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Monasterio de La Rábida

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Monasterio de La Rábida

El Monasterio de la Rábida es un monasterio franciscano en el término municipal de Palos de la Frontera, en la provincia de Huelva. Erigido en los siglos XIV-XV, sobresalen por su interés artístico la iglesia gótico-mudéjar, así como las estancias decoradas con frescos de Daniel Vázquez Díaz, el claustro y el museo, donde se conservan numerosos objetos commemorativos del Descubrimiento de América. Tiene de 2.000 m² de extensión y es de planta irregular. El monasterio a lo largo de los más de 500 años de su historia ha sufrido modificaciones, sobre todo a raíz del terremoto de Lisboa de 1755. En él se hospedó Cristóbal Colón años antes de partir hacia el Nuevo Mundo.

Declarado Monumento Nacional en 1856. Mereció la declaración de PRIMER MONUMENTO HISTÓRICO DE LOS PUEBLOS HISPÁNICOS.

Forma parte de la ruta denominada: Lugares Colombinos.

Monumento Nacional

Historia

Puerta del Monasterio de La Rabida

El monasterio se eleva sobre una alcor, que domina la confluencia de los ríos Tinto y Odiel, conocida desde antiguo como Peña de Saturno. Se sabe que hubo en tiempos de los fenicios un altar dedicado a su dios Baal (Hércules), y que más tarde los romanos eligieron este mismo lugar para venerar a su diosa Proserpina. Los árabes levantaron aquí un pequeño monasterio con monjes-caballeros como los de las órdenes cristianas. Este tipo de monasterio musulmán solía estar en la costa fronteriza y tomaba el nombre de rábida o rápita, de donde le viene la denominación. Los ascetas musulmanes se perfeccionaban espiritualmente al tiempo que defendían el lugar fronterizo. En el siglo XIII, pertenecía a los Caballeros Templarios, bajo la advocación de Nuestra Señora de los Milagros.

En el siglo XV fue convento franciscano. La tradición cuenta que el propio san Francisco de Asís llegó a este lugar en compañía de 12 discípulos para fundar un pequeño y humilde monasterio franciscano. Dado el enclave que ocupaba, el lugar fue desde el principio un refugio o fortaleza para defenderse de los ataques frecuentes de los piratas que merodeaban la costa. El papa Eugenio IV otorgó una bula de indulgencias para todo aquel que ayudara en este sitio a los viajeros necesitados. Gran parte de los edificios conventuales fueron construidos en aquellos años (primeros del siglo XV). Los nobles de la comarca y los vecinos del lugar ayudaron y colaboraron en gran medida. El monasterio cobró gran importancia en la historia a partir de la llegada de Cristóbal Colón que encontró refugio y atención entre los frailes de La Rábida.

Martín Alonso Pinzón, codescubridor de América, se encuentra enterrado en este monasterio. Martín Alonso llegó a su villa natal gravemente enfermo. Murió a los 15 o 20 días de su vuelta y fue enterrado en la iglesia del monasterio de La Rábida, a los pies de la Virgen de los Milagros y con hábito franciscano como sudario, según su voluntad.

Después de Guerra de la Independencia Española y de la Desamortización de Mendizábal el monasterio quedó casi en la ruina hasta que en 1855 se llevó a cabo una restauración por iniciativa de los condes de Motpensier y de la Diputación Provincial. En 1882 el rey Alfonso XII visitó el monasterio y apoyó una segunda iniciativa de rehabilitación y mejora con el fin de conmemorar años más tarde el IV Centenario del Descubrimiento de América. Dirigió las obras en esta ocasión el arquitecto Velázquez Bosco que supo respetar el ambiente y el espíritu del edificio original.

El edificio

Cristo de La Rábida

Iglesia

No se puede precisar con seguridad la fecha de su construcción. Uno de los elementos que se conservan con mayor antigüedad es un arco que da entrada a una pequeña capilla. Se pueden ver algunos frescos originales que son piezas de arte de gran valor. El techo está cubierto por un artesonado pintado con minuciosidad, de influencia mudéjar, bien conservado. Sobre las paredes hay cuadros del pintor Juan de Dios del siglo XVIII, con representaciones de la vida de san Francisco. Presidiendo el altar mayor está la escultura de un cristo que sustituyó a uno anterior antiguo destruido durante la Guerra Civil Española. En el muro sur hay una pequeña capilla dedicada a la patrona de La Rábida, la Virgen de los Milagros.

Claustro

De estilo mudéjar, data del siglo XV y se conserva en buen estado. En el siglo XVII fue ampliado con otro piso construido con almenas para la defensa de las invasiones piratas. Está decorado con pinturas de época reciente y con algunos fragmentos que se conservan de pinturas originales. En el segundo piso hay un exposición permanente de maquetas a escala de las tres carabelas: La Pinta, La Niña y la Santa María.

Sala capitular

Frescos de Vázquez Díaz

Es una sala rectangular, amplia y luminosa donde en tiempos de Colón, los frailes se reunían con él y escuchaban y debatían sus teorías y proyectos de navegación. Se le ha dado el nombre de “Sala de las conferencias de Colón”. Tiene un buen artesonado que data del siglo XVIII. En 1992 (celebración del V Centenario) fue utilizado como sede de un consejo de ministros presidido por el rey Juan Carlos I.

Otras dependencias

  • El refectorio es una sala rectangular con un púlpito encalado para la lectura.
  • La biblioteca guarda documentos y objetos de valor histórico, como un mapamundi de Juan de la Cosa en el que aparece por primera vez la costa americana.
  • Existe una sala donde se exhiben las banderas de cada uno de los países americanos y una arqueta que contiene tierra americana.
  • Alrededor de un pequeño patio adornado con numerosas plantas y flores, se encuentran unas salas decoradas con frescos en colores pastel, obra del pintor español Daniel Vázquez Díaz realizadas en 1930. Los temas de estas pinturas discurren en torno a Colón, su expedición, su partida y demás hechos históricos. El estilo de las pinturas es de un incipiente cubismo recién aprendido por el autor en París.

Entorno del monasterio

En una rotonda situada en los jardines se encuentra la Columna de los Descubridores, obra que se levantó para conmemorar el IV Centenario. Es de piedra muy blanca y está tallada con numerosas figuras y escenas sobre el tema de la colonización americana.

Frente a la puerta de entrada puede verse una cruz de hierro y los bustos de los franciscanos fray Juan Pérez y fray Antonio de Marchena. Junto a la entrada de la tienda de recuerdos puede verse una placa de azulejos con la siguiente inscripción:

La Rábida es la primera afirmación del movimiento hispanoamericano. El lugar donde se engendró el Nuevo Mundo es sagrado para la emoción racial. El español o americano que sienta hondo y eleve el pensamiento ¿no nos ayudará en nuestros propósitos de convertir en amor y paz la fuerza que irradia este humilde monasterio? El Cristo ante el cual oraron Colón, fray Juan Pérez, Marchena y los Pinzones abre sus brazos a los hombres de todas las creencias y buena voluntad.

Virgen de los Milagros

Virgen de los Milagros

La Virgen de los Milagros o Santa María de La Rábida, conocida por ambos nombres indistintamente, es la patrona del monasterio y de Palos de la Frontera. La imagen de la Virgen es una escultura de alabastro de pequeño tamaño (unos 54 cm) perteneciente a la escuela andaluza, fechada en el siglo XIV. Es una bella muestra de gótico manierista y elegante, que imprime en la figura una singular curvatura, de manera que cambia de aspecto según se varíe la perspectiva desde donde se contemple. Según una leyenda sin base histórica, esta imagen fue traída en uno de sus viajes por un marinero de Palos de la Frontera y después, a la llegada de los árabes, fue ocultada en el fondo de la Ría de Huelva. Más tarde la rescataron con sus redes unos pescadores y la devolvieron a la iglesia del monasterio. No obstante, para demostrar que detrás de cada leyenda hay un poco de verdad, hay que decir que, según documentos existentes a la parroquia de San Jorge de Palos, en una restauración que se le hizo en la imagen de la Virgen en el siglo XVIII, encontraron restos de sal y de limo marino, como si hubiera estado sumergida en el mar.

Sí corresponde a la historia el hecho de que Colón y parte de su tripulación oraron ante esta imagen, en la iglesia de San Jorge, horas antes de iniciar el viaje que los llevaría a las costas del Nuevo Continente.

Fue coronada por Juan Pablo II el 14 de junio de 1993. Es la única imagen de la Virgen coronada por el papa polaco en España.

Bibliografía consultada

Véase también

Enlaces externos

Este artículo incorpora material de la página web http://es.geocities.com/julioil/breve.htmde Julio Izquierdo Labrado, quien, mediante una autorización, permitió agregar contenido e imágenes y publicarlos bajo licencia GFDL.