se distingue de derecha a izquierda, la torre de la Vela, la torre de las Armas, la torre del Homenaje, la torre del Cubo, el palacio de Carlos V, la torre de Comares y el peinador de la Reina.

Véase también

Referencias

  1. Ministerio de Cultura, Patrimonio Histórico
  2. «La Alhambra bate el récord de visitas en 2011» El País, consultado el 14 de enero de 2012
  3. a b c d Díez Jorge, María Elena. La Alhambra y el Generalife, guía histórico-artística. Universidad de Granada y Consejería de Innovación, ciencia y empresa. ISBN 84-338-3951-9. 
  4. Junta de Andalucía. Averroes
  5. a b David Villegas Cerredo ANÁLISIS ESTRUCTURAL DEL PATRIMONIO HISTÓRICO. TORRE DEL HOMENAJE DE LA ALHAMBRA
  6. Mexuar: en alhambra-patronato
  7. Contreras, Rafael, La Alhambra, Granada, 1885, pág. 240.
  8. Manual del Artista, de José Jiménez Serrano, Granada, 1846, pág. 88.
  9. Mª. Mercedes Delgado Pérez: La representación figurativa en el Islam. Universidad de Sevilla [1]
  10. Alhambra, p. 215, en Google Libros
  11. Alhambra, p. 455, en Google Libros
  12. Alhambra, p. 345, en Google Libros
  13. Alhambra, p. 158, en Google Libros
  14. Alhambra, p. 15, en Google Libros

Bibliografía

Enlaces externos

  • La Alhambra. Página Oficial del Patronato de Turismo de Granada