Usuario:Canizipi/Taller

Escudo bomberos del Ayuntamiento de Madrid usado entre 1967 y 1982

El Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid tiene su origen en 1577, y quinientos años más tarde se ha convertido en un Cuerpo de bomberos referencia en España, cuyo ámbito de actuación es únicamente el municipio de Madrid. Actualmente cuenta con 12 parques de bomberos repartidos por sus 21 distritos y cuenta con más de 1500 efectivos.

Historia

Siglo XVI, XVII y XVIII

El inicio del Servicio Contra Incendios podría decirse que comenzó el 9 de Julio de 1.577 cuando se adopta por el Consejo de la Villa un acuerdo sobre fuegos, haciéndose imprescindible reunir a un grupo de  hombres, dotados del material necesario para socorrer a la capital en los casos de incendios​. Entre otros materiales se compraron aguatochos o jeringas grandes, 24 cubetas de cuero, 6 garfios con picas largas, 12 palanquillas de hierro, 12 azadones de monte, 12 piquetas, 6 maromas delgadas, 2 escaleras largas y 6 carros cubas de agua para que los carpinteros, oficiales de obras y alarifes acudieran a los fuegos cuando se les diera la orden por medio de las campanadas de las iglesias​.

Así el 17 de Julio de 1.613, tras un incendio en la calle Imperial, se firma un segundo acuerdo, más amplio que el anterior, especificando una serie de obligaciones y sanciones para los oficios implicados, así como la decisión de comprar ciertos materiales y unas primeras intenciones de prevención, dándole una mayor importancia al abastecimiento de agua. El 3 de noviembre de 1618, D. Francisco de Villasis, corregidor de Madrid, elaboró un dictamen en el que por primera vez un grupo de 24 carpinteros se dedicaría a matar los fuegos de la capital, percibiendo un salario por sus servicios (unos 40 mil maravedíes) y nombrándoles matafuegos de la villa, al igual que había en ciudades como Toledo (oficiales del fuego) o Valladolid (matafuegos), que acudirían al sonar las campanas de cualquier iglesia.

El 7 de julio de 1631, se produjo un incendio en la Plaza Mayor, centro social y comercial de la época, que iniciándose en los sótanos cercanos a la Casa de la Carnicería, destruyó 60 de sus 68 casas y dejó 13 muertos en un incendio que se dilató tres días. Diez años mas tarde desde esta tragedia, el 16 de agosto de 1641, se aprueba una ordenanza para matafuegos que incluía más personal y colocaba en las cuatro esquinas de la plaza, estanquillos. Pese a estos esfuerzos, el 20 de agosto de 1672, se produce un segundo incendio en la plaza, esta vez en la Real Casa de la Panadería tras una corrida de toros que dejó 24 víctimas​. Así, de nuevo se redacta un nuevo acuerdo por el Consejo de S.M. Carlos II con las nuevas obligaciones contraincendios de los diferentes oficios ( carpinteros, fontaneros, aguadores, taberneros, cereros...).

En 1683, arde la la iglesia de Santa Cruz por segunda vez (el primero en 1620), desplomándose su cúpula y sepultando a unas 50 personas​.

En la nochebuena de 1734, se produce un incendio en la Torre Dorada del Alcázar Real que almacenaba los Derechos Reales de las Indias y documentos de mucho valor. El fuego continuó hasta el día 4 de enero destruyendo por completo el edificio (en 1738 se construiría ahí mismo el actual Palacio Real)​​.

En 1721, por orden de S.M. Felipe V, se compra una máquina de bronce a Inglaterra por un valor de 68 libras esterlinas capaz de impulsar el agua a mayor altura. A partir de la segunda mitad del siglo  XVIII Madrid contaba con 7 bombas a mano. Los matafuegos y mozos mangueros que se dedicaban a extinguir los incendios, tenían que saber usarlas y conocerlas con exactitud para que desarrollaran el trabajo al máximo rendimiento​. Estas máquinas se estropeaban con mucha facilidad por su frágil composición y continuado uso, haciéndose necesario que el servicio de incendios demandara de los conocimientos de un profesional que entendiera sobre esta materia. Fue contratado en 1767, un maquinista hidráulico y constructor de bombas, Juan Jorge Graupner, de 31 años y de origen alemán, concediéndose por primera vez en Madrid el cargo de “Maestro Bombero”(desempeñaron este oficio diez hombres, siendo el último Tomás Guisasola en 1889). Durante los primeros años realizó importantes reparaciones en las bombas; modificó los depósitos de madera a latón para que fueran de mayor duración y evitar principalmente las fugas de agua por estar la madera podrida. Se pintaron en color encarnado y la mayor parte de sus piezas se cambiaron y repararon, como ruedas y el cañón por donde salía el agua​.

El 20 de Noviembre de 1.789 se promulga una "Instrucción sobre Incendios", aprobada por Pedro Escolano de Arieta del Consejo del rey Carlos IV y el corregidor de la villa José Antonio de Armona y Murga, que es una recopilación de órdenes anteriores con 35 capítulos que tuvo gran importancia y multiplicó de cuatro a ocho las casas cuartel.

El 16 de agosto de 1790, a las once de la noche, se originó un incendio en el Portal de Paños, entre el arco de Cuchilleros y el arco de Toledo en la famosa Plaza Mayor. El fuego permaneció vivo durante nueve días y aunque asistieron más de mil hombres, las bombas, aguatochos y más de 750 cubos y espuertas, resultó imposible evitar que desapareciera un tercio del perímetro de la plaza. La dirección de la extinción le correspondió a Samuel Amadeo Crompag y los arquitectos y oficiales de gremios bajo las órdenes del arquitecto maestro mayor Juan de Villanueva. Durante esos días se gastó en extinguir el incendio más de medio millón de reales y se repartieron más de 46.000 raciones de pan y queso para los que trabajaron sin descanso en uno de los mayores incendios que ha sufrido nuestra ciudad. SM. Carlos IV puso a disposición de los 1302 madrileños afectados un millón de reales de su real erario​.

Siglo XIX

En 1805, se proyecta la creación de una compañía de Bomberos Voluntarios como ayuda al servicio existente, que sin embargo no se hizo realidad hasta veinte años más tarde (1827 - Compañía de Bomberos dependientes de los Batallones de Voluntarios Realistas).

Tras la Guerra de la Independencia (1808-1814), el servicio de extinción quedó en penosas condiciones, y se demostró en el incendio de la Puerta del Sol el 17 de abril de 1815 al anochecer. El 25 de septiembre de 1817 se publica en el Diario de Madrid, la primera oposición a "maestro bombero" tras la muerte de Felipe Troconiz, consiguiendo el trabajo Diego Palacios, maquinista y broncista. En 1822, Manuel Mº Goyri, crea la Sociedad de Seguros Mutuos de Incendios de Casas de Madrid situadas dentro de las murallas, que ofrece sus servicios y autorización para intervenir en los siniestros. En su fachada, en un paraje visible, ponía en un azulejo azul , asegurada de incendios.

Incendio de la Real Armería en Madrid (1884)

En 1824, Diego Palacios, ya que aún no había uniformes, diseña el primer emblema para el servicio de incendios (en hoja de latón dorado con forma ovalada que mostraba el escudo de armas de la villa con corona real) para identificarles.

El incesante empeño de algunos inventores para mejorar el servicio de incendios dio lugar en el año 1839 a presentar, por Félix Pérez Pedrero, un invento llamado manga de salvación, cuyo inventor realizó en la Plaza Mayor una demostración el 10 de marzo de 1840​. Esta servía para evacuar a las personas por los balcones en los casos de incendios. Iba instalada en un carro tirado por mulas y diez mangueros para su transporte en el lugar del siniestro​.

En 1.841, se crea el Cuerpo de Zapadores Bomberos de la Milicia Nacional (suprimido en 1856) y se aprueba un Reglamento de Policía Urbana que recoge entre los artículos 50 a 98 normas para la prevención y actuación de incendios ​. En 1850,la población de Madrid sobrepasaba los 220.000 habitantes. El 8 de julio de 1851, se produce un pavoroso incendio en la calle Limón 20, con una nube densa de humo que se extendía hasta la calle Pez y Amaniel. Ardieron 17 casas y el fuego afectó al Hospital de las Incurables y a la Parroquia de San Lorenzo​. A partir de 1.855 se sientan las bases del actual servicio, mediante sucesivas reglamentaciones que fueron remodelando las características y condiciones de presentación del servicio.

Incendio del Cuartel de Guardias de Corps (1869)

Pasado la mitad del siglo, se ejecutan una serie de mejoras en la infraestructura urbana de Madrid como la canalización del río Lozoya a Madrid inaugurado en 1858 ( por la recién creada Canal de Isabel II) que instalaría bocas de riego e incendio, canalizaciones de gas instaladas entre 1846 y 1848, mejora de la red de carreteras y en 1851 se instala la primera línea férrea (Madrid-Aranjuez).

El 5 de diciembre de 1864 se produce un incendio en la Fábrica de Tabacos de la calle Embajadores, símbolo de la incorporación de la mujer al trabajo con 3.000 operarias. En 1865 se establece un sistema de diferentes sonidos de campanas que ubicaban la calle del incendio, ya que antes sólo se localizaba la iglesia que daba los toques de campana, pero no la calle. El 20 de abril de 1867, las campanas de las parroquias anuncian un incendio en el Real Conservatorio de Música y Declamación, en el salón de baile del Teatro Real​ y apenas dos años más tarde, se produce un grave incendio en el Cuartel de los Guardias de Corps (actual Cuartel Conde Duque) que comenzó en las cocinas del edificio, destruye los pisos superiores, casi hace desaparecer la torre situada en la fachada oeste​, y amenazó con hacer explotar un almacén de pólvora del Batallón de Cazadores de Alcántaras​.

Incendio del Real Monasterio del Escorial (1872)

Incendio de la Real Armería en Madrid (1884)

Tres grandes incendios se declararon al inicio de la década de los 70: El incendio de la Iglesia de Santo Tomás (13 de abril de 1872), iniciado en su altar mayor; el incendio de el Monasterio de El Escorial (30 de septiembre de 1872) debido a la caída de un rayo en la biblioteca del colegio, que movilizó a unos 500 hombres en tren; y el incendio en la calle Jesús del Valle (20 de agosto de 1875), iniciado en un taller de madera y terminó afectando a doce edificios.

Ruinas del Teatro Variedades (1888)

El 19 de julio de 1876 se aprobaba por el ayuntamiento un reglamento para el Cuerpo de Mangueros​ (formado por 5 capataces y 71 mangueros). A las tres de la madrugada del día 12 de diciembre de 1882, se inicia un fuego en el Palacio de Buenavista (Ministerio de la Guerra) causando daños al edificio, pero fue de mayor importancia la pérdida de documentación de las dependencias. Así, el 12 de julio de 1883, se produjo otro gran incendio, éste a primera hora de la mañana en los almacenes de madera La Aurora. Creada la Delegación Especial de Incendios en febrero de 1884 era separado el servicio contraincendios, de la Policía Urbana. Esta delegación quedaría establecida en la tercera casa consistorial (Plaza Mayor), accediendo a ésta por la calle Imperial, el antiguo parque de bomberos número 6​. A las once y cuarto de la noche del 9 de julio de 1884, se inicia un incendio tras una pequeña explosión en las lámparas de gas en la Real Armería​, que avivado por el viento reinante, propagó el incendio por la cubierta, e hizo desaparecer una cuarta parte de los objetos que albergaba este museo entre ellos, tapices, banderas ( incluida la de Lepanto), documentos,...​ Tras este incendio se iniciaría la distribución telefónica en todos los puestos de incendios​.

En 1886 los mangueros de la Villa pasarán a denominarse bomberos de incendios y pasan a ser empleados municipales a efectos de jubilación. Durante este mismo año se produjeron dos siniestros relevantes, un incendio en un almacén de sustancias inflamables en la Estación Norte (petróleo, pólvora, cerillas, aguardiente...) y el 12 de mayo, un huracán que provocó 23 muertos y 74 heridos, e hizo estragos en el Jardín Botánico y Parque del Retiro. Entre el 87 y el 89, se tramita la compra de dos escalas telescópicas inglesas que alcanzaban los 18 metros, dejando en un segundo plano las mangas de salvación. El destino quiso, que de madrugada y sin espectadores se incendiase el Teatro de Variedades (calle dela Magdalena, 40) el 28 de enero de 1888.

En Madrid, el incendio de la calle Ribera de Curtidores 20 ocurrido en la noche del 30 de junio al 1 de julio de 1891, que produjo la destrucción de 12 edificios, dio lugar a que el entonces alcalde de Madrid, el Conde de Romanones, presentara el 26 de septiembre de 1894 un proyecto de reorganización del servicio contra incendios​.Así, en sesión de 5 de octubre se aprobó el primer reglamento del Cuerpo de Bomberos de la Villa de Madrid, quedando sostenido por las arcas municipales. El 12 de enero de 1895, es nombrado el primer director del Cuerpo de Bomberos, el arquitecto Isidoro Delgado y Vargas a sus 47 años​.

En sesión de 15 de diciembre 1897 se aprobó la compra de la primera bomba de vapor, de la casa Shand Mason & Co. de Londres​, podía lanzar hasta 1.000 litros por minuto a 12 kg de presión con dos salidas de 70 mm, llegando a Madrid en 1898. Tras esto se decide, que es hora de cambiar el ganado mular por el caballar para arrastrar con mayor celeridad los carruajes (contrato de 19 caballos).

Siglo XX

El inicio de siglo comienza organizándose una brigada de obreros-bomberos encargados de derribos de casa, tarea que solían hacer los bomberos, y dejándolos a éstos exclusivamente las tareas de extinción. De madrugada, el 19 de julio de 1903, se inicia un fuego en el Teatro Eldorado. De nuevo, la fortuna quiere que no hubiera público y no se lamenten pérdidas de vidas humanas como en otras ciudades. En un nuevo reglamento de 1905, se mencionaba por primera vez dar prioridad de paso a los carruajes de bomberos y que éstos avisaría a los demás usuarios con toques de campana.

Incendio del Teatro de la Zarzuela (1909)

El 10 de julio de 1908 fue aprobado por el ayuntamiento un presupuesto de 12.500 pesetas para la adquisición del primer coche automóvil, de la casa Bayard Clement​, de Francia, con destino a la dirección y servicio sanitario del cuerpo, con cabina para cinco plazas y botiquín. Llevaría una chapa de metal con la inscripción bomberos y dos escudos de bronce el ayuntamiento. En 1908,se adquieren las características hombreras (dan protección y elegancia al uniforme) además unos teléfonos tipo mochila para comunicar los que trabajan en la parte alta y los que manejan el mangaje en la parte baja​. El 1909 destacó por el imponente incendio del Teatro de la Zarzuela en la calle Jovellanos, el humo se veía desde cualquier punto de la capital. Se movilizaron tres parques de bomberos, pero aquel incendio dejó muchos bomberos heridos. Aquel gran incendio del 8 de noviembre, sólo dejó en pie la fachada del edificio, reduciendo el resto a cenizas y un año más tarde tuvo que ser reconstruido por Cesáreo Iradier​​. En sesión de 26 de agosto de 1910 se aprobó la compra de un coche de primera salida, adjudicándose a la casa Lorraine Dietrich​, de Francia, de cuatro velocidades que alcanzaba los 40 km/h en llano. En 1913, el ayuntamiento contaba con cuatro coches de primera salida del mismo modelo. Se adquiere la primera auto escalera, de la marca Magirus, de 12 m, aprobado el 21 de junio de 1914. Dando continuidad a la modernización del servicio, el ayuntamiento aprobó en sesión de 23 de marzo de 1916, bajo un presupuesto de 40.000 pesetas, la adquisición por concurso público de la primera auto bomba, siendo seleccionada la de la casa Saurer de Suiza​​, con bomba centrífuga de alta presión con tres turbinas en serie. El Cuerpo se enfrentaría a un nuevo tipo de siniestro el 11 de junio de 1921, un accidente ferroviario con 13 muertos cerca de la estación de Villaverde entre el expreso 92 de Andalucía ( salió de Madrid) y el tren correo de Toledo (causante del accidente)​​​. En sesión de 27 de abril de 1923 se aprobaría un presupuesto excepcional de 617.500 pesetas para la compra, a la casa Benz de Alemania​, de cuatro bombas, dos chasis para montar material de salvamento, tres auto tanques y cuatro escalas giratorias de un alcance de 28 metros. La dotación de la auto bomba estaría compuesta por seis bomberos y conductor, el auto tanque para dos bomberos y conductor y de la auto escala cinco bomberos y conductor. En septiembre de 1924 se cambiaría toda la tracción animal (usada desde 1857) por la mecánica siendo alcalde de Madrid, D. Alberto Alcocer​. Este año se incorporaron las mangueras de lino y los racores tipo Barcelona ( que se mantiene hasta nuestros días).

El 23 de septiembre de 1928 se desata un incendio en el Teatro Novedades durante una representación teatral, en la calle Toledo frente al mercado de La Cebada, dejando cerca de 80 muertos​​. En 1930 llegaron nuevos materiales al cuerpo como reflectores para trabajos nocturnos, lonas de salvamento Magirus o equipos de respiración Dräger. En 1930 destacan dos intervenciones, el incendio en la fábrica de hules de la calle Alcalá, y el hundimiento de un edificio de nueva construcción de 7 plantas en la calle Alonso Cano. 1931 destaca por la "quema de conventos", se inició en el de los Jesuitas (Calle Flor) y continuó en los Salesianos, Maravillas, Carmelitas, Instituto Católico y otro en la calle Martín de los Heros. Otros 9 se intentaron incendiar sin éxito. A partir de 1934 los bomberos serían instruidos en rescate en ascensores ya que en esta época empezaron a usarse en los edificios más modernos. En marzo de 1936 (tras una nueva quema de conventos como la de 1931), dos bomberos sufren graves heridas en el incendio de la Iglesia de San Luis y días mas tarde morirían.

Parque de bomberos 1, Santa Engracia (1920 aproximadamente)

El 18 de julio de 1936 estalla la Guerra Civil Española. Desde principios de noviembre de 1936 en que las tropas sublevadas llegaron a las riberas del Manzanares y Casa de Campo, Madrid sufrió un constante bombardeo hasta la primavera de 1937 (Batalla de Madrid). Este mes sería sin duda terrible para el Cuerpo de Bomberos, ya que en tan sólo 12 días fallecieron cinco bomberos. En septiembre de 1937 el general Miaja, jefe del Ejército del Centro, decidió que los bomberos serían movilizados pero no destinados fuera de la capital, ni dejarían de prestar su servicio como empleados municipales haciendo su cometido igual que anterior a su movilización. Es decir, se les destinaría a los Batallones de Zapadores del Ejército del Centro, cumpliendo su misión dentro del Cuerpo hasta el final de la guerra. El 1 de abril de 1939 se dio por terminada la guerra pero desde 1935 a 1939 fallecerían 10 bomberos en acto de servicio. Tras la posguerra la plantilla del Cuerpo se vio gravemente afectada, quedando un total de 160 bomberos y 13 conductores.

Durante las décadas 40, 50 y 60, otros 10 bomberos murieron. El 15 de febrero de 1941, se declara un gran incendio que arrasó la ciudad de Santander (32 calles y unos 200 edificios). El Cuerpo de bomberos madrileño mandó personal para ayudar, pero desgraciadamente un derrumbamiento de una pared atrapó al bombero Julián Sánchez, que falleció poco después. En 1942, otro bombero falleció al salir despedido del vehículo Benz en la curva de la calle Álvarez de Castro y otro más en 1952 mientras realizaban maniobras en el parque tercero. Pero llegados al 1 de julio de 1956, un derrumbe mientras refrescaban el incendio en un taller de carpintería de la calle del Crucero 25, dejaría un balance de 14 muertos (5 bomberos) y otros 6 bomberos con contusiones diversas. Posteriormente, en 1961 en el incendio en la Colonia Girón (Paseo de Extremadura 141) y en 1966 mientras realizaban maniobras en la torre del parque quinto, nos dejaron de nuevo dos compañeros más.

El 13 de julio de 1949, un gran incendio iniciado supuestamente por una colilla en la sala de proyección de los Estudios Ballesteros (calle García Paredes) deja cinco bomberos heridos (uno gravísimo). El aislamiento acústico, a base de paja, y los panós de los decorados ardieron rápidamente y el calor afectó a la estructura metálica y a la cubierta, que se desplomó​. Este año se adquirieron dos nuevos vehículos de primera salida Dennis, un tanque de 2.500 litros Crossley. Cerca de las ocho de la tarde, del 1 de julio de 1956, se declaró un incendio en el taller de carpintería y fábrica de muebles de la calle Crucero Baleares 25 en Vallecas. Minutos antes de las once de la noche, sofocado el siniestro, y cuando se dedicaban a refrescar y vigilar el lugar, se desplomó el edificio en su totalidad. El balance total de la catástrofe fue de nueve civiles y cinco bomberos muertos (se instaló la capilla ardiente en el parque 1º). A las diez y cuarto de la mañana del 24 de septiembre de 1960 se declara un incendio provocado por el cortocircuito de un enchufe que prendió una disolución de cera y aguarrás, en un almacén y taller de tejidos en las plantas 3ª y 4ª de la calle de Carretas 12, en las que 6 personas se arrojaron desde las ventanas a mantas que sujetaron en la calle los vecinos, pero dos de ellas murieron por las quemaduras. El fuego de los almacenes llamados Chaguaceda se propagó con increíble rapidez a la vez que ardía la escalera que impedía la evacuación .Fue muy polémico por la tardanza de los bomberos, pero lo cierto es que los vecinos observaban el incendio como un espectáculo y nadie les había llamó, y cuando llegaron no tenían lonas de salvamento, y los demás vehículos que venían en apoyo quedaron bloqueados en la Puerta del Sol unos doce minutos debido a la aglomeración de espectadores​. <Redondo Toral, Juan M. (2002). Memorias de un bombero. la esfera de los libros. ISBN 84-9734-056-6.  >< «!FUEGO!». Revista Blanco y Negro. 1 de octubre de 1960. ><«Pánico en un edificio incendiado». Periódico La Vanguardia. 25 de septiembre de 1960. >

Autoescala Magirus

El 21 de enero de 1964, se declara un incendio en los Almacenes Arias dela calle Montera tras una explosión en la segunda planta, que pese a destruir todo el edificio no hubo que lamentar daños personales entre sus 275 empleados. Se movilizaron 10 vehículos y 70 hombres. El edificio acabó tan dañado que hubo que demolerlo​. Entre las dotaciones había numerosos tanques-bomba ya que las bocas de riego a las que en un principio se recurrió no tenían la presión suficiente para alcanzar todas las plantas del edificio, lo que dificultó las labores de extinción. Las tareas de extinción se prolongaron hasta las 8 de la tarde​.

A partir de noviembre de 1965 es cuando el Cuerpo de Bomberos experimentará una transformación radical, denominada por algún periodista "La Gran Reforma" y para cuya realización se asignaron 230 millones de pesetas. Entre los años 1965 a 1970 se adquirieron 72 vehículos; tanques, bombas, escalas, vehículos de hidrocarburos, grúas de distinto tonelaje, coches de apeos, un coche especial extintor de anhídrido carbónico​, furgonetas auxiliares, vehículos de protección respiratoria y un coche de salvamento acuático, entre otros​. Más tarde, en 1976, se creaba la Unidad de Buceo que alcanzó tal prestigio en España que sería solicitada por los gobiernos civiles correspondientes en numerosas catástrofes​.

El 20 de diciembre de 1973, los bomberos acudieron a una explosión en la calle Claudio Coello. Encontraron un enorme cráter (8,5 m de diámetro y 3 m de profundidad), formado por la explosión de un coche bomba ocupado por Luis Carrero Blanco y otros dos cadáveres más. El coche voló literalmente más de 20 metros, saltó por encima de un edificio, y llegó hasta una terraza. ETA había asesinado al mismísimo presidente del Gobierno​​. En 1976, se aprobó por Acuerdo Municipal la Ordenanza Primera de Prevención de Incendios. El 16 de febrero de 1979 en la calle Bola, se desata un incendio en la discoteca Charada, que el denso humo provocado por la moqueta del suelo, se saldó con cuatro muertos y 11 heridos​, preludio de lo que ocurriría en Alcalá 20.

En la madrugada del 27 de noviembre 1983 se produce un accidente aéreo de la compañía Avianca que se estrelló en Mejorada del Campo. Tan sólo 10 días después, 91 personas perdían la vida en otro accidente aéreo en el Aeropuerto de Barajas debido al choque entre dos aviones en la pista de despegue. De nuevo, otros diez días más tarde, el 17 de diciembre, se produce un incendio en la Discoteca Alcalá 20, ubicada en los bajos del Teatro Alcázar, que dejó un balance de 81 personas muertas de las 300 que estaban en ese momento, cerrando con éste, un año trágico para Madrid.

En enero de 1984 se firma un nuevo Reglamento y en 1986 fue inaugurada la Escuela de Protección Civil y Bomberos en el parque de Vallecas. Este mismo año, el Cuerpo perdería a otro compañero en acto de servicio, mientras luchaba contra el incendio del Ministerio de Economía al caer por un hueco de 10 metros de altura. El 4 de septiembre de 1987 por la tarde se declara un segundo incendio (el primero en 1964) en la tercera planta en los Almacenes Arias de la calle de la Montera, que tendría un trágico final, ya que el día 5, en las tareas de enfriamiento, el edificio se vino abajo sepultando a 10 bomberos de la capital​​.

Siglo XXI

Un derrumbamiento de un edificio de cuatro plantas en la calle Gaztambide sorprende en marzo de 2001 con un muerto (mendigo de la zona) y once heridos. El 28 de junio de 2001, se produce un incendio y el colapso de la cubierta de el Palacio de los Deportes, ubicado en la calle Goya 143. El pabellón de 2.500 metros cuadrados, quedó totalmente destruido.

El 11 de marzo de 2004 se producen en Madrid (11M), el mayor atentado terrorista en territorio español. Varias explosiones en diferentes trenes de cercanías en las estaciones de Atocha, Santa Eugenia, El Pozo y en la cale Téllez, dejaron el aterrador balance de 192 fallecidos. ​. Los bomberos intervinieron desde los primeros momentos en el rescate de las personas atrapadas movilizando unos 250 bomberos y 28 vehículos pesados y 10 ligeros.<«Periódico ABC (página 39)». 12 de marzo. 2004. >

El 15 de julio de 2004, un incendio en una subestación eléctrica de Unión Fenosa de la calle Alameda, provocado por la explosión de un transformador, ocasionó de 40.000 hogares se quedasen sin suministro eléctrico. Apenas mes y medio más tarde, en Méndez Álvaro, otro transformador de la misma compañía también dejaría sin suministro cerca de un millón de personas sin electricidad.

El 12 de febrero de 2005 en uno de los rascacielos más emblemáticos de la capital, el edificio Windsor (Calle Raimundo Fdez. Villaverde 65), se produjo un gigantesco incendio que se inició en la planta 21. ETA rompía su alto al fuego el 30 de diciembre de 2006 con una gran explosión con furgoneta bomba en módulo D de la Terminal 4 del Aeropuerto de Barajas. Los trabajos se dedicaron principalmente apagar incendios y a la búsqueda de dos personas ecuatorianas que en ese momento dormían en su coche​​. Se desplazaron hasta aquí 278 efectivos municipales, 6 dotaciones de los bomberos de la Comunidad y los bomberos de AENA.

El vuelo JK5022, de la compañía Spanair, el 20 de agosto de 2008 se estrella en Barajas tras el despegue dejando un balance de 18 supervivientes y 154 muertos. El día 20 de noviembre de 2017 se puso fin a 134 años de historia del antiguo Parque 6º, inaugurado como Delegación de Incendios en febrero de 1884. Un parque con una puerta de vehículos tan histórica como angosta, con una plataforma giratoria del patio, donde entraban los camiones de frente, se giraban y se dejaban listos para salir otra vez. Fue antes puesto, con cuba y bomba tirado por mulos y después caballos, para ir más rápidos. Allí llegó el primer vehículo de motor en 1908, un Bayart-Clement, para el médico, el corneta y los jefes​.

Atentado de ETA en el módulo D de la Terminal 4 de Barajas (2006)

En marzo del 2020, un virus especialmente contagioso que llamaron Covid-19, inicia una pandemia tanto en nuestro país como en el resto del mundo​. Además de tareas las propias de bomberos, se realizan tareas como distribución de alimentos, descontaminación de residencias de ancianos y hospitales. En el improvisado hospital de IFEMA, mientras que los bomberos de la Comunidad de Madrid, gestionaban el almacén de productos médico sanitario, los bomberos del Ayuntamiento construyeron en las galerías subterráneas de los pabellones un sistema de oxígeno, aire y vacío junto a autónomos y parados voluntarios en apenas 3 días​. En la Torre Ámbar, en la calle Dulce Chacón, se declara un incendio en su azotea por una barbacoa mal apagada, y acabó devorando los tres últimos de sus 20 plantas.

En enero del 2021, una gran nevada provocada por una borrasca (denominada Filomena) soterró Madrid bajo casi 50 cm de nieve. Provocó el caos en la ciudad durante varios días y los bomberos tuvieron que emplearse a fondo para dar respuesta a las centenares de intervenciones que Madrid reclamó (un 400% más de intervenciones). Personas atrapadas en vehículos, rescates, llevar a gente a hospitales, retirada controlada de acumulación de nieve en cornisas, árboles y ramas caídos fueron algunos de éstos trabajos. El 20 de enero de 2021, se produce una explosión en un edificio de la calle Toledo (muy próximo al parque) con dos fallecidos y 8 heridos​.

<<Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >>

Intervenciones relevantes

Incendio del Alcázar Real

Real Alcázar de Madrid (1710)

En la nochebuena del año 1734, a las 00:15 de la noche, los guardas del palacio dan aviso de un fuego en el Real Alcázar. Se cree que se originó en el taller del pintor Jean Ranc. El fuego destruyó la Torre Dorada que guardaba en su tercera planta los Derechos Reales de las Indias y otros documentos con valiosa información. El corregidor Marqués de Montealto, mandó 29 matafuegos con su capataz y a 18 mozos mangueros. El incendio que duró hasta el día 4 de enero, fue de tanta envergadura que el Alcázar quedó toralmente destruido y ocasionó grandes pérdidas de obras de arte. Las Meninas de Velázquez o el cuadro de Carlos V en Mühlberg de Tiziano consiguieron sobrevivir, pero unas 500 obras de arte sucumbieron al fuego, como varias obras de Velázquez o Rubens ​. Los trabajos de desescombro durarían aún dos años más y en 1738, Felipe V mandaría construir el actual Palacio Rea​l.

<«Capítulo I». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

Incendios de la Plaza Mayor

Incendio de la Plaza Mayor (1790)

Tres incendios se produjeron en la Plaza Mayor (antigua Plaza del Arrabal) en menos de dos siglos. El primero del 6 de julio de 1631, se inició en un horno de una casa particular apenas una década después de su inauguración, y duró tres días. Las consecuencias fueron trágicas. Un total de trece personas perdieron la vida y más de medio centenar de viviendas acabaron arrasadas bajo las llamas​​. El segundo incendio producido en la Plaza se produjo la noche del 2 de agosto de 1672 y la gran perjudicada, sin duda alguna, sería la Casa de la Panadería (se salvó la planta baja y el sótano). Un farolillo colocado muy cerca de un cuadro de la Virgen del Rosario sería el culpable de que toda la plaza comenzara a arder rápidamente y sin control causando la muerte de 24 personas​. Aunque todos los incendios fueron bastante dañinos, el tercero fue el peor que destruyó un tercio de su perímetro. Este ocurrió la noche del 16 de agosto de 1790. Las llamas aparecieron entre el Arco de Cuchilleros y la entrada de la calle Toledo y las casas de la Plaza Mayor se tiraron nueve días ardiendo. También ardieron edificios cercanos a la plaza, como fue la iglesia de San Miguel de los Octoes, que estaba situada en el lugar que hoy ocupa el mercado con el mismo nombre. Para sofocar tal incendio se llamó a varios arquitectos, entre ellos Juan de Villanueva y como el agua no hacía nada, se decidió derribar los edificios para que los escombros actuaran de cortafuegos​. Hubo un cuarto incendio casi sin consecuencias el 26 de noviembre de 1804 pero los zapadores del cuartel Suizo cortaron el incendio​.

Incendio en el Teatro Novedades

El teatro Novedades, de 1857, situado en la calle Toledo, frente al mercado de la Cebada, con aforo para 1.500 personas, sufrió dos incendios aunque sin graves consecuencias, pero el destino quiso que el domingo 23 de septiembre de 1928, a las nueve y cinco de la noche, se desatase un incendio en este teatro durante su representación de la obra "La mejor del puerto" por culpa de un cortocircuito en unos farolillos cuando una escena un barco surcaba el río Guadalquivir en Sevilla, e inmediatamente transmitió el fuego a unos decorados. El público no se percató del incendio porque descendieron el telón, se afanaron en atajarlo y el maestro Cayo Vela hizo tocar la orquesta un pasodoble para tranquilizar al público y nadie abandonó sus asientos. De pronto el fuego prendió el telón, que se desplomó sobre el foso y al darse cuenta de las llamas, el pánico se impuso, los espectadores trataron rápidamente de alcanzar los pasillos laterales formando aglomeraciones en las salidas. Pese a los esfuerzos resultó imposible sofocar el incendio. A las 12 y media de la noche se dio por concluida la extinción.

De los 67 cadáveres recuperados del interior del teatro por los bomberos, 54 cuerpos fueron encontrados en una longitud de dos tramos de la llamada escalera trágica.

Hasta el 25 de septiembre los fallecidos fueron 72, pero aumentaría esta cantidad hasta ochenta según lo reflejan otros trabajos relacionados con este siniestro. Las victimas tenían quemaduras de primer y segundo grado, pero en su mayoría murieron por asfixia​​​.

<«Capítulo XVIII». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

<«El Incendio del "Novedades" Capítulo CCXXXI». Revista Telerradio (España del siglo XX). >

Accidentes aéreos de Barajas

El 7 de diciembre de 1983, a las 9:50 de la mañana, tan sólo diez días después del accidente en Mejorada del Campo, se produce un nuevo accidente aéreo, esta vez en Barajas en la pista de despegue. El Boeing 727 de la compañía Iberia con destino Roma con 93 pasajeros, se dispone a despegar, apenas recorridos 1000 metros y a una velocidad de 260 km/h con una intensa niebla, en ese momento cruzó la pista un DC-9 de la compañía Aviaco, que se desintegra al instante. El balance total fue de 93 muertos y 44 supervivientes, en el avión Aviaco no hay supervivientes.

<«Capítulo XXIII». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

<«Tragedia en Barajas». Revista el Socialista número 340. 1983. >

El 20 de agosto de 2008, un avión de la compañía Spanair, en concreto el vuelo JK5022 con destino Canarias, sufre un accidente tras el despegue desde la pista 36L. El avión indicó un primer fallo, y se abortó el despegue, supuestamente se subsanaron dichos fallos, pero cinco segundos después de empezar a volar se activó el sistema de aviso de entrada en pérdida y posteriormente el de excesivo ángulo de alabeo ​. De los 172 pasajeros y tripulantes a bordo, 154 murieron y 18 sobrevivieron. En la operación de rescate intervinieron alrededor de 230 sanitarios, 170 policías, 70 bomberos (AENA, Ayuntamiento de Madrid y Comunidad de Madrid) y cerca de 45 ambulancias. Se montaron cuatro hospitales de campaña en el lugar​​. Los heridos fueron trasladados a los hospitales de La Paz, Ramón y Cajal, 12 de Octubre e Infanta Sofía​.

Discoteca Alcalá 20

Eran las cinco menos cuarto de la madrugada del día 17 diciembre 1983, cuando no había ya música y mucha gente había abandonado la sala (quedando aún unas 300 personas), se inició un incendio tras las cortinas rojas del escenario. Intentaron usar un extintor para apagar las llamas, pero en medio minuto, el fuego ya alcanzaba la pista y los palcos que la flanquean. Se empezó a desalojar en orden, pero rápidamente empezaron los atropellos, empujones y gritos. A las 4:57 llegan los bomberos, que hacen dos instalaciones para atacar al fuego por dos lados opuestos de la sala, a la vez que por la calle Alcalá se realizaban rescates de personas caídas en la escalera principal y lateral. Los bomberos entraron con equipos autónomos de respiración por la salida de emergencia de la calle Arlabán y a su vez otra dotación entró por la Calle Alcalá encontrándose a la mayoría de las personas (la mayoría asfixiadas). A las 8 y diez de la mañana se dio por concluida la intervención con un total de 81 personas muertas y 24 heridas​​​.

<«Capítulo XXIII». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

Incendio de los Almacenes Arias de 1987

El 4 de septiembre de 1987 se recibía en la central del servicio, a las ocho menos veinte de la tarde, el primer aviso por un incendio en la tercera planta los Almacenes Arias. Los bomberos apenas tardaron cuatro minutos en llegare hicieron dos instalaciones por fachada hasta la segunda planta y desde ésta, por las escaleras mecánicas y escalera otra a la tercera. Se accedió al otro edificio de los hermanos Arias ( al número 31) por la tercera planta, ya que no podía desde la planta baja. A las 22:30, fue dominado el incendio en el número 29, procediendo a refrescar este edificio y a continuar con la extinción del número 31 que se estaba haciendo difícil al estar las puertas obstruidas con paquetes, las escaleras llenas de enseres, e incluso alguna tabicada. Pero aproximadamente a las tres menos veinte de la madrugada del día 5, cuando se estaban realizando los trabajos de enfriamiento, sobrevino el hundimiento súbito del número 29 sepultando a diez bomberos que fallecerían. Se continuó con la extinción debido a que era era imposible realizar rescates debido al riesgo de caída del muro medianero con el número 31. El último bombero fallecido fue rescatado a las 3:33 del día del día 9 de septiembre. Al incendio de "Saldos Arias" acudieron un total de 88 bomberos​.

El alcalde de Madrid, D. Juan Barranco, impuso sobre los féretros de los fallecidos la medalla de oro de Madrid, en el patio de Cristales del Ayuntamiento.

En el lugar de la catástrofe se construyó un edificio, que albergó los Cines Acteón , y pasados diez años del siniestro, se adosaría al edificio una placa conmemorativa al cuerpo y a los diez bomberos que dejaron allí su vida.

<«Capítulo XXIV». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

Incendio del Palacio de Deportes

El 28 de Junio de 2001, tres operarios trabajaban sobre la cubierta del Palacio de los Deportes de Madrid sellando los agujeros del techo para acabar así con las goteras. Uno de los obreros estaba pegando la tela asfáltica a las placas de aluminio con un soplete cuando se resbaló y la herramienta se le cayó de las manos, prendiendo entonces la techumbre sobre las 8:10. El fuego se propagó rápidamente por la zona interna de la cubierta (capa de madera, chapas metálicas, fibra de vidrio y tela que recubrían esta parte del estadio) y, a pesar de que los trabajadores avisaron al teléfono de emergencias 112, las cuatro dotaciones de bomberos que fueron a la zona no pudieron hacer nada (terminaron movilizándose 139 bomberos). El incendio se había extendido por gran parte de la techumbre, debilitando los vigas de sujeción y semiarcos de acero, lo que hizo que la cúpula de 97 metros del pabellón se derrumbara una hora más tarde en torno a las 9:00 y que, tras su extinción completa hacia las 10.00 de la mañana (dos horas después de cuando se prendió), dejara el estadio totalmente destruido​. En el momento del derrumbe, un bombero estaba sobre la cubierta y cayó 4 metros hasta las gradas sufriendo traumatismos leves. La mayoría de los asientos de plástico se derritieron y el suelo de las gradas, de planchas de aglomerado de madera, quedó carbonizado por un fuego cuyo humo fue visible desde una distancia de 50 km​.

<Redondo Toral, Juan M. (2002). Memorias de un bombero. la esfera de los libros. ISBN 84-9734-056-6. >

Incendio de la Torre Windsor

Incendio Torre Windwor (2005)

Eran las once y diecinueve minutos de la noche del 12 de febrero de 2005, cuando un vigilante de seguridad llama al 080 e informa que hay fuego en la planta 21 del edificio Windsor, en uno de los rascacielos más emblemáticos de la capital (28 plantas y106 metros de altura). Los bomberos del parque sexto llegaron a las 23:25 y rápidamente se dirigieron a la planta afectada. Estuvieron cerca de controlar el incendio, pero la rotura de un gran ventanal avivó el fuego de modo que las llamas alcanzaron tales proporciones que produjeron hundimientos de falsos techos y del cableado de la construcción. Un grupo de bomberos quedó atrapado (tres gravemente intoxicados, uno de ellos inconsciente), teniendo que ser rescatados. A la una de la mañana, el fuego ocupaba cuatro plantas, y las diferentes rotura de muros y caída de objetos, el jefe de guardia ordenó desalojar el edificio.

Sobre las tres de la madrugada las llamas habían bajado hasta la planta 17ª, denominada planta técnica, ésta debía frenar el fuego pero saltó violentamente y bajó hacia los pisos inferiores. Se calcula que los bomberos gastaron unos seis millones de litros de agua en su extinción, y trabajaron unos 180 bomberos con 32 vehículos, además de 25 efectivos y 8 vehículos de los bomberos de la Comunidad de Madrid. Este edificio estaba reformándose adaptándose a las actuales normativas de prevención de incendios (no tenía rociadores por ejemplo).

<«Capítulo XXV». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

La Borrasca Filomena

Entre los días 8 y 9 de enero del 2021 una gran nevada provocada por una borrasca (denominada Filomena) soterró Madrid bajo casi 50 cm de nieve​. La nieve caída durante la noche del 8 al 9 provocó el caos en la ciudad durante varios días creando una desproporción entre los medios disponibles y los trabajos a realizar. Hasta 1.215 intervenciones entre los días 8 y 13 de enero (un 400% más de lo habitual) ​. El día de la gran nevada, el 112 gestionó 84.000 llamadas​. Las labores de los bomberos se basaron en rescates de gente atrapada en coches, facilitar el acceso a personas hacia los hospitales, descargar la peligrosa nieve acumulada en cornisas de edificios, cortar y retirar árboles y ramas caídas. Se dice que quedaron dañados un 40% de todos los árboles de la capital (unos 650.000)​.

Red de parques de bomberos

Parque de Bomberos nº 1, Calle Santa engracia, Madrid

En total hay 12 parques de bomberos, divididos en cuatro zonas (norte, sur, centro y este)​​.

• Parque de Bomberos 01. Chamberí. CALLE SANTA ENGRACIA 118.
• Parque de Bomberos 02. Salamanca. CALLE RUFINO BLANCO 2.
• Parque de Bomberos 03. Centro. RONDA SEGOVIA 95.
• Parque de Bomberos 04. Tetuán. CALLE EMILIA 40.
• Parque de Bomberos 05. Usera. PASEO SANTA MARIA DE LA CABEZA 95.
• Parque de Bomberos 06. Centro. CALLE SAN BERNARDO 68.
• Parque de Bomberos 07. San Blas. AVENIDA HELLIN 52.
• Parque de Bomberos 08. Puente de Vallecas. CALLE PIO FELIPE 24.
• Parque de Bomberos 09. Fuencarral - El Pardo. AVENIDA MONFORTE DE LEMOS 20.
• Parque de Bomberos 10. Villaverde. CALLE SAN NORBERTO 54.
• Parque de Bomberos 11. Hortaleza. CALLE MESENA 146.
• Parque de Bomberos 12. Latina AVENIDA POBLADOS 48.

El casco de bombero

Carmena celebra la Virgen de la Paloma junto a las madrileñas y madrileños 01

El origen del casco de bombero madrileño podría decirse que comenzó en 1876, con la aprobación de un nuevo Reglamento de Mangueros, que establecía como uniforme autofinanciado por ellos mismos, un casco de cuero negro galvanizado con guarniciones de latón similares a los usados en esa época en Alemania. El primer director del Cuerpo, Isidoro Delgado y Vargas, dotó a los bomberos en 1899 de otro modelo de casco de similar material hasta que en 1959 se retiraría el cuero y se sustituiría por los de metal, similar al modelo M34 alemán conocido popularmente como calientaorejas. El casco metálico estaba pintado en negro, con interior de cuero, y una cresta y escudo en Latón.

A finales de 1983, éstos cascos metálicos serían sustituidos por unos de fibra, desapareciendo con ellos también la hombreras. Este casco era el MSA Topgard, de estilo americano, gran pantalla transparente sujetada por dos grandes tuercas laterales con cresta integrada de la empresa MSA de Pittsburgh. En 1992, se entregarían los nuevos cascos integrales CGF Gallet F1​, un casco de bombero semi-integral de poliamida reforzado con fibra de vidrio, es una protección sin igual contra la radiación, las proyecciones y los impactos con espesores de 2 a 3 mm (en los bordes 5mm) con un de 1,2 kg, e incluye gafas protectoras plegables integradas y una visera dorada como protección contra la radiación. Como cubrenucas dispone de una tela de aluminio nomex. Como casco de intervenciones técnicas o incendios forestales, el Cuerpo dispone del casco Dragër HPS 3500​.

Actualmente el color del casco indica el rango, por ejemplo el color blanco para el oficial, el gris para suboficial, el rojo para el sargento, el naranja para el sargento conductor y el negro con raya roja para cabos y negro para bomberos y conductores​​. Aunque no es bombero, si se precisa su presencia, el alcalde lo lleva azul.

<Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

• 
  Casco metálico de los años 70
• 
  Casco MSA de los años de 1983
• 
  Casco Gallet F1 de los años 1990
• 
  Casco de sargento Gallet F1 década de 2010

Rangos

Todos los funcionarios del Cuerpo de Bomberos se agruparán en una sola línea jerárquica, estructurado en dos escalas: la Técnica o de Mando y la Operativa o Ejecutiva. La primera estará compuesta por: Jefe de Departamento o Inspector Jefe, Jefe de Sección o Subinspector y Oficiales. En la escala Ejecutiva u Operativa, existirán las categorías de Suboficiales, Sargentos, Cabos, Bombero y Bombero conductor.

<Reglamento del Cuerpo de Bomberos. Boletín Oficial del Ayto. Madrid. 1984 (modificado en 2001). >

Sociedad benéfica

El Conde de Romanones aprobó el 26 de agosto de 1898 un reglamento para caja de socorros con destino al Cuerpo. Al fallecer un bombero en acto de servicio y su familia no podía obtener los recursos necesarios para el entierro y en ocasiones tenían que recurrir a préstamos. Este hecho, sería el inicio de lo que en futuro sería la Sociedad Benéfica, siendo el primer presidente y socio Isidoro Delgado y Vargas, el primer director del Cuerpo de Bomberos.

La historia de esta sociedad viene recogido en un libro de Luis Mariano Muñoz Martínez.

<«Capitulo XI». Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (matafuegos al Windsor 1577-2205). 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

Bomberos ayudan

Casco Gallet con logo bomberos ayudan

Es una Asociación de Utilidad Pública creada en el año 2014 por un grupo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid que viendo la grave situación social por la que estamos atravesando, decidió traspasar fronteras y ayudar a los conciudadanos también cuando estamos fuera de servicio trabajando con diferentes asociaciones​​​. Estas acciones las realizan bomberos y un grupo de voluntarios en su tiempo libre. Funciones:

• Se ponen en contacto con diferentes asociaciones viendo las dificultades que tienen para asistir a terceros.
• Comprueban que su proyecto es real y que la ayuda llega de forma directa e inmediata a los más necesitados.
• Ofrecen la ayuda que por cuestiones logísticas que no pueden realizar (falta de personal, vehículos, campañas divulgativas, formativas, colectas, etc.).
• Difunden sus proyectos, reforzando si cabe, con el aval de nuestro apoyo e imagen.
• Hacen de intermediarios entre estas asociaciones y organismos colaboradores cuando es necesario.
• Venden objetos de merchandising y calendarios solidarios para financiar tanto proyectos propios como todos aquellos que son de apoyo a otras asociaciones.

• Organizan campañas o eventos para recaudar alimentos, ropa, objetos diversos o dinero.
• Visitan a niños que luchan en los hospitales para recibir la fuerza de los bomberos.

<«Página Oficial Bomberos Ayudan». Consultado el 1 de junio de 2021. >

<«Calendario Bomberos Ayudan 2021». 2021. >

Fiesta de la Paloma

Un bombero descuelga la imagen de su patrona, la Virgen de la Paloma

El actual templo de la Virgen de la Paloma data de 1912. La devoción del Cuerpo por esta castiza Virgen comenzó en 1940. Al parecer, al estar el parque 3º cerca de la iglesia, les pidieron descender el cuadro porque pesaba mucho. Otras personas cuentan, que el inicio comenzó porque unos días antes de la procesión , la carroza que portaba el cuadro se incendió y solicitaron a los bomberos un vehículo del parque tercero para transportarla durante la ceremonia. La tercera teoría es que el día de la procesión fue detenido Antonio Armas (médico del servicio), y que al estar con los ojos tapados escuchó una voz que decía soltad a este hombre pues es inocente. Un bombero le salvó, y Antonio pidió sacar el cuadro de la virgen en procesión con los bomberos.

En la fiesta, el 15 de agosto, los bomberos se encargan de descender el cuadro, instalarlo en la carroza y lo llevan en procesión. Al finalizar el recorrido, los bomberos ofrecen una exhibición de ejercicios y maniobras.

<Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. >

El veterano y el campana

El veterano, es el bombero más experiencia de los componentes de una dotación y actúa como bombero número 2 (de una dotación de bomba) y actúa como pareja del cabo (o número 1) para el primer ataque a un fuego. Su experiencia es clave para acometer los primeros instantes de una intervención.

<Redondo Toral, Juan M. (2002). Memorias de un bombero. la esfera de los libros. ISBN 84-9734-056-6. >

En cambio, el campana era tradicionalmente el bombero de menor antigüedad de entre todos sus compañeros dentro de una dotación de un coche, e iba en los siniestros en el asiento correspondiente a la campana de aviso haciéndola sonar. También tenían la función de ir a casas de vecinos o donde fuera a pedir refuerzos a la central por teléfono. Este apelativo se usaba ya en los inicios de la década de 1900. También se le denominaba corneta, ya que daba los toques correspondientes durante el siniestro y en los inicios de la guardia.

En su libro, Juan M. Redondo le define como " El campana, nervioso, ansioso por descubrir los secretos del fuego, necesitando vitalmente acercarse hasta él, tocarle, quiere probarse a sí mismo, diciéndole que no le tiene ningún miedo y que le tiene ganas: así son los jóvenes". < Redondo Toral, Juan M. (2002). «Capítulo 2». Memorias de un bombero. la esfera de los libros. ISBN 84-9734-056-6. >

Aunque se desconoce el origen, sin connotaciones xenófobas, antes de ser campana, desde que aprueban la oposición hasta que toman posesión de su cargo tras la formación, se les denomina "chinos"​, aunque este apelativo suele perdurar en el tiempo hasta que ingresa una nueva promoción.

Club deportivo bomberos de Madrid

El Club Deportivo se fundó con el objetivo de fomentar el deporte dentro del cuerpo de bomberos de Madrid y, a su vez, organizar eventos deportivos en los que puedan participar los ciudadanos y así poder tener un contacto más directo hacia ellos. Los orígenes de este club datan del año 1984, cuando dos compañeros Enrique López Vicueña (Willy) y Ángel Sánchez (Toti), fundaron la antigua agrupación deportiva. Estuvieron al frente de la agrupación hasta el año 1992, siendo relevados en el cargo por José Antonio Gómez Milara y Juan Carlos Campaña (Chino). Con el paso de los años se incorporan nuevos miembros en la junta directiva. En este nuevo periodo la Agrupación comienza a realizar actividades y asistir a competiciones que hasta entonces no se había participado, como las olimpiadas de policías y bomberos, siendo la primera vez en el año 1999 en Estocolmo (Suecia). Se participo en todas las olimpiadas hasta el año 2003 en Barcelona. A partir de esta fecha, por motivos laborales, que afectaron a la agrupación, esta desapareció. Una vez solucionados estos problemas empezó una nueva etapa en donde surgió el actual Club Deportivo Bomberos de Madrid​.

Carrera de los bomberos

Carrera de los bomberos (2017)

La Carrera Bomberos de Madrid, está organizada por el Club Deportivo de Bomberos con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid, suele tener 10 km por las calles de la capital y empezó a celebrarse en el 2011​. A modo de homenaje esta carrera guarda siempre un respetuoso minuto de silencio antes de la salida en memoria de todos los bomberos caídos en acto de servicio.

Carrera vertical

Es una de las pruebas deportivas más espectaculares de Madrid, la Carrera Vertical Torre Espacio​.

La prueba tiene dos modalidades: una para corredores populares y otra reservada para bomberos con su equipo. En la primera de ellas los participantes tienen el gran reto de subir corriendo los 224 metros de desnivel vertical hasta llegar al piso 55 del edificio Torre Espacio.

Una vez terminan de subir hasta la azotea de Torre Espacio los 600 corredores aproximadamente, comienza la prueba de Bomberos profesionales. En este caso suben hasta la planta 33 pero con todo el equipo de trabajo que supone casi 30 kilos extras​.

El trust

Se denomina " trust" (Esta palabra anglosajona significa confianza) a un sistema de autogestión entre los bomberos para gestionan entre ellos las comidas y cenas del día, que suelen hacer juntos: se organizan en equipos y unos se encargan de hacer la compra, otros de cocinar, otros friegan... Normalmente los roles están bastante definidos​. A la gente que no participa en el trust se les denomina, los rusos, aquellos bomberos que comen por libre. Hay turnos con varios trust, de vegetarianos, los que se cuidan, los de la roca (porque escalan)... ​​.

Museo municipal de los bomberos de Madrid

Camión Santana 1300 Bomberos Madrid

El museo, ubicado en la calle Boada 4 (metro de Buenos Aires), se abrió al público en 1982, y reúne todas las herramientas, equipos y vehículos, que ha utilizado el Cuerpo de Bomberos a lo largo de su historia​​.

Vehículo Magirus

Se encuentra organizado en varias áreas temáticas:

• Sección Documental que cuenta con reproducciones fotográficas de diversas intervenciones de finales del siglo
• Sección de Vehículos utilizados durante los últimos 400 años.
• Sección de Medios de Extinción, compuesta por diversos modelos de extintores y una colección de surtidores de distintos tipos y épocas
• Sección de Comunicaciones, donde se exponen varios equipos de transmisores y radioteléfonos
• Sección de Protección Respiratoria, con caretas de diversas épocas, pulmotores y equipos de respiración
• Sección de Trajes de Protección
• Sección Sanitaria
• Sección de Uniformes de época, trajes de gala, cascos nacionales e internacionales y Medios Auxiliadores

Entre los diferentes enseres con los que cuenta el Museo destacan vehículos de todas las épocas, colecciones de cascos de todo el mundo y una gran variedad de herramientas utilizadas por los bomberos en diferentes épocas. En este sentido, hay escaleras de 1870, un coche Merry Weather inglés de 1915, el primer vehículo de bomberos destinado a salvamento marítimo (1960) o un coche Seat 1400 para el jefe de guardia de hace más de 30 años​.

En el año 2014 se iniciaron obras de remodelación del museo, se construyeron dos plantas en las que se disponen los usos propios de un museo interactivo como tienda, salón de actos, unidad audiovisual y aula experimental para simular situaciones de incendio. La reforma de la fachada permite diferenciar al museo del conjunto del edificio del Parque 8º e identificarlo como un elemento singular. En la realización de todas estas mejoras se invirtieron 1.815.000 euros (IVA incluido). Las obras se realizarán por la empresa FERROVIAL-AGROMAN S.A., adjudicataria del contrato​​​.

Libros y publicaciones

Algunas de las publicaciones de B. Madrid que han servido de referencia en este artículo

• La prevención contra el incendio: Libro escrito en 1909 por Isidoro Delgado y Vargas​, antiguo Jefe del Servicio. Basado fundamentalmente en la prevención en los teatros y nociones básicas en fuegos en vivienda, como por ejemplo, cerrar puertas y ventanas y colocar trapos húmedos bajo éstas​​.

• Revista Bombero Rojo: revista de la posguerra elaborada por UGT
• Memorias de un bombero: escrito en 2002 por el jefe del Departamento Juan M. Redondo Toral y presidente de la Sociedad Benéfica. El libro narra experiencias reales propias y ajenas de bomberos en múltiples y variadas intervenciones como Almacenes Arias , el atentado de Carrero Blanco, el derrumbamiento de Gaztambide o el Incendio del Palacio de los Deportes.
• Historia del cuerpo de bomberos de Madrid: De los matafuegos al Windsor (1577-2005). Con este libro de Juan Carlos Barragán Sanz y Pablo Trujillano Blasco, escrito en 2006, se pretende resaltar los problemas, sucesos y acontecimientos más notables en el desarrollo de esta historia, un fluido y resumido repaso del funcionamiento del servicio de incendios de la Villa y Corte, donde se aprende de los reglamentos sobre prevención y régimen interno, y de la importantísima instrucción sobre incendios sancionada por S.M. Carlos IV.
• Yo fui bombero: Este libro de 2017, es una recopilación de anécdotas, casos curiosos y hechos emblemáticos que nos cuenta Juan M. Redondo, jefe del Departamento de Extinción de Incendios del Ayuntamiento de Madrid y durante varios años presidente de la Sociedad Benéfica de Bomberos. Narra como se siente un bombero al sacar con vida a una persona bajo tres plantas derrumbadas; el desasosiego y la impotencia ante un fuego silencioso; la desolación frente a un incendio forestal como el de Abantos; la resignación de ver el fin del Palacio de los Deportes… Así es la vida de un bombero, profesión que lo es para siempre; un trabajo a veces apasionante, a veces dramático, a veces enternecedor, que va dejando una huella imborrable en quienes lo ejercen.

• El último matafuego. El incendio de la Plaza Mayor. Madrid 1790: Libro de 2017 de Juan Carlos Barragán Sanz basado en los hechos reales de uno de los incendios más graves de Madrid y narra la historia de amor de José, matafuego (bombero de la época) que decide por fin comenzar su historia de amor con María, en el verano de 1790, saltando la muralla que rodea Madrid. Pero tres días después, la noche del 16 de agosto, sus vidas, como las del resto de madrileños cambiarán.
• Cuando las sirenas no eran las nuestras: El libro escrito en 2020 está documentado con fotografías de la época y se complementa con el ‘Cuaderno de Registro de los Bombardeos de Madrid’, donde se enumeran centenares de intervenciones originadas por los bombardeos durante la Guerra Civil y sus localización​. Su autor, Juan Miguel Redondo, oficial de bomberos ya jubilado​. Durante los 1.000 días que duró la Guerra Civil española, los bomberos de Madrid recogieron exhaustivamente en sus libros de registro las salidas que realizaban cada día especificando hora, día y mes, así como las dotaciones enviadas. Ello, unido a los expedientes personales de los protagonistas que todavía se conservan en los archivos del servicio, han permitido al autor desgranar las actuaciones, toma de decisiones, miedos, silencios, recelos y consecuencias que transcurrieron durante el enfrentamiento civil en un servicio esencial para la ciudad. El contenido de estas historias se encuentra fuertemente marcado por el desarrollo del conflicto bélico que indudablemente influyó en estos funcionarios: “Fueron tiempos difíciles en los que, simplemente por ser jefe del servicio, tu vida corría peligro, como así ocurrió en algunos casos”. Unos años en los que el Cuerpo de Bomberos sufrió los vaivenes de la propia guerra: “Bomberos que abandonaban el servicio porque se marchaban al frente o que resultaban tiroteados en el barrio de Argüelles mientras acudían a un siniestro”​.

Referencias

«Reglamento cuerpo Bomberos Madrid». B.O.Ayto Madrid. 1984. 

«Página oficial del ayuntamiento de Madrid www.madrid.es/bomberos». Consultado el 6 de mayo de 2021. 

«Memorias de Bomberos del año 2007 al 2019». 2007-2019. Consultado el 6 de mayo de 2021. 

Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Madrid: Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3. 

Redondo Toral, Juan M. (2002). Memorias de un bombero. la esfera de los libros. ISBN 84-9734-056-6. 

«Página oficial del periódico ABC». Consultado el 24 de mayo de 2021. 

«Página oficial del Periódico El País». Consultado el 24 de mayo de 2021. 

«Pagina bomberos Madrid en Twitter». Consultado el 24 de mayo de 2021. 

«El Incendio del "Novedades" Capítulo CCXXXI». Revista Telerradio (España del siglo XX). 

«Tragedia en Barajas». Revista el Socialista número 340. 1983. 

«Pánico en un edificio incendiado». Periódico La Vanguardia. 25 de septiembre de 1960. 

Véase también

Cuerpo de bomberos de la Comunidad de Madrid

Cascos de bombero

Casco de bombero Gallet F1

Samur-Protección Civil