Ir al contenido

Luisa de Hesse-Darmstadt (1757-1830)

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 20:29 9 mar 2017 por Joane (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
(difs.) ← Revisión anterior · Ver revisión actual (difs.) · Revisión siguiente → (difs.)
Luisa de Hesse-Darmstadt
Gran duquesa de Sajonia-Weimar-Eisenach

Luisa de Hessen-Darmstadt, en un cuadro de Georg Melchior Kraus.
Reinado
21 de abril de 1815 – 14 de junioo de 1828
Información personal
Nombre completo Luisa Augusta
Nacimiento 30 de enero de 1757
Berlín
Fallecimiento 14 de febrero de 1830
Religión luteranismo
Familia
Casa real Sajonia-Weimar-Eisenach
(por matrimonio)
Hesse-Darmstadt (por nacimiento)
Padre Luis IX de Hesse-Darmstadt
Madre Condesa palatina Carolina de Zweibrücken
Cónyuge Carlos Augusto, gran duque de Sajonia-Weimar-Eisenach
Hijos Carlos Federico
Princesa Carolina Luisa, gran duquesa hereditaria de Mecklemburgo-Schwerin
Príncipe Bernardo

La landgravina Luisa Augusta de Hesse-Darmstadt (30 de enero de 1757 – 14 de febrero de 1830) fue una princesa alemana, hija del landgrave Luis IX de Hesse-Darmstadt, se casó el 3 de octubre de 1775 con el duque (más tarde, gran duque) Carlos Augusto, gran duque de Sajonia-Weimar-Eisenach y como tal un miembro de la esfera cortesana del clasicismo de Weimar. Se la consideraba como una persona seria e introvertida, pero también compasiva y simpática, después de la batalla de Jena lo que le garantizó formar parte del posterior "mito de Weimar" (Weimarmythos).

Biografía

Primeros años

La princesa pertenecía a la Casa de Darmstadt, que era titular del landgraviato de Hesse. Nació el 30 de enero de 1757 en la capital prusiana de Federico II, Berlín, donde sus padres se encontraban debido a la guerra de los Siete Años. Su padre, Luis IX, ascendió al landgraviato en 1768 y en el momento en que ella nació, estaba combatiendo como general para las fuerzas prusianas. De esta forma, a menudo estaba alejado de sus hijos, asñi que la educación de la princesa le correspondió a su madre, la condesa palatina Carolina. Carolina educó a Luisa en la tradición protestante evangélica, y se interesó por la literatura y la música.

Como la hija menor, con ocho hermanos, la educación de Luisa era importante para mejorar sus perspectivas matrimoniales. Puesto que Luis IX mostraba poco interés en sus hijos, resultaba vital casar a Luisa y esto es algo que de nuevo recayó en las manos de su madre, la cual fue conocida como la "gran Landgräfin" y von Zweibrücken debido a su experta política dinástica internacional en la Europa del Antiguo régimen. En 1773 Luisa viajó con su madre y sus hermanas Amalia y Guillermina a Beschau y luego a la corte rusa en San Petersburgo. La zarina Catalina II decidió que Luisa no era adecuada como esposa para el gran príncipe y futuro zar Pablo, prefiriendo a su hermana Guillermina. Este rechazo, y su relación con su futuro cuñado Pablo formaron a Luisa, lo que la llevó a ser una influencia persistente en el estado ruso.

A pesar de todo, este viaje no careció de influencia sobre Luisa, puesto que de camino a Rusia, Carolina supo de otra regente femenina de un pequeño estado alemán, Ana Amalia.

Matrimonio

Como consecuencia de esta amistad, por influencia del gobernador de Erfurt para el arzobispado de Maguncia, Karl Theodor von Dalberg, una Luisa de dieciocho años fue comprometida con el joven caballero Carlos Augusto de Sajonia-Weimar. La boda tuvo lugar el 3 de octubre de 1775 en la corte de Karlsruhe, donde (como nueva princesa consorte) Luisa se implicó en la corte de Weimar ernestina.

El matrimonio tuvo un propósito totalmente dinástico (sus hermanas casaron con el heredero de Prusia y el zarévich, consolidando el lugar del ducado de Sajonia-Weimar en el corazón del Sacro Imperio Romano Germánico. Según fuentes primarias y secundarias, no fue un matrimonio feliz, pues Luisa (conocida por su delicadeza y timidez) tenía dificultades encajando en la corte y permaneció a la sombra de su suegra, la duquesa viuda Ana Amalia. Luisa especialmente acudía a los conventos de su nuevo país. Una romántica avant la lettre, no gustaba de la vida romántica. Goethe era ministro y poeta de la corte de su esposo (y su compañero en aventuras extramaritales), pero resultó conmovido por su encanto, nobleza de corazón y sus ojos, "del color del aciano". Tomándola bajo su protección, Goethe le dedicó las siguientes palabras:

Conozco a una, delgada como el lirio / Cuyo orgullo es solo la inocencia. / Nadia - ni siquiera Salomón - vio nunca a nadie como ella.
(J'en sais une, mince comme lys/ Dont la fierté n'est qu'innocence./ Nul - pas même Salomon -n'en vit de pareille.)

Tras cuatro años de matrimonio, en 1779 Luisa finalmente dio a luz a su primer hijo. Era una hija, y no el ansiado heredero varón. La llamaron como ella y sólo vivió cinco años. Su siguiente embarazo, en 1781, produjo una segunda hija que murió inmediatamente después del nacimiento. En aquella época, la corte ducal de Weimar pasó también por su fase sturm und drang, atrayendo no sólo a Goethe sino también a los ernestinos de Miseleien y Eseleien. La resultante frialdad emocional no ayudó a su matrimonio, con su esposo humillándola públicamente con una aventura de larga duración con la actriz Karoline Jagemann. Luisa dio a luz al heredero en 1783, cuando nació Carlos Federico; después de él, siguieron otros cuatro niños más, de los que dos sobrevivieron a la infancia: la princesa Carolina Luisa en 1786 y el príncipe Bernardo en 1792. Con el nacimiento de Bernardo el matrimonio había servido finalmente a su propósito de garantizar la sucesión al trono y la continuación de la dinastía. Carlos Federico más tarde se casó con la gran duquesa María (hermana de Alejandro I de Rusia), y su hija Augusta de Sajonia-Weimar-Eisenach se casó con el príncipe Guillermo de Prusia, convirtiéndose así en la primera emperatriz de Alemania.

Guerras napoleónicas

Luisa tuvo su gran momento en octubre de 1806. A pesar de su niñez y sus anteriores experiencias en Weimar, ejerció gran influencia en los círculos literarios. La batalla de Jena-Auerstedt (14 de octubre), llevó a la derrota de las fuerzas pruso-sajonas y el total sometimiento de todos los estados alemanes a Francia y precipitó la caída del Sacro Imperio Romano Germánico. Poco después de la batalla, las tropas francesas victoriosas avanzaron sobre Weimar. Los otros miembros de la familia o bien huyeron o estaban lejos, combatiendo en las fuerzas prusianas, de manera que Luisa quedó en Weimar como madre y protectora de la nación.

Dos días después de la batalla acabó oponiéndose al propio Napoleón. Él insistió en que su marido se retirase del servicio militar prusiano pero ella, de manera bastante poco diplomática, dejó claro a Napoleón que él no podía hacer eso. A pesar de todo, por petición de su esposo, e inspirada por el ejemplo de la reina patriota alemana la reina Luisa de Prusia, logró influir en el saqueo francés de la zona de manera que Weimar sufrió bastante menos que la ciudad universitaria de Jena. Si Napoleón se permitió reblandecerse ante Luisa, o si actuó de esta manera debido a sus propios cálculos en la política de poder es algo que queda abierto a la discusión. El ducado Sajonia-Weimar-Eisenach permaneció dentro de la alianza del Tratado de Poznań y sobrevivió a la época napoleónica gracias a ulteriores politiqueos. Para entonces, Luisa era considerada como la líder del país, y sus súbditos y contemporáneos mantuvieron esta imagen de ella, junto con su papel en el mito de Weimar.

Los niños de Carlos Augusto y Luisa: Carlos Federico, Carolina Luisa y Bernardo. Retrato realizado por Johann Friedrich August Tischbein, 1798.

En 1815 su politiqueo durante la guerra le aseguró que en el congreso de Viena, el pequeño ducado de su esposo no sólo conservara todo su territorio sino que pasó a convertirse en un gran ducado (sus primos turingios la casa de Sajonia, en cambio, sólo conservaron su título ducal). Se dedico después a sus labores como embajadora. La alianza de Rusia dio lugar a que su sucesora fuera María Pávlovna. El jubileo de su gobierno y sus bodas de oro, ambas en el año 1825, pasaron con escasas celebraciones, y, ya muy retirada, murió a los setenta y tres años de edad el 14 de febrero de 1830.

Descendencia

Con Carlos Augusto tuvo siete hijos, de los que sólo tres llegaron a la edad adulta:[1]

  • Luisa Augusta Amalia (Weimar, 3 de febrero de 1779 – Weimar, 24 de marzo de 1784).
  • Una hija (nacida y muerta en Weimar, 10 de septiembre de 1781).
  • Carlos Federico, gran duque de Sajonia-Weimar-Eisenach (Weimar, 2 de febrero de 1783 – Schloss Belvedere, Weimar, 8 de julio de 1853).
  • Un hijo (nacido y muerto en Weimar, 26 de febrero de 1785).
  • Carolina Luisa (Weimar, 18 de julio de 1786 – Ludwigslust, 20 de enero de 1816), se casó con el príncipe heredero Federico Luis de Mecklemburgo-Schwerin.
  • Un hijo (nacido y muerto en Weimar, el 13 de abril de 1789).
  • Carlos Bernardo (Weimar, 30 de mayo de 1792 – Liebenstein, 31 de julio de 1862).

Genealogía

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
16. Luis VI, landgrave de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
8. Ernesto Luis, landgrave de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
17. Isabel Dorotea de Sajonia-Gotha-Altenburgo
 
 
 
 
 
 
 
4. Luis VIII, landgrave de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
18. Alberto II, margrave de Brandeburgo-Ansbach
 
 
 
 
 
 
 
9. Dorotea Carlota de Brandeburgo-Ansbach
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
19. Sofía Margarita de Oettingen-Oettingen
 
 
 
 
 
 
 
2. Luis IX, landgrave de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
20. Juan Reinhard II de Hanau-Lichtenberg
 
 
 
 
 
 
 
10. Juan Reinhard III de Hanau-Lichtenberg
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
21. Condesa palatina Ana Magdalena de Birkenfeld-Bischweiler
 
 
 
 
 
 
 
5. Condesa Carlota de Hanau-Lichtenberg
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
22. Juan Federico, margrave de Brandeburgo-Ansbach
 
 
 
 
 
 
 
11. Dorotea Federica de Brandeburgo-Ansbach
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
23. Juana Isabel de Baden-Durlach
 
 
 
 
 
 
 
1. Princesa Luisa Augusta de Hesse-Darmstadt
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
24. Cristián I, conde palatino de Birkenfeld
 
 
 
 
 
 
 
12. Cristián II de Zweibrücken-Birkenfeld
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
25. Condesa palatina Magdalena Catalina de Zweibrücken
 
 
 
 
 
 
 
6. Cristián III, conde palatino de Zweibrücken
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
26. Juan Jacob, conde de Rappoltstein
 
 
 
 
 
 
 
13. Catalina ñAgata de Rappoltstein
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
27. Ana Claudia de Salm
 
 
 
 
 
 
 
3. Condesa palatina Carolina de Zweibrücken
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
28. Gustav Adolph, Count of Nassau-Saarbrücken
 
 
 
 
 
 
 
14. Luis Crato, conde de Nassau-Saarbrücken
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
29. Leonor Clara de Hohenlohe
 
 
 
 
 
 
 
7. Carolina de Nassau-Saarbrücken
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
30. Enrique Federico, donde de Hohenlohe-Langenburg
 
 
 
 
 
 
 
15. Filipina Enriqueta de Hohenlohe-Langenburgo
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
31. Juliana Dorotea de Castell-Remlingen
 
 
 
 
 
 

Notas

Bibliografía

  • Bornhak, Friederike (1908). Aus Alt-Weimar. Die Großherzoginnen Luise und Maria Paulowna (en alemán). Breslau. 
  • Hammerich, Louis Leonor (1962). Zwei kleine Goethestudien. II. Grossherzogin Louise von Sachsen-Weimar – eine politische, keine schöne Seele (en alemán). Copenhague. 
  • Taxis-Bordogna, Olga (1950). Frauen von Weimar (en alemán). Múnich. 

Enlaces externos


Predecesor:
Ana Amalia de Brunswick-Wolfenbüttel
Duquesa consorte de Sajonia-Weimar
3 de octubre de 1775 - 1809
Sucesor:
Unido a Sajonia-Eisenach
Predecesor:
Ana Amalia de Brunswick-Wolfenbüttel
Duquesa consorte de Sajonia-Eisenach
3 de octubre de 1775 - 1809
Sucesor:
Unido a Sajonia-Weimar
Predecesor:
Nuevo título
Duquesa consorte de Sajonia-Weimar-Eisenach
1809 - 21 de abril de 1815
Sucesor:
Elevado a Gran Duquesa
Predecesor:
Nuevo título
Gran Duquesa consorte de Sajonia-Weimar-Eisenach
21 de abril de 1815 - 14 de junio de 1828
Sucesor:
María Pávlovna de Rusia